Jua 8:1  Y Jesús fuese al monte de las Olivas.
Jua 8:2  Y al alba de nuevo vínose al santuario, y todo el pueblo vino a él, y sentado enseñábales.
Jua 8:3  Y traen los escribas y los fariseos a él una mujer en adulterio sorprendida; y poniéndola en medio,
Jua 8:4  dícenle: «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el hurto(a)  mismo, adulterando;
Jua 8:5  y en la ley Moisés nos mandó a las tales apedrear. Tú, pues, ¿qué dices?»
Jua 8:6  Y esto decían, tentándole para tener cómo acusarle. Mas Jesús hacia abajo encorvándose, con el dedo escribía en la tierra.
Jua 8:7  Y, como se quedaron preguntándole, desencorvándose, dijo a ellos: «El inculpable de vosotros primero la piedra sobre ella arroje»;
Jua 8:8  y de nuevo hacia abajo encorvándose, escribía en la tierra.
Jua 8:9  Y ellos, oyendo, salíanse uno a uno, empezando por los ancianos; y quedó sólo Jesús y la mujer en medio parada.
Jua 8:10  Y desencorvándose Jesús y a nadie viendo, fuera de la mujer, díjola: «¡Mujer! ¿dónde están aquéllos, los acusadores tuyos? ¿Nadie te ha condenado?»
Jua 8:11  Y ella dijo: «Nadie, Señor». Díjole Jesús: «Ni yo te condenaré; anda, y ya no peques».
Jua 8:12  De nuevo, pues, les habló Jesús, diciendo: «Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no se andará, no, en la obscuridad, sino tendrá la luz de la vida».
Jua 8:13  Dijéronle, pues, los fariseos: «Tú de ti mismo testificas; tu testimonio no es verdadero».
Jua 8:14  Respondió Jesús y díjoles: «Aunque yo testifico de mí mismo, mi testimonio verdadero es; porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo y a dónde voy.
Jua 8:15  Vosotros, según la carne, juzgáis; yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  Y si también yo juzgo, el juicio el mío verdadero es; porque solo no soy, sino yo y el que me ha enviado —Padre.
Jua 8:17  Y también en ley, la vuestra, escrito está que de dos hombres el testimonio verdadero es;
Jua 8:18  Yo soy el que testifico de mí mismo y testifica de mí el que me ha enviado —Padre».
Jua 8:19  Decíanle, pues: «¿Dónde está tu padre?» Respondió Jesús: «No a mí sabéis, ni a mi Padre; si a mí supieseis, también a mi Padre sabríais».
Jua 8:20  Estas palabras habló en el gazofilacio, enseñando en el santuario; y nadie prendióle, pues aún no había venido su hora.
Jua 8:21  Díjoles, pues, de nuevo: «Yo me voy, y buscaréisme; y en vuestro pecado moriréis; a donde yo me voy, vosotros no podéis venir».
Jua 8:22  Decían, pues, los judíos: «¿No se habrá de matar, que dice: «A donde yo me voy, vosotros no podéis venir».
Jua 8:23  Y decíales: «Vosotros de lo de abajo sois; yo de lo de arriba soy; vosotros de este mundo sois; yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Digo, pues, a vosotros que moriréis en vuestros pecados; porque, si no creyereis que yo soy(b) , moriréis en vuestros pecados».
Jua 8:25  Decíanle, pues, «Tú ¿quién eres?» Díjoles Jesús: «Desde luego(c)  ¿qué también hablo a vosotros?
Jua 8:26  Mucho tengo de vosotros que hablar y juzgar; pero, el que me ha enviado, veraz es; y yo lo que he oído de él, esto hablo al mundo».
Jua 8:27  No conocieron que al Padre les decía.
Jua 8:28  Dijo, pues, Jesús: «Cuando exaltareis al Hijo del hombre, entonces conoceréis que yo soy, y de mí mismo hago nada, sino que, según me ha enseñado mi Padre, esto hablo.
Jua 8:29  Y el que me ha enviado, conmigo está; no me ha dejado solo, porque yo lo agradable a él hago siempre».
Jua 8:30  Esto él hablando, muchos creyeron en él.
Jua 8:31  Decía, pues, Jesús a los que estaban creyendo en él, judíos: «Si vosotros permaneciereis en la palabra la mía, verdaderamente discípulos míos sois;
Jua 8:32  y conoceréis la verdad, y la verdad libertaráos».
Jua 8:33  Respondieron a él: «Simiente de Abrahán somos y a nadie hemos servido jamás; ¿cómo tú dices: que libres seréis?»
Jua 8:34  Respondióles Jesús: «En verdad, en verdad dígoos que todo el que hace el pecado, siervo es del pecado;
Jua 8:35  y el siervo no queda en la casa por el siglo. El hijo queda por el siglo.
Jua 8:36  Si el hijo, pues, os libertare, realmente libres seréis.
Jua 8:37  Sé que simiente de Abrahán sois; empero buscáisme matar, porque la palabra la mía no cabe en vosotros.
Jua 8:38  Lo que yo tengo visto cerca del Padre, hablo; y vosotros, pues, lo que habéis oído cerca del padre(d) , hacéis».
Jua 8:39  Respondieron y dijéronle: «El padre de nosotros Abrahán es». Díceles Jesús: «Si hijos de Abrahán sois, las obras de Abrahán haced;
Jua 8:40  pero ahora buscáisme matar, a un hombre que la verdad os ha hablado que he oído de Dios: esto Abrahán no hizo.
Jua 8:41  Vosotros hacéis las obras de vuestro padre». Dijéronle: «Nosotros de ramería(e)  no hemos nacido: a un padre tenemos: Dios».
Jua 8:42  Díjoles Jesús: «Si Dios vuestro padre fuese, amaríais a mí, pues yo de Dios he salido y llego; pues ni de mí mismo he venido; sino que aquél me envió.
Jua 8:43  ¿Por qué el habla la mía no conocéis? Porque no podéis oír la palabra la mía.
Jua 8:44  Vosotros del padre, del diablo, sois, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. Aquél homicida era, de principio, y en la verdad no se estuvo, porque no hay verdad en él. Cuando hablare la mentira, de lo propio habla; porque mentiroso es y el padre de ella(f) .
Jua 8:45  Pero yo, porque la verdad digo, no me creéis.
Jua 8:46  ¿Quién de entre vosotros me arguye de pecado? Si verdad digo, ¿por qué vosotros no me creéis?
Jua 8:47  El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto vosotros no oís, porque de Dios no sois».
Jua 8:48  Respondieron los judíos y dijéronle: «¿No bellamente decimos nosotros que samaritano eres tú, y demonio tienes?»
Jua 8:49  Respondió Jesús: «Yo demonio no tengo, sino que honro a mi Padre, y vosotros me deshonráis.
Jua 8:50  Y yo no busco mi gloria; hay quien busque y juzgue.
Jua 8:51  En verdad, en verdad dígoos: si alguno mi palabra guardare, muerte no verá, no, por el siglo».
Jua 8:52  Dijéronle los judíos: «Ahora hemos conocido que demonio tienes. Abrahán murió y los profetas, y tú dices: «Si alguno mi palabra guardare, no gustará, no, muerte por el siglo».
Jua 8:53  ¿Qué tú mayor eres que nuestro padre Abrahán; el cual murió y los profetas murieron? ¿Quién a ti mismo haces?»
Jua 8:54  Respondió Jesús: «Si yo me glorificare a mí, mi gloria nada es; es el Padre el que me glorifica, quien vosotros decís que vuestro Dios es;
Jua 8:55  y no le habéis conocido; pero yo le sé. Y, si dijere que no le sé, seré semejante a vosotros: mendaz; empero le sé y su palabra guardo.
Jua 8:56  Abrahán, vuestro padre, alborozóse para ver el día, el mío, y vio y se gozó».
Jua 8:57  Dijeron, pues, los judíos a él; «Cincuenta años aún no tienes, y ¿a Abrahán has visto?»
Jua 8:58  Díjoles Jesús: «En verdad, en verdad dígoos: antes que Abrahán fuese, yo soy».
Jua 8:59  Alzaron, pues, piedras para lanzar sobre él; pero Jesús ocultóse y salió del santuario.

Jua 8:1  Se fue Jesús al monte de los Olivos;"
Jua 8:2  pero, de mañana, otra vez volvió al templo, y todo el pueblo venía a El, y, sentado, les enseñaba.
Jua 8:3  Los escribas y fariseos trajeron a una mujer tomada en adulterio y, poniéndola en medio,
Jua 8:4  le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante delito de adulterio.
Jua 8:5  En la Ley nos ordena Moisés apedrear a éstas; tú ¿qué dices?"
Jua 8:6  Esto lo decían tentándole, para tener de qué acusarle. Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en la tierra.
Jua 8:7  Como ellos insistieron en preguntarle, se incorporó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado, arrójele la piedra el primero.
Jua 8:8  E inclinándose de nuevo, escribía en tierra.
Jua 8:9  Ellos que le oyeron fueron saliéndose uno a uno, comenzando por los más ancianos, y quedó El solo, y la mujer en medio.
Jua 8:10  Incorporándose Jesús, le dijo: Mujer, ¿dónde están? ¿Nadie te ha condenado?
Jua 8:11  Dijo ella: Nadie, Señor. Jesús dijo: Ni yo te condeno tampoco; vete y no peques más."
Jua 8:12  Otra vez les habló Jesús, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no anda en la tiniebla, sino que tendrá luz de vida."
Jua 8:13  Dijéronle, pues, los fariseos: Tú das testimonio de ti mismo, y tu testimonio no es verdadero.
Jua 8:14  Respondió Jesús y dijo: Aunque yo dé testimonio de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde vengo y adonde voy, mientras que vosotros no sabéis de dónde vengo o adonde voy.
Jua 8:15  Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie;"
Jua 8:16  y si juzgo, mi juicio es verdadero, porque no estoy solo, sino yo y el Padre, que me ha enviado.
Jua 8:17  En vuestra Ley está escrito que el testimonio de dos es verdadero.
Jua 8:18  Yo soy el que da testimonio de mi mismo, y el Padre, que me ha enviado, da testimonio de mí.
Jua 8:19  Pero ellos le decían: ¿Dónde está tu Padre? Respondió Jesús: Ni a mí me conocéis ni a mi Padre; si me conocierais a mí, conoceríais también a mi Padre."
Jua 8:20  Estas palabras las dijo Jesús en el gazofilacio, enseñando en el templo, y nadie puso en El las manos, porque aún no había llegado su ñora.
Jua 8:21  Todavía les dijo: Yo me voy, y me buscaréis, y moriréis en vuestro pecado; a donde Yo voy, no podéis venir vosotros."
Jua 8:22  Los judíos se decían: ¿Acaso va a matarse, que dice: A donde Yo voy no podéis venir vosotros?
Jua 8:23  El les decía: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo."
Jua 8:24  Os dije que moriríais en vuestro pecado, porque, si no creyereis que Yo soy, moriréis en vuestros pecados.
Jua 8:25  Ellos decían: ¿Tú quién eres? Jesús les dijo: Es precisamente lo que os estoy diciendo.
Jua 8:26  Mucho tengo que hablar y juzgar de vosotros, pues el que me ha enviado es veraz, y Yo hablo al mundo lo que le oigo a El.
Jua 8:27  No comprendieron que les hablaba del Padre.
Jua 8:28  Dijo, pues, Jesús: Cuando levantéis en alto al Hijo del hombre, entonces conoceréis que soy Yo y no hago nada de mí mismo, sino que, según me enseñó el Padre, así hablo.
Jua 8:29  El que me envió está conmigo; no me ha dejado solo, porque Yo hago siempre lo que es de su agrado."
Jua 8:30  Hablando El estas cosas, muchos creyeron en El.
Jua 8:31  Jesús decía a los judíos que habían creído en El: Si permanecéis en mi palabra, seréis en verdad discípulos míos,
Jua 8:32  y conoceréis la verdad, y la verdad os librará.
Jua 8:33  Respondiéronle ellos: Somos linaje de Abraham, y de nadie hemos sido jamás siervos; ¿cómo dices tú: Seréis libres?"
Jua 8:34  Jesús les contestó: En verdad, en verdad os digo que todo el que comete pecado es siervo del pecado.
Jua 8:35  El siervo no permanece en la casa para siempre; el hijo permanece para siempre."
Jua 8:36  Si, pues, el Hijo os librare, seréis verdaderamente libres.
Jua 8:37  Sé que sois linaje de Abraham; pero buscáis matarme, porque mi palabra no ha sido acogida por vosotros."
Jua 8:38  Yo hablo lo que he visto en el Padre; y vosotros también hacéis lo que habéis oído de vuestro padre."
Jua 8:39  Respondieron y dijéronle: Nuestro padre es Abraham. Jesús les dijo: Si sois hijos de Abraham, haced las obras de Abraham.
Jua 8:40  Pero ahora buscáis quitarme la vida, a un hombre que os ha hablado la verdad, que oyó de Dios; eso Abraham no lo hizo."
Jua 8:41  Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. Dijéronle ellos: Nosotros no somos nacidos de fornicación, tenemos por padre a Dios.
Jua 8:42  Díjoles Jesús: Si Dios fuera vuestro padre, me amarías a mí; porque yo he salido y vengo de Dios, pues Yo no he venido de mí mismo, antes es El quien me ha enviado."
Jua 8:43  ¿Por qué no entendéis mi lenguaje? Porque no podéis oír mi palabra.
Jua 8:44  Vosotros tenéis por padre al diablo, y queréis hacer los deseos de vuestro padre. El es homicida desde el principio y no se mantuvo en la verdad, porque la verdad no estaba en él. Cuando habla la mentira, habla de lo suyo propio, porque él es mentiroso y padre de la mentira.
Jua 8:45  Pero a mí, porque os digo la verdad, no me creéis.
Jua 8:46  ¿Quién de vosotros me argüirá de pecado? Si os digo la verdad, ¿por qué no me creéis?
Jua 8:47  El que es de Dios oye las palabras de Dios; por eso vosotros no las oís, porque no sois de Dios."
Jua 8:48  Respondieron los judíos y le dijeron: ¿No decimos bien nosotros que tú eres samaritano y tienes demonio?
Jua 8:49  Respondió Jesús: Yo no tengo demonio, sino que honro a mi Padre, y vosotros me deshonráis a mí.
Jua 8:50  Yo no busco mi gloria; hay quien la busca y juzgue."
Jua 8:51  En verdad, en verdad os digo: Si alguno guardare mi palabra, no verá jamás la muerte.
Jua 8:52  Dijéronle los judíos: Ahora nos convencemos de que estás endemoniado. Abraham murió, y también los profetas, y tú dices: Quien guardare mi palabra no gustará la muerte nunca.
Jua 8:53  ¿Acaso eres tú mayor que nuestro padre Abraham, que murió? Y los profetas murieron. ¿Quién pretendes ser?
Jua 8:54  Respondió Jesus: Si Yo me glorifico a mí mismo, mi gloria no es nada; es mi Padre quien me glorifica, de quien vosotros decís que es vuestro Dios."
Jua 8:55  y no lo conocéis, pero Yo le conozco; y si dijere que no le conozco, sería semejante a vosotros, embustero; mas Yo le conozco y guardo su palabra."
Jua 8:56  Abraham, vuestro padre, se regocijó pensando en ver mi día; lo vio y se alegró."
Jua 8:57  Le dijeron entonces los judíos: ¿No tienes aún cincuenta años y has visto a Abraham?
Jua 8:58  Respondió Jesús: En verdad, en verdad os digo: Antes que Abraham naciese, era Yo.
Jua 8:59  Entonces tomaron piedras para arrojárselas; pero Jesús se ocultó y salió del templo."

Jua 8:1  Por su parte, Jesús se fue al Monte de los Olivos.
Jua 8:2  Al día siguiente, al amanecer, Jesús regresó al templo. La gente se acercó, y él se sentó para enseñarles.
Jua 8:3  Entonces los maestros de la Ley y los fariseos llevaron al templo a una mujer. La habían sorprendido teniendo relaciones sexuales con un hombre que no era su esposo. Pusieron a la mujer en medio de toda la gente,
Jua 8:4  y le dijeron a Jesús: —Maestro, encontramos a esta mujer cometiendo pecado de adulterio.
Jua 8:5  En nuestra ley, Moisés manda que a esta clase de mujeres las matemos a pedradas. ¿Tú qué opinas?
Jua 8:6  Ellos le hicieron esa pregunta para ponerle una trampa. Si él respondía mal, podrían acusarlo. Pero Jesús se inclinó y empezó a escribir en el suelo con su dedo.
Jua 8:7  Sin embargo, como no dejaban de hacerle preguntas, Jesús se levantó y les dijo: —Si alguno de ustedes nunca ha pecado, tire la primera piedra.
Jua 8:8  Luego, volvió a inclinarse y siguió escribiendo en el suelo.
Jua 8:9  Al escuchar a Jesús, todos empezaron a irse, comenzando por los más viejos, hasta que Jesús se quedó solo con la mujer.
Jua 8:10  Entonces Jesús se puso de pie y le dijo: —Mujer, los que te trajeron se han ido. ¡Nadie te ha condenado!
Jua 8:11  Ella le respondió: —Así es, Señor. Nadie me ha condenado Jesús le dijo: —Tampoco yo te condeno. Puedes irte, pero no vuelvas a pecar.
Jua 8:12  Jesús volvió a hablarle a la gente: —Yo soy la luz que alumbra a todos los que viven en este mundo. Síganme y no caminarán en la oscuridad, pues tendrán la luz que les da vida.
Jua 8:13  Los fariseos le dijeron: —Tú te estás alabando a ti mismo. ¿Cómo sabremos que dices la verdad?
Jua 8:14  Jesús les respondió: —Aunque hable bien de mí, lo que digo es cierto. Porque yo sé de dónde vine, y a dónde voy; sin embargo, ustedes no lo saben.
Jua 8:15  Ustedes juzgan como todos los demás, pero yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  Si lo hiciera, juzgaría de acuerdo a la verdad, porque no juzgo yo solo. Mi Padre, quien me envió, juzga conmigo.
Jua 8:17  La ley de ustedes dice que, para probar que algo es verdad, son necesarios dos testigos.
Jua 8:18  Pues bien, yo hablo bien de mí mismo; y mi Padre, quien me envió, también habla bien de mí.
Jua 8:19  Entonces le preguntaron: —¿Dónde está tu padre? Jesús les respondió: —Si me conocieran, conocerían a mi Padre. Pero como no me conocen, tampoco a él lo conocen.
Jua 8:20  Jesús dijo todo esto mientras enseñaba en el templo, en el lugar donde se ponen las ofrendas. Pero nadie se lo llevó preso, porque aún no había llegado el momento de que todos supieran quién era él realmente.
Jua 8:21  Jesús habló de nuevo: —Yo me voy, y ustedes me buscarán, pero morirán sin que Dios les haya perdonado sus pecados. A donde yo voy, ustedes no pueden ir.
Jua 8:22  Los jefes judíos dijeron: —¿Estará pensando en matarse, y por eso dice que no podemos ir a donde él va?
Jua 8:23  Jesús les aclaró: —Ustedes son pecadores, como todos los que viven en este mundo. Pero yo no soy de este mundo, porque vengo del cielo.
Jua 8:24  Por eso les dije que, si no creen en mí ni en quién soy yo, morirán sin que Dios les haya perdonado sus pecados.
Jua 8:25  Le preguntaron: —¿Y quién eres tú? Jesús les contestó: —¿Por qué tengo que responderles?
Jua 8:26  Más bien, yo tengo mucho que decir de todo lo malo que ustedes hacen. El que me envió dice la verdad, y yo sólo digo lo que le escuché decir.
Jua 8:27  Pero ellos no entendieron que Jesús les estaba hablando de Dios, su Padre.
Jua 8:28  Por eso les dijo: —Ustedes sabrán quién es en realidad el Hijo del hombre cuando me cuelguen de una cruz. También sabrán que no hago nada por mi propia cuenta, sino que sólo digo lo que mi Padre me ha enseñado.
Jua 8:29  Mi Padre nunca me ha abandonado, pues yo siempre hago lo que a él le agrada.
Jua 8:30  Cuando Jesús dijo esto, mucha gente creyó en él.
Jua 8:31  Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él: —Si ustedes obedecen mis enseñanzas, serán verdaderamente mis discípulos;
Jua 8:32  y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
Jua 8:33  Ellos le contestaron: —Nosotros somos descendientes de Abraham, y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Por qué dices que seremos libres?
Jua 8:34  Jesús les respondió: —Ningún esclavo se queda para siempre con la familia para la cual trabaja. El que se queda para siempre es el hijo de la familia; si él así lo quiere, puede dejar en libertad al esclavo. Les aseguro que cualquiera que peca es esclavo del pecado. Por eso, si yo, el Hijo de Dios, les perdono sus pecados, serán libres de verdad.
Jua 8:37  »Yo sé que ustedes son descendientes de Abraham, pero quieren matarme porque no aceptan mis enseñanzas.
Jua 8:38  Yo sólo les digo lo que mi Padre me ha enseñado. Ustedes, en cambio, hacen lo que les ha enseñado su padre.
Jua 8:39  Ellos le dijeron: —¡Nuestro padre es Abraham! Entonces Jesús les contestó: —Si en verdad ustedes fueran descendientes de Abraham, harían lo que él hizo.
Jua 8:40  Pero yo les he dicho la verdad que he escuchado de Dios, y ustedes quieren matarme. ¡Abraham nunca hizo algo así!
Jua 8:41  Pero ustedes hacen exactamente lo mismo que hace su padre. Ellos le contestaron: —¡No nos acuses de tener otro padre! Nuestro único Padre es Dios.
Jua 8:42  Jesús les respondió: —Si en verdad Dios fuera su Padre, ustedes me amarían, porque yo vengo del cielo, donde está Dios. Yo no vine por mi propia cuenta, sino que Dios me envió.
Jua 8:43  Ustedes no pueden entender lo que les digo, porque no les gusta escuchar mi mensaje.
Jua 8:44  El padre de ustedes es el diablo, y ustedes tratan de hacer lo que él quiere. El diablo siempre ha sido un asesino y un gran mentiroso. Todo lo que dice son sólo mentiras, y hace que las personas mientan.
Jua 8:45  »Por eso ustedes no pueden creer que digo la verdad.
Jua 8:46  ¿Quién de ustedes puede acusarme de haber hecho algo malo? Y si digo la verdad, ¿por qué no me creen?
Jua 8:47  Los hijos de Dios escuchan con atención todo lo que Dios dice. Pero ustedes no le ponen atención porque no son sus hijos.
Jua 8:48  Entonces, algunos judíos le dijeron: —Cuando decimos que eres un extranjero indeseable, y que tienes un demonio, no estamos equivocados.
Jua 8:49  Jesús les contestó: —Yo no tengo ningún demonio. Lo que hago es hablar bien de mi Padre; pero ustedes hablan mal de mí.
Jua 8:50  Yo no le pido a la gente que hable bien de mí; es Dios quien lo quiere así, y es él quien juzga.
Jua 8:51  Les aseguro que quien obedezca mi enseñanza, vivirá para siempre con Dios.
Jua 8:52  Ellos le dijeron: —Ahora sí estamos seguros de que tienes un demonio. Nuestro antepasado Abraham murió, y también murieron los profetas. Sin embargo, tú dices que el que te obedezca vivirá para siempre.
Jua 8:53  ¿Acaso te crees más importante que Abraham? Él y los profetas murieron. ¿Qué te estás creyendo?
Jua 8:54  Jesús les respondió: —¿De qué me serviría hablar bien de mí mismo? Mi Padre es el que habla bien de mí, y ustedes dicen que él es su Dios.
Jua 8:55  En realidad, ustedes no lo conocen. Yo sí lo conozco. Lo conozco, y lo obedezco. Si dijera lo contrario, sería un mentiroso como ustedes.
Jua 8:56  Abraham, el antepasado de ustedes, se alegró mucho de que vería el tiempo en que yo vendría al mundo; lo vio, y le causó mucha alegría.
Jua 8:57  Entonces le preguntaron: —Ni siquiera has cumplido cincuenta años de edad. ¿Cómo puedes decir que has visto a Abraham?
Jua 8:58  Jesús les dijo: —Les aseguro que mucho antes de que naciera Abraham ya existía yo.
Jua 8:59  Entonces aquellos judíos quisieron matar a Jesús a pedradas; pero él se mezcló entre la multitud y salió del templo.

Jua 8:1  Jesús se retiró al monte de los Olivos:
Jua 8:2  Y al romper el día volvió según costumbre al templo; y como todo el pueblo concurría a él, sentándose se puso a enseñarlos.
Jua 8:3  Cuando he aquí que los escribas y fariseos traen a una mujer cogida en adulterio y, poniéndola en medio,
Jua 8:4  dijeron a Jesús : Maestro, esta mujer acaba de ser sorprendida en adulterio.
Jua 8:5  Moisés en la ley nos tiene mandado apedrear a las adúlteras. Tú ¿qué dices a esto?
Jua 8:6  Lo cual preguntaban para tentarle y poder acusarle. Pero Jesús se inclinó hacia el suelo, y con el dedo escribía en la tierra.
Jua 8:7  Mas como porfiasen ellos en preguntarle, se enderezó, y les dijo: El que de vosotros se halla sin pecado, que le tire la primera piedra.
Jua 8:8  Y volviendo a inclinarse otra vez, continuaba escribiendo en el suelo.
Jua 8:9  Mas, oída tal respuesta, se iban escabullendo uno tras otro, comenzando por los más viejos, hasta que dejaron solo a Jesús y a la mujer que estaba en medio.
Jua 8:10  Entonces Jesús , enderezándose, le dijo: Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Nadie te ha condenado?
Jua 8:11  Ella respondió: Nadie, Señor. Y Jesús compadecido le dijo: Pues tampoco yo te condenaré. Anda, y no peques más.
Jua 8:12  Y volviendo Jesús a hablar al pueblo, dijo: Yo soy la luz del mundo. El que me sigue, no camina a oscuras, sino que tendrá la luz de la vida.
Jua 8:13  Le replicaron los fariseos: Tú das testimonio de ti mismo; y así tu testimonio no es idóneo.
Jua 8:14  Les respondió Jesús : Aunque yo doy testimonio de mí mismo, mi testimonio es digno de fe. Porque yo sé de dónde he venido, y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo, ni a dónde voy,
Jua 8:15  Vosotros juzgáis de mí según la carne; pero yo no juzgo así de nadie;
Jua 8:16  y cuando yo juzgo, mi juicio es idóneo; porque no soy yo solo el que da el testimonio; sino yo y el Padre que me ha enviado.
Jua 8:17  En vuestra ley está escrito que el testimonio de dos personas es idóneo.
Jua 8:18  Yo soy el que doy testimonio de mí mismo; y además el Padre, que me ha enviado, da también testimonio de mí.
Jua 8:19  Le decían a esto: ¿En dónde está tu padre? Respondió Jesús : Ni me conocéis a mí, ni a mi Padre: si me conocierais a mí no dejaríais de conocer a mi Padre.
Jua 8:20  Estas cosas las dijo Jesús enseñando en el templo, en el atrio del tesoro; y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora.
Jua 8:21  Les dijo Jesús en otra ocasión: Yo me voy, y vosotros me buscaréis, y vendréis a morir en vuestro pecado. Adonde yo voy, no podéis venir vosotros.
Jua 8:22  A esto decían los judíos: ¿Tal vez querrá matarse a sí mismo, y por eso dice: Adonde yo voy, no podéis venir vosotros?
Jua 8:23  Y Jesús proseguía diciéndoles: Vosotros sois de acá abajo, yo soy de arriba: Vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Con razón os he dicho que moriréis en vuestros pecados; porque si no creyereis ser yo lo que soy, moriréis en vuestro pecado.
Jua 8:25  Le replicaban: ¿Pues quién eres tú? Les respondió Jesús : Yo soy el principio de todas las cosas, el mismo que os estoy hablando.
Jua 8:26  Muchas cosas tengo que decir y condenar en cuanto a vosotros; como quiera, el que me ha enviado, es veraz; y yo sólo hablo en el mundo las cosas que le oí a él.
Jua 8:27  Ellos no echaban de ver que decía que Dios era su Padre.
Jua 8:28  Por tanto Jesús les dijo: Cuando hayáis levantado en alto al Hijo del hombre, entonces conoceréis quién soy yo, y que nada hago de mí mismo, sino que hablo lo que mi Padre me ha enseñado.
Jua 8:29  Y el que me ha enviado está siempre conmigo, y no me ha dejado solo; porque yo hago siempre lo que es de su agrado.
Jua 8:30  Cuando Jesús dijo estas cosas, muchos creyeron en él.
 
Jua 8:31  Decía, pues, a los judíos, que creían en él: Si perseverareis en mi palabra, seréis verdaderamente discípulos míos.
Jua 8:32  Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Jua 8:33  Le respondieron ellos: Nosotros somos descendientes de Abrahán, y jamás hemos sido esclavos de nadie, ¿cómo, pues, dices tú que vendremos a ser libres?
Jua 8:34  Les replicó Jesús : En verdad, en verdad os digo, que todo aquel que comete pecado, es esclavo del pecado.
Jua 8:35  Es así que el esclavo no mora para siempre en la casa; el hijo sí permanece siempre en ella.
Jua 8:36  Luego si el hijo os da libertad, seréis verdaderamente libres.
Jua 8:37  Yo sé que sois hijos de Abrahán; pero también sé que tratáis de matarme, porque mi palabra no halla cabida en vosotros.
Jua 8:38  Yo hablo lo que he visto en mi Padre; vosotros hacéis lo que habéis visto en vuestro padre.
Jua 8:39  Le respondieron diciendo: Nuestro padre es Abrahán. Si sois hijos de Abrahán, les replicó Jesús , obrad como Abrahán.
Jua 8:40  Mas ahora pretendéis quitarme la vida, siendo yo un hombre que os he dicho la verdad que oí de Dios, no hizo eso Abrahán.
Jua 8:41  Vosotros hacéis lo que hizo vuestro padre. Ellos le replicaron: Nosotros no somos de raza de fornicadores, o idólatras, un solo padre tenemos, que es Dios.
Jua 8:42  A lo cual les dijo Jesús : Si Dios fuera vuestro padre, ciertamente me amaríais a mí; pues yo nací de Dios, y he venido de parte de Dios; porque no he venido de mí mismo, sino que él me ha enviado.
Jua 8:43  ¿Por qué, pues, no entendéis mi lenguaje? Es porque no podéis soportar mi palabra.
Jua 8:44  Vosotros sois hijos del diablo, y así queréis satisfacer los deseos de vuestro padre; él fue homicida desde el principio ; y, nunca ha estado firme en la verdad; y así no hay verdad en él; cuando dice mentira, habla como quien es, por ser de suyo mentiroso y padre de la mentira.
Jua 8:45  A mí no me creéis, porque os digo la verdad.
Jua 8:46  ¿Quién de vosotros me convencerá de pecado? Pues si os digo la verdad, ¿por qué no me creéis?
Jua 8:47  Quien es de Dios escucha las palabras de Dios. Por eso vosotros no las escucháis, porque no sois de Dios.
Jua 8:48  A esto respondieron los judíos diciéndole: ¿No decimos bien nosotros que tú eres un samaritano, y que estás endemoniado?
Jua 8:49  Jesús les respondió: Yo no estoy poseído del demonio, sino que honro a mi Padre, y vosotros me habéis deshonrado a mí.
Jua 8:50  Pero yo no busco mi gloria; otro hay que la promueve, y él me juzgará.
Jua 8:51  En verdad, en verdad os digo, que quien observare mi palabra, no morirá para siempre.
Jua 8:52  Dijeron los judíos: Ahora acabamos de conocer que estás poseído de algún demonio. Abrahán murió, y murieron también los profetas, y tú dices: Quien observare mi palabra, no morirá eternamente.
Jua 8:53  ¿Acaso eres tú mayor que nuestro padre Abrahán, el cual murió; y que los profetas, que asimismo murieron? Tú ¿por quién te tienes?
Jua 8:54  Respondió Jesús : Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria, diréis, no vale nada; pero es mi Padre el que me glorifica, aquel que decís vosotros que es vuestro Dios.
Jua 8:55  Vosotros no le habéis conocido; yo sí que le conozco: y si dijere que no le conozco, sería como vosotros un mentiroso. Pero le conozco bien, y observo sus palabras.
Jua 8:56  Abrahán, vuestro padre, ardió en deseos de ver este día mío, lo vio y se llenó de gozo.
Jua 8:57  Los judíos le dijeron: Aún no tienes cincuenta años, ¿y viste a Abrahán?
Jua 8:58  Les respondió Jesús : En verdad, en verdad os digo, que antes que Abrahán naciera, yo existo.
Jua 8:59  Al oír esto, cogieron piedras para tirárselas. Mas Jesús se escondió, y salió del templo.

Jua 8:1  y Jesús se fue al monte de los Olivos.
Jua 8:2  Y por la mañana volvió al templo, y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les enseñaba.
Jua 8:3  Entonces los escribas y los fariseos le trajeron una mujer sorprendida en adulterio; y poniéndola en medio,
Jua 8:4  le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio.
Jua 8:5  Y en la ley nos mandó Moisés apedrear a tales mujeres.(A) Tú, pues, ¿qué dices?
Jua 8:6  Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia el suelo, escribía en tierra con el dedo.
Jua 8:7  Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.
Jua 8:8  E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.
Jua 8:9  Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.
Jua 8:10  Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?
Jua 8:11  Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.

Jesús, la luz del mundo
 
Jua 8:12  Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo;(B) el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
Jua 8:13  Entonces los fariseos le dijeron: Tú das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero.(C)
Jua 8:14  Respondió Jesús y les dijo: Aunque yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo, ni a dónde voy.
Jua 8:15  Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  Y si yo juzgo, mi juicio es verdadero; porque no soy yo solo, sino yo y el que me envió, el Padre.
Jua 8:17  Y en vuestra ley está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero.
Jua 8:18  Yo soy el que doy testimonio de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio de mí.
Jua 8:19  Ellos le dijeron: ¿Dónde está tu Padre? Respondió Jesús: Ni a mí me conocéis, ni a mi Padre; si a mí me conocieseis, también a mi Padre conoceríais.
Jua 8:20  Estas palabras habló Jesús en el lugar de las ofrendas, enseñando en el templo; y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora.

A donde yo voy, vosotros no podéis venir
 
Jua 8:21  Otra vez les dijo Jesús: Yo me voy, y me buscaréis, pero en vuestro pecado moriréis; a donde yo voy, vosotros no podéis venir.
Jua 8:22  Decían entonces los judíos: ¿Acaso se matará a sí mismo, que dice: A donde yo voy, vosotros no podéis venir?
Jua 8:23  Y les dijo: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis.
Jua 8:25  Entonces le dijeron: ¿Tú quién eres? Entonces Jesús les dijo: Lo que desde el principio os he dicho.
Jua 8:26  Muchas cosas tengo que decir y juzgar de vosotros; pero el que me envió es verdadero; y yo, lo que he oído de él, esto hablo al mundo.
Jua 8:27  Pero no entendieron que les hablaba del Padre.
Jua 8:28  Les dijo, pues, Jesús: Cuando hayáis levantado al Hijo del Hombre, entonces conoceréis que yo soy, y que nada hago por mí mismo, sino que según me enseñó el Padre, así hablo.
Jua 8:29  Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada.
Jua 8:30  Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él.

La verdad os hará libres
 
Jua 8:31  Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
Jua 8:32  y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Jua 8:33  Le respondieron: Linaje de Abraham somos,(D) y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres?
Jua 8:34  Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.
Jua 8:35  Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre.
Jua 8:36  Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Jua 8:37  Sé que sois descendientes de Abraham; pero procuráis matarme, porque mi palabra no halla cabida en vosotros.
Jua 8:38  Yo hablo lo que he visto cerca del Padre; y vosotros hacéis lo que habéis oído cerca de vuestro padre.

Sois de vuestro padre el diablo
 
Jua 8:39  Respondieron y le dijeron: Nuestro padre es Abraham. Jesús les dijo: Si fueseis hijos de Abraham, las obras de Abraham haríais.
Jua 8:40  Pero ahora procuráis matarme a mí, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios; no hizo esto Abraham.
Jua 8:41  Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. Entonces le dijeron: Nosotros no somos nacidos de fornicación; un padre tenemos, que es Dios.
Jua 8:42  Jesús entonces les dijo: Si vuestro padre fuese Dios, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que él me envió.
Jua 8:43  ¿Por qué no entendéis mi lenguaje? Porque no podéis escuchar mi palabra.
Jua 8:44  Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.
Jua 8:45  Y a mí, porque digo la verdad, no me creéis.
Jua 8:46  ¿Quién de vosotros me redarguye de pecado? Pues si digo la verdad, ¿por qué vosotros no me creéis?
Jua 8:47  El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios.

La preexistencia de Cristo
 
Jua 8:48  Respondieron entonces los judíos, y le dijeron: ¿No decimos bien nosotros, que tú eres samaritano, y que tienes demonio?
Jua 8:49  Respondió Jesús: Yo no tengo demonio, antes honro a mi Padre; y vosotros me deshonráis.
Jua 8:50  Pero yo no busco mi gloria; hay quien la busca, y juzga.
Jua 8:51  De cierto, de cierto os digo, que el que guarda mi palabra, nunca verá muerte.
Jua 8:52  Entonces los judíos le dijeron: Ahora conocemos que tienes demonio. Abraham murió, y los profetas; y tú dices: El que guarda mi palabra, nunca sufrirá muerte.
Jua 8:53  ¿Eres tú acaso mayor que nuestro padre Abraham, el cual murió? ¡Y los profetas murieron! ¿Quién te haces a ti mismo?
Jua 8:54  Respondió Jesús: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios.
Jua 8:55  Pero vosotros no le conocéis; mas yo le conozco, y si dijere que no le conozco, sería mentiroso como vosotros; pero le conozco, y guardo su palabra.
Jua 8:56  Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó.
Jua 8:57  Entonces le dijeron los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?
Jua 8:58  Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy.
Jua 8:59  Tomaron entonces piedras para arrojárselas; pero Jesús se escondió y salió del templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.

Jua 8:1  Y Jesús se fue al monte de las Olivas.
Jua 8:2  Y por la mañana volvió al Templo, y todo el pueblo vino a él; y sentado él, les enseñaba.
Jua 8:3  Entonces los escribas y los fariseos le traen una mujer tomada en adulterio; y poniéndola en medio,
Jua 8:4  le dicen: Maestro, esta mujer ha sido tomada en el mismo hecho, adulterando;
Jua 8:5  y en la ley Moisés nos mandó apedrear a las tales. Tú pues, ¿qué dices?
Jua 8:6  Mas esto decían tentándole, para poder acusarle. Pero Jesús, inclinado hacia abajo, escribía en tierra con el dedo.
Jua 8:7  Y como perseverasen preguntándole, se enderezó, y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado, sea el primero en arrojar la piedra contra ella.
Jua 8:8  Y volviéndose a inclinar hacia abajo, escribía en tierra.
Jua 8:9  Oyendo pues ellos esto (redargüidos de la conciencia), se salían uno a uno, comenzando desde los más viejos (hasta los postreros), y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.
Jua 8:10  Y enderezándose Jesús, y no viendo a nadie más que a la mujer, le dijo: ¿Mujer, dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te ha condenado?
Jua 8:11  Y ella dijo: Señor, ninguno. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.
Jua 8:12  Y les habló Jesús otra vez, diciendo: YO SOY la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, mas tendrá la luz de la vida.
Jua 8:13  Entonces los fariseos le dijeron: Tú de ti mismo das testimonio; tu testimonio no es verdadero.
Jua 8:14  Respondió Jesús, y les dijo: Aunque yo doy testimonio de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; mas vosotros no sabéis de dónde vengo, y a dónde voy.
Jua 8:15  Vosotros según la carne juzgáis; mas yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  Y si yo juzgo, mi juicio es verdadero; porque no soy solo, sino yo y el que me envió, el Padre.
Jua 8:17  Y en vuestra ley está escrito que el testimonio de dos hombres es verdadero.
Jua 8:18  YO SOY el que doy testimonio de mí mismo, y da testimonio de mí el que me envió, el Padre.
Jua 8:19  Y le decían: ¿Dónde está tu Padre? Respondió Jesús: Ni a mí me conocéis, ni a mi Padre; si a mí me conocieseis, a mi Padre también conoceríais.
Jua 8:20  Estas palabras habló Jesús en el lugar de las limosnas, enseñando en el Templo; y nadie le prendió; porque aún no había venido su hora.
Jua 8:21  Y les dijo otra vez Jesús: Yo me voy, y me buscaréis, mas en vuestro pecado moriréis; a donde yo voy, vosotros no podéis venir.
Jua 8:22  Decían entonces los judíos: ¿Se ha de matar a sí mismo, que dice: A donde yo voy, vosotros no podéis venir?
Jua 8:23  Y les decía: Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creyereis que YO SOY, en vuestros pecados moriréis.
Jua 8:25  Y le decían: ¿Tú quién eres? Entonces Jesús les dijo: El que al principio también os he dicho.
Jua 8:26  Muchas cosas tengo que decir y juzgar de vosotros; mas el que me envió, es verdadero; y yo, lo que he oído de él, esto hablo en el mundo.
Jua 8:27  Pero no entendieron que él les hablaba del Padre.
Jua 8:28  Les dijo pues, Jesús: Cuando levantareis al Hijo del hombre, entonces entenderéis que YO SOY, y que nada hago de mí mismo; mas como mi Padre me enseñó, esto hablo.
Jua 8:29  Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre; porque yo, lo que a él agrada, hago siempre.
Jua 8:30  Hablando él estas cosas, muchos creyeron en él.
Jua 8:31  Y decía Jesús a los judíos que le habían creído: Si vosotros permaneciéreis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos;
Jua 8:32  y conoceréis la Verdad, y la Verdad os libertará.
Jua 8:33  Y le respondieron: Simiente de Abraham somos, y jamás servimos a nadie, ¿cómo dices tú: Seréis libres?
Jua 8:34  Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, es siervo de pecado.
Jua 8:35  Y el siervo no permanece en casa para siempre; mas el hijo permanece para siempre.
Jua 8:36  Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres.
Jua 8:37  Sé que sois simiente de Abraham, mas procuráis matarme, porque mi palabra no cabe en vosotros.
Jua 8:38  Yo, lo que he visto con mi Padre, hablo; y vosotros lo que habéis visto con vuestro padre, hacéis.
Jua 8:39  Respondieron y le dijeron: Nuestro padre es Abraham. Les dice Jesús: Si fuerais hijos de Abraham, las obras de Abraham haríais.
Jua 8:40  Pero ahora procuráis matarme, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios; no hizo esto Abraham.
Jua 8:41  Vosotros hacéis las obras de vuestro padre. Le dijeron entonces: Nosotros no somos nacidos de fornicación; un padre tenemos, que es Dios.
Jua 8:42  Jesús entonces les dijo: Si vuestro padre fuera Dios, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, y he venido; que no he venido de mí mismo, mas él me envió.
Jua 8:43  ¿Por qué no reconocéis mi lenguaje? Porque no podéis oír mi palabra.
Jua 8:44  Vosotros de vuestro padre el diablo sois, y los deseos de vuestro padre queréis cumplir. El, homicida ha sido desde el principio, y no permaneció en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira .
Jua 8:45  Y porque yo digo Verdad, no me creéis.
Jua 8:46  ¿Quién de vosotros me redarguye de pecado? Si digo verdad, ¿por qué vosotros no me creéis?
Jua 8:47  El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios.
Jua 8:48  Respondieron entonces los judíos, y le dijeron: ¿No decimos bien nosotros, que tú eres samaritano, y tienes demonio?
Jua 8:49  Respondió Jesús: Yo no tengo demonio, antes honro a mi Padre; y vosotros me habéis deshonrado.
Jua 8:50  Y no busco mi gloria; hay quien la busca, y juzga.
Jua 8:51  De cierto, de cierto os digo, que el que guardare mi palabra, no verá muerte para siempre.
Jua 8:52  Entonces los judíos le dijeron: Ahora conocemos que tienes demonio. Abraham murió, y los profetas, ¿y tú dices: El que guardare mi palabra, no gustará muerte para siempre?
Jua 8:53  ¿Eres tú mayor que nuestro padre Abraham, el cual murió? Y los profetas murieron; ¿quién te haces?
Jua 8:54  Respondió Jesús: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria es nada; mi Padre es el que me glorifica, el que vosotros decís que es vuestro Dios;
Jua 8:55  y no le conocéis: mas yo le conozco; y si dijere que no le conozco, seré como vosotros mentiroso, mas le conozco, y guardo su palabra.
Jua 8:56  Abraham vuestro padre se gozó por ver mi día; y lo vio, y se gozó.
Jua 8:57  Le dijeron entonces los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham?
Jua 8:58  Les dijo Jesús: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, YO SOY.
Jua 8:59  Tomaron entonces piedras para tirarle; mas Jesús se encubrió, y salió del Templo; y atravesando por en medio de ellos, se fue.

Jua 8:1  Jesus went unto the mount of Olives.
Jua 8:2  And early in the morning he came again into the temple, and all the people came unto him; and he sat down, and taught them.
Jua 8:3  And the scribes and Pharisees brought unto him a woman taken in adultery; and when they had set her in the midst,
Jua 8:4  They say unto him, Master, this woman was taken in adultery, in the very act.
Jua 8:5  Now Moses in the law commanded us, that such should be stoned: but what sayest thou?
Jua 8:6  This they said, tempting him, that they might have to accuse him. But Jesus stooped down, and with his finger wrote on the ground, as though he heard them not.
Jua 8:7  So when they continued asking him, he lifted up himself, and said unto them, He that is without sin among you, let him first cast a stone at her.
Jua 8:8  And again he stooped down, and wrote on the ground.
Jua 8:9  And they which heard it, being convicted by their own conscience, went out one by one, beginning at the eldest, even unto the last: and Jesus was left alone, and the woman standing in the midst.
Jua 8:10  When Jesus had lifted up himself, and saw none but the woman, he said unto her, Woman, where are those thine accusers? hath no man condemned thee?
Jua 8:11  She said, No man, Lord. And Jesus said unto her, Neither do I condemn thee: go, and sin no more.
Jua 8:12  Then spake Jesus again unto them, saying, I am the light of the world: he that followeth me shall not walk in darkness, but shall have the light of life.
Jua 8:13  The Pharisees therefore said unto him, Thou bearest record of thyself; thy record is not true.
Jua 8:14  Jesus answered and said unto them, Though I bear record of myself, yet my record is true: for I know whence I came, and whither I go; but ye cannot tell whence I come, and whither I go.
Jua 8:15  Ye judge after the flesh; I judge no man.
Jua 8:16  And yet if I judge, my judgment is true: for I am not alone, but I and the Father that sent me.
Jua 8:17  It is also written in your law, that the testimony of two men is true.
Jua 8:18  I am one that bear witness of myself, and the Father that sent me beareth witness of me.
Jua 8:19  Then said they unto him, Where is thy Father? Jesus answered, Ye neither know me, nor my Father: if ye had known me, ye should have known my Father also.
Jua 8:20  These words spake Jesus in the treasury, as he taught in the temple: and no man laid hands on him; for his hour was not yet come.
Jua 8:21  Then said Jesus again unto them, I go my way, and ye shall seek me, and shall die in your sins: whither I go, ye cannot come.
Jua 8:22  Then said the Jews, Will he kill himself? because he saith, Whither I go, ye cannot come.
Jua 8:23  And he said unto them, Ye are from beneath; I am from above: ye are of this world; I am not of this world.
Jua 8:24  I said therefore unto you, that ye shall die in your sins: for if ye believe not that I am he, ye shall die in your sins.
Jua 8:25  Then said they unto him, Who art thou? And Jesus saith unto them, Even the same that I said unto you from the beginning.
Jua 8:26  I have many things to say and to judge of you: but he that sent me is true; and I speak to the world those things which I have heard of him.
Jua 8:27  They understood not that he spake to them of the Father.
Jua 8:28  Then said Jesus unto them, When ye have lifted up the Son of man, then shall ye know that I am he, and that I do nothing of myself; but as my Father hath taught me, I speak these things.
Jua 8:29  And he that sent me is with me: the Father hath not left me alone; for I do always those things that please him.
Jua 8:30  As he spake these words, many believed on him.
Jua 8:31  Then said Jesus to those Jews which believed on him, If ye continue in my word, then are ye my disciples indeed;
Jua 8:32  And ye shall know the truth, and the truth shall make you free.
Jua 8:33  They answered him, We be Abraham's seed, and were never in bondage to any man: how sayest thou, Ye shall be made free?
Jua 8:34  Jesus answered them, Verily, verily, I say unto you, Whosoever committeth sin is the servant of sin.
Jua 8:35  And the servant abideth not in the house for ever: but the Son abideth ever.
Jua 8:36  If the Son therefore shall make you free, ye shall be free indeed.
Jua 8:37  I know that ye are Abraham's seed; but ye seek to kill me, because my word hath no place in you.
Jua 8:38  I speak that which I have seen with my Father: and ye do that which ye have seen with your father.
Jua 8:39  They answered and said unto him, Abraham is our father. Jesus saith unto them, If ye were Abraham's children, ye would do the works of Abraham.
Jua 8:40  But now ye seek to kill me, a man that hath told you the truth, which I have heard of God: this did not Abraham.
Jua 8:41  Ye do the deeds of your father. Then said they to him, We be not born of fornication; we have one Father, even God.
Jua 8:42  Jesus said unto them, If God were your Father, ye would love me: for I proceeded forth and came from God; neither came I of myself, but he sent me.
Jua 8:43  Why do ye not understand my speech? even because ye cannot hear my word.
Jua 8:44  Ye are of your father the devil, and the lusts of your father ye will do. He was a murderer from the beginning, and abode not in the truth, because there is no truth in him. When he speaketh a lie, he speaketh of his own: for he is a liar, and the father of it.
Jua 8:45  And because I tell you the truth, ye believe me not.
Jua 8:46  Which of you convinceth me of sin? And if I say the truth, why do ye not believe me?
Jua 8:47  He that is of God heareth God's words: ye therefore hear them not, because ye are not of God.
Jua 8:48  Then answered the Jews, and said unto him, Say we not well that thou art a Samaritan, and hast a devil?
Jua 8:49  Jesus answered, I have not a devil; but I honour my Father, and ye do dishonour me.
Jua 8:50  And I seek not mine own glory: there is one that seeketh and judgeth.
Jua 8:51  Verily, verily, I say unto you, If a man keep my saying, he shall never see death.
Jua 8:52  Then said the Jews unto him, Now we know that thou hast a devil. Abraham is dead, and the prophets; and thou sayest, If a man keep my saying, he shall never taste of death.
Jua 8:53  Art thou greater than our father Abraham, which is dead? and the prophets are dead: whom makest thou thyself?
Jua 8:54  Jesus answered, If I honour myself, my honour is nothing: it is my Father that honoureth me; of whom ye say, that he is your God:
Jua 8:55  Yet ye have not known him; but I know him: and if I should say, I know him not, I shall be a liar like unto you: but I know him, and keep his saying.
Jua 8:56  Your father Abraham rejoiced to see my day: and he saw it, and was glad.
Jua 8:57  Then said the Jews unto him, Thou art not yet fifty years old, and hast thou seen Abraham?
Jua 8:58  Jesus said unto them, Verily, verily, I say unto you, Before Abraham was, I am.
Jua 8:59  Then took they up stones to cast at him: but Jesus hid himself, and went out of the temple, going through the midst of them, and so passed by.

Jua 8:1  Mas Jesús se fue al monte de los Olivos.
Jua 8:2  Pero de madrugada se presentó otra vez en el Templo, y todo el pueblo acudía a él. Entonces se sentó y se puso a enseñarles.
Jua 8:3  Los escribas y fariseos le llevan una mujer sorprendida en adulterio, la ponen en medio
Jua 8:4  y le dicen: «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio.
Jua 8:5  Moisés nos mandó en la Ley apedrear a estas mujeres. ¿Tú qué dices?»
Jua 8:6  Esto lo decían para tentarle, para tener de qué acuasarle. Pero Jesús, inclinándose, se puso a escribir con el dedo en la tierra.
Jua 8:7  Pero, como ellos insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo: «Aquel de vosotros que esté sin pecado, que le arroje la primera piedra.»
Jua 8:8  E inclinándose de nuevo, escribía en la tierra.
Jua 8:9  Ellos, al oír estas palabras, se iban retirando uno tras otro, comenzando por los más viejos; y se quedó solo Jesús con la mujer, que seguía en medio.
Jua 8:10  Incorporándose Jesús le dijo: «Mujer, ¿dónde están? ¿Nadie te ha condenado?»
Jua 8:11  Ella respondió: «Nadie, Señor.» Jesús le dijo: «Tampoco yo te condeno. Vete, y en adelante no peques más.»
Jua 8:12  Jesús les habló otra vez diciendo: «Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida.»
Jua 8:13  Los fariseos le dijeron: «Tú das testimonio de ti mismo: tu testimonio no vale.»
Jua 8:14  Jesús les respondió: «Aunque yo dé testimonio de mí mismo, mi testimonio vale, porque sé de dónde he venido y a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo ni a dónde voy.
Jua 8:15  Vosotros juzgáis según la carne; yo no juzgo a nadie;
Jua 8:16  y si juzgo, mi juicio es verdadero, porque no estoy yo solo, sino yo y el que me ha enviado.
Jua 8:17  Y en vuestra Ley está escrito que el testimonio de dos personas es válido.
Jua 8:18  Yo soy el que doy testimonio de mí mismo y también el que me ha enviado, el Padre, da testimonio de mí.»
Jua 8:19  Entonces le decían: «¿Dónde está tu Padre?» Respondió Jesús: «No me conocéis ni a mí ni a mi Padre; si me conocierais a mí, conoceríais también a mi Padre.»
Jua 8:20  Estas palabras las pronunció en el Tesoro, mientras enseñaba en el Templo. Y nadie le prendió, porque aún no había llegado su hora.
Jua 8:21  Jesús les dijo otra vez: «Yo me voy y vosotros me buscaréis, y moriréis en vuestro pecado. Adonde yo voy, vosotros no podéis ir.»
Jua 8:22  Los judíos se decían: «¿Es que se va a suicidar, pues dice: “Adonde yo voy, vosotros no podéis ir?»
Jua 8:23  El les decía: «Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba. Vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Ya os he dicho que moriréis en vuestros pecados, porque si no creéis que Yo Soy, moriréis en vuestros pecados.»
Jua 8:25  Entonces le decían: «¿Quién eres tú?» Jesús les respondió: «Desde el principio, lo que os estoy diciendo.
Jua 8:26  Mucho podría hablar de vosotros y juzgar pero el que me ha enviado es veraz, y lo que le he oído a él es lo que hablo al mundo.»
Jua 8:27  No comprendieron que les hablaba del Padre.
Jua 8:28  Les dijo, pues, Jesús: «Cuando hayáis levantado al Hijo del hombre, entonces sabréis que Yo Soy, y que no hago nada por mi propia cuenta; sino que, lo que el Padre me ha enseñado, eso es lo que hablo.
Jua 8:29  Y el que me ha enviado está conmigo: no me ha dejado solo, porque yo hago siempre lo que le agrada a él.»
Jua 8:30  Al hablar así, muchos creyeron en él.
Jua 8:31  Decía, pues, Jesús a los judíos que habían creído en él: «Si os mantenéis en mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos,
Jua 8:32  y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres.»
Jua 8:33  Ellos le respondieron: «Nosotros somos descendencia de Abraham y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Os haréis libres?»
Jua 8:34  Jesús les respondió: «En verdad, en verdad os digo: todo el que comete pecado es un esclavo.
Jua 8:35  Y el esclavo no se queda en casa para siempre; mientras el hijo se queda para siempre.
Jua 8:36  Si, pues, el Hijo os da la libertad, seréis realmente libres.
Jua 8:37  Ya sé que sois descendencia de Abraham; pero tratáis de matarme, porque mi Palabra no prende en vosotros.
Jua 8:38  Yo hablo lo que he visto donde mi Padre; y vosotros hacéis lo que habéis oído donde vuestro padre.»
Jua 8:39  Ellos le respondieron: «Nuestro padre es Abraham.» Jesús les dice: «Si sois hijos de Abraham, haced las obras de Abraham.
Jua 8:40  Pero tratáis de matarme, a mí que os he dicho la verdad que oí de Dios. Eso no lo hizo Abraham.
Jua 8:41  Vosotros hacéis las obras de vuestro padre.» Ellos le dijeron: «Nosotros no hemos nacido de la prostitución; no tenemos más padre que a Dios.»
Jua 8:42  Jesús les respondió: «Si Dios fuera vuestro Padre, me amaríais a mí, porque yo he salido y vengo de Dios; no he venido por mi cuenta, sino que él me ha enviado.
Jua 8:43  ¿Por qué no reconocéis mi lenguaje? Porque no podéis escuchar mi Palabra.
Jua 8:44  Vosotros sois de vuestro padre el diablo y queréis cumplir los deseos de vuestro padre. Este era homicida desde el principio, y no se mantuvo en la verdad, porque no hay verdad en él; cuando dice la mentira, dice lo que le sale de dentro, porque es mentiroso y padre de la mentira.
Jua 8:45  Pero a mí, como os digo la verdad, no me creéis.
Jua 8:46  ¿Quién de vosotros puede probar que soy pecador? Si digo la verdad, ¿por qué no me creéis?
Jua 8:47  El que es de Dios, escucha las palabras de Dios; vosotros no las escucháis, porque no sois de Dios.»
Jua 8:48  Los judíos le respondieron: «¿No decimos, con razón, que eres samaritano y que tienes un demonio?»
Jua 8:49  Respondió Jesús: «Yo no tengo un demonio; sino que honro a mi Padre, y vosotros me deshonráis a mí.
Jua 8:50  Pero yo no busco mi gloria; ya hay quien la busca y juzga.
Jua 8:51  En verdad, en verdad os digo: si alguno guarda mi Palabra, no verá la muerte jamás.»
Jua 8:52  Le dijeron los judíos: «Ahora estamos seguros de que tienes un demonio. Abraham murió, y también los profetas; y tú dices: “Si alguno guarda mi Palabra, no probará la muerte jamás.”
Jua 8:53  ¿Eres tú acaso más grande que nuestro padre Abraham, que murió? También los profetas murieron. ¿Por quién te tienes a ti mismo?»
Jua 8:54  Jesús respondió: «Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada; es mi Padre quien me glorifica, de quien vosotros decís: “El es nuestro Dios”,
Jua 8:55  y sin embargo no le conocéis, yo sí que le conozco, y si dijera que no le conozco, sería un mentiroso como vosotros. Pero yo le conozco, y guardo su Palabra.
Jua 8:56  Vuestro padre Abraham se regocijó pensando en ver mi Día; lo vio y se alegró.»
Jua 8:57  Entonces los judíos le dijeron: «¿Aún no tienes cincuenta años y has visto a Abraham?»
Jua 8:58  Jesús les respondió: «En verdad, en verdad os digo: antes de que Abraham existiera, Yo Soy.»
Jua 8:59  Entonces tomaron piedras para tirárselas; pero Jesús se ocultó y salió del Templo.

Jua 8:1  Pero Jesús se dirigió al Monte de los Olivos,
Jua 8:2  y al día siguiente, al amanecer, volvió al templo. La gente se le acercó, y él se sentó y comenzó a enseñarles.
Jua 8:3  Los maestros de la ley y los fariseos llevaron entonces a una mujer, a la que habían sorprendido cometiendo adulterio. La pusieron en medio de todos los presentes,
Jua 8:4  y dijeron a Jesús:
 –Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de cometer adulterio.
Jua 8:5  En la ley, Moisés nos ordenó que se matara a pedradas a esta clase de mujeres. [1] ¿Tú qué dices?
Jua 8:6  Ellos preguntaron esto para ponerlo a prueba, y tener así de qué acusarlo. Pero Jesús se inclinó y comenzó a escribir en la tierra con el dedo.
Jua 8:7  Luego, como seguían preguntándole, se enderezó y les dijo:
 –Aquel de ustedes que no tenga pecado, que le tire la primera piedra. [2]
Jua 8:8  y volvió a inclinarse y siguió escribiendo en la tierra.
Jua 8:9  Al oír esto, uno tras otro comenzaron a irse, y los primeros en hacerlo fueron los más viejos. Cuando Jesús se encontró solo con la mujer, que se había quedado allí,
Jua 8:10  se enderezó y le preguntó:
 –Mujer, ¿dónde están? ¿Ninguno te ha condenado?
Jua 8:11  Ella le contestó:
 –Ninguno, Señor.
 Jesús le dijo:
 –Tampoco yo te condeno; ahora, vete y no vuelvas a pecar. [3]
Jua 8:12  Jesús se dirigió otra vez a la gente, diciendo:
 –Yo soy la luz del mundo;[4] el que me sigue, tendrá la luz que le da vida, y nunca andará en la oscuridad.
Jua 8:13  Los fariseos le dijeron:
 –Tú estás dando testimonio a favor tuyo: ese testimonio no tiene valor.
Jua 8:14  Jesús les contestó:
 –Mi testimonio sí tiene valor, aunque lo dé yo mismo a mi favor. Pues yo sé de dónde vine y a dónde voy; en cambio, ustedes no lo saben.
Jua 8:15  Ustedes juzgan según los criterios humanos. Yo no juzgo a nadie;
Jua 8:16  pero si juzgo, mi juicio está de acuerdo con la verdad, porque no juzgo yo solo, sino que el Padre que me envió juzga conmigo.
Jua 8:17  En la ley de ustedes está escrito que cuando dos testigos dicen lo mismo, su testimonio tiene valor. [5]
Jua 8:18  Pues bien, yo mismo soy un testigo a mi favor, y el Padre queme envió es el otro testigo.
Jua 8:19  Le preguntaron:
 –¿Dónde está tu padre?
 Jesús les contestó:
 –Ustedes no me conocen a mí, ni tampoco a mi Padre; si me conocieran a mí, también conocerían a mi Padre.
Jua 8:20  "A donde yo voy, ustedes no pueden ir" Jesús dijo estas cosas mientras enseñaba en el templo, en el lugar donde estaban los cofres de las ofrendas. Pero nadie lo arrestó, porque todavía no había llegado su hora.
Jua 8:21  Jesús les volvió a decir:
 –Yo me voy, y ustedes me van a buscar, pero morirán en su pecado. A donde yo voy, ustedes no pueden ir.
Jua 8:22  Los judíos dijeron:
 –¿Acaso estará pensando en matarse, y por eso dice que no podemos ir a donde él va?
Jua 8:23  Jesús les dijo:
 –Ustedes son de aquí abajo, pero yo soy de arriba; ustedes sonde este mundo, pero yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Por eso les dije que morirán en sus pecados; porque si no creen que yo Soy, [6] morirán en sus pecados.
Jua 8:25  Entonces le preguntaron:
 –¿Quién eres tú? Jesús les respondió:
 –En primer lugar, ¿por qué he de hablar con ustedes?
Jua 8:26  Tengo mucho que decir y que juzgar de ustedes, pero el que me ha enviado dice la verdad, y lo que yo le digo al mundo es lo mismo que le he oído decir a él.
Jua 8:27  Pero ellos no entendieron que les hablaba del Padre.
Jua 8:28  Por eso les dijo:
 –Cuando ustedes levanten en alto al Hijo del hombre, reconocerán que yo Soy, y que no hago nada por mi propia cuenta; solamente digo lo que el Padre me ha enseñado.
Jua 8:29  Porque el que me ha enviado está conmigo; mi Padre no me ha dejado solo, porque yo siempre hago lo que a él le agrada.
Jua 8:30  Cuando Jesús dijo esto, muchos creyeron en él.
Jua 8:31  Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él:
 –Si ustedes se mantienen fieles a mi palabra, serán de veras mis discípulos;
Jua 8:32  conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
Jua 8:33  Ellos le contestaron:
 –Nosotros somos descendientes de Abraham, y nunca hemos sido esclavos de nadie; ¿cómo dices tú que seremos libres?
Jua 8:34  Jesús les dijo:
 –Les aseguro que todos los que pecan son esclavos del pecado.
Jua 8:35  Un esclavo no pertenece para siempre a la familia; pero un hijo sí pertenece para siempre a la familia.
Jua 8:36  Así que, si el Hijo los hace libres, ustedes serán verdaderamente libres. [7]
Jua 8:37  y a sé que ustedes son descendientes de Abraham; pero quieren matarme porque no aceptan mi palabra.
Jua 8:38  yo hablo de lo que el Padre me ha mostrado; así también ustedes, hagan lo que del Padre han escuchado.
Jua 8:39  Ellos le dijeron:
 –¡Nuestro padre es Abraham!
 Pero Jesús les contestó:
 –Si ustedes fueran de veras hijos de Abraham, harían lo que él hizo.
Jua 8:40  Sin embargo, aunque les he dicho la verdad que Dios me ha enseñado, ustedes quieren matarme. ¡Abraham nunca hizo nada así!
Jua 8:41  Ustedes hacen lo mismo que hace su padre. Ellos le dijeron:
 –¡Nosotros no somos hijos bastardos; tenemos un solo Padre, que es Dios![8]
Jua 8:42  Jesús les contestó:
 –Si de veras Dios fuera su padre, ustedes me amarían, porque y o vengo de Dios y aquí estoy. No he venido por mi propia cuenta, sino que Dios me ha enviado.
Jua 8:43  ¿Por qué no pueden entender ustedes mi mensaje? Pues simplemente porque no pueden escuchar mi palabra.
Jua 8:44  El padre de ustedes es el diablo; ustedes le pertenecen, y tratan de hacer lo que él quiere. El diablo ha sido un asesino desde el principio. No se mantiene en la verdad, y nunca dice la verdad. Cuando dice mentiras, habla como lo que es; porque es mentiroso y es el padre de la mentira.
Jua 8:45  Pero como yo digo la verdad, ustedes no me creen.
Jua 8:46  ¿Quién de ustedes puede demostrar que yo tengo algún pecado? y si digo la verdad, ¿por qué no me creen?[9]
Jua 8:47  El que es de Dios, escucha las palabras de Dios; pero como ustedes no son de Dios, no quieren escuchar.
Jua 8:48  Los judíos le dijeron entonces:
 –Tenemos razón cuando decimos que eres un samaritano y que tienes un demonio.
Jua 8:49  Jesús les contestó:
 –No tengo ningún demonio. Lo que hago es honrar a mi Padre; en cambio, ustedes me deshonran.
Jua 8:50  yo no busco mi gloria; hay alguien que la busca, y él es el que juzga.
Jua 8:51  Les aseguro que quien hace caso de mi palabra, no morirá.
Jua 8:52  Los judíos le contestaron:
 –Ahora estamos seguros de que tienes un demonio. Abraham y todos los profetas murieron, y tú dices: 'El que hace caso de mi palabra, no morirá. '
Jua 8:53  ¿Acaso eres tú más que nuestro padre Abraham? Él murió, y los profetas también murieron. ¿Quién te has creído que eres?
Jua 8:54  Jesús les contestó:
 –Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria no vale nada. Pero el que me glorifica es mi Padre, el mismo que ustedes dicen que es su Dios.
Jua 8:55  Pero ustedes no lo conocen. Yo sí lo conozco; y si dijera que no lo conozco, sería yo tan mentiroso como ustedes. Pero ciertamente lo conozco, y hago caso de su palabra.
Jua 8:56  Abraham, el antepasado de ustedes, se alegró porque iba a ver mi día; y lo vio, y se llenó de gozo.
Jua 8:57  Los judíos dijeron a Jesús:
 –Todavía no tienes cincuenta años, ¿y dices que has visto a Abraham?
Jua 8:58  Jesús les contestó:
 –Les aseguro que yo existo desde antes que existiera Abraham. [10]
Jua 8:59  Entonces ellos tomaron piedras para arrojárselas; pero Jesús se escondió y salió del templo.

Jua 8:1  Pero Jesús se fue al monte de los Olivos.
Jua 8:2  Al amanecer, sin embargo, se presentó otra vez en el templo, y todo el pueblo empezó a venir a él, y se sentó y se puso a enseñarles.
Jua 8:3  Entonces los escribas y los fariseos trajeron a una mujer sorprendida en adulterio, y, después de ponerla de pie en medio de ellos,
Jua 8:4  le dijeron a él: “Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto de cometer adulterio.
Jua 8:5  En la Ley Moisés prescribió que apedreáramos a mujeres de esta clase. Tú, pues, ¿qué dices?”.
Jua 8:6  Por supuesto, decían esto para ponerlo a prueba, a fin de tener algo de qué acusarlo. Pero Jesús se inclinó y empezó a escribir en la tierra con el dedo.
Jua 8:7  Como persistieron en preguntarle, se enderezó y les dijo: “El que de ustedes esté sin pecado sea el primero en tirarle una piedra”.
Jua 8:8  E inclinándose de nuevo, siguió escribiendo en la tierra.
Jua 8:9  Pero los que oyeron esto empezaron a salir, uno a uno, comenzando por los ancianos, y lo dejaron solo, y a la mujer que estaba en medio de ellos.
Jua 8:10  Enderezándose, Jesús le dijo: “Mujer, ¿dónde están? ¿No te condenó nadie?”.
Jua 8:11  Dijo ella: “Nadie, señor”. Jesús dijo: “Tampoco yo te condeno. Vete; desde ahora ya no practiques pecado”.
Jua 8:12  Por lo tanto Jesús les habló otra vez, diciendo: “Yo soy la luz del mundo. El que me sigue, de ninguna manera andará en oscuridad, sino que poseerá la luz de la vida”.
Jua 8:13  Por esto le dijeron los fariseos: “Tú das testimonio acerca de ti mismo; tu testimonio no es verdadero”.
Jua 8:14  En respuesta, Jesús les dijo: “Aunque yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde vine y adónde voy. Pero ustedes no saben de dónde vine ni adónde voy.
Jua 8:15  Ustedes juzgan según la carne; yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  Y sin embargo, si juzgo, mi juicio es verídico, porque no estoy solo, sino que conmigo está el Padre que me envió.
Jua 8:17  También, en la propia Ley de ustedes está escrito: ‘El testimonio de dos hombres es verdadero’.
Jua 8:18  Yo soy quien doy testimonio acerca de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio acerca de mí”.
Jua 8:19  Por lo tanto procedieron a decirle: “¿Dónde está tu Padre?”. Jesús contestó: “Ustedes no me conocen a mí, ni a mi Padre. Si me conocieran, conocerían a mi Padre también”.
Jua 8:20  Estos dichos los habló en la tesorería mientras enseñaba en el templo. Pero nadie se apoderó de él, porque todavía no había llegado su hora.
Jua 8:21  Entonces les dijo otra vez: “Yo me voy, y ustedes me buscarán, y sin embargo morirán en su pecado. A donde yo voy ustedes no pueden venir”.
Jua 8:22  Por eso empezaron a decir los judíos: “Él no va a matarse, ¿verdad? Porque dice: ‘A donde yo voy ustedes no pueden venir’”.
Jua 8:23  Así que él pasó a decirles: “Ustedes son de las regiones de abajo; yo soy de las regiones de arriba. Ustedes son de este mundo; yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Por eso les dije: Morirán en sus pecados. Porque si no creen que yo soy [ese], morirán en sus pecados”.
Jua 8:25  Por lo tanto se pusieron a decirle: “¿Tú quién eres?”. Jesús les dijo: “¿Para qué les hablo siquiera?
Jua 8:26  Muchas cosas tengo que hablar respecto de ustedes y sobre las cuales pronunciar juicio. En realidad, el que me ha enviado es veraz, y las mismas cosas que oí de parte de él las hablo en el mundo”.
Jua 8:27  No comprendieron que les hablaba del Padre.
Jua 8:28  Por lo tanto, dijo Jesús: “Una vez que hayan alzado al Hijo del hombre, entonces sabrán que yo soy [ese], y que no hago nada por mi propia iniciativa; sino que hablo estas cosas así como el Padre me ha enseñado.
Jua 8:29  Y el que me ha enviado está conmigo; no me ha dejado solo, porque yo siempre hago las cosas que le agradan”.
Jua 8:30  Al hablar él estas cosas, muchos pusieron fe en él.
Jua 8:31  De modo que Jesús siguió diciendo a los judíos que le habían creído: “Si permanecen en mi palabra, verdaderamente son mis discípulos,
Jua 8:32  y conocerán la verdad, y la verdad los libertará”.
Jua 8:33  Ellos le respondieron: “Somos prole de Abrahán y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo es que dices tú: ‘Llegarán a ser libres’?”.
Jua 8:34  Jesús les contestó: “Muy verdaderamente les digo: Todo hacedor de pecado es esclavo del pecado.
Jua 8:35  Además, el esclavo no permanece en la casa para siempre; el hijo permanece para siempre.
Jua 8:36  Por eso, si el Hijo los liberta, serán realmente libres.
Jua 8:37  Yo sé que son prole de Abrahán; pero procuran matarme, porque mi palabra no hace progreso entre ustedes.
Jua 8:38  Cuantas cosas he visto con mi Padre las hablo; y ustedes, por tanto, hacen las cosas que han oído de [su] padre”.
Jua 8:39  En respuesta, le dijeron: “Nuestro padre es Abrahán”. Jesús les dijo: “Si son hijos de Abrahán, hagan las obras de Abrahán.
Jua 8:40  Pero ahora procuran matarme, un hombre que les ha dicho la verdad que oí de parte de Dios. Abrahán no hizo esto.
Jua 8:41  Ustedes hacen las obras de su padre”. Le dijeron ellos: “Nosotros no nacimos de fornicación; tenemos un solo Padre, Dios”.
Jua 8:42  Jesús les dijo: “Si Dios fuera su Padre, ustedes me amarían a mí, porque de Dios vine yo y estoy aquí. Tampoco he venido por mi propia iniciativa, no, sino que Aquel me ha enviado.
Jua 8:43  ¿Por qué no saben ustedes lo que hablo? Porque no pueden escuchar mi palabra.
Jua 8:44  Ustedes proceden de su padre el Diablo, y quieren hacer los deseos de su padre. Ese era homicida cuando principió, y no permaneció firme en la verdad, porque la verdad no está en él. Cuando habla la mentira, habla según su propia disposición, porque es mentiroso y el padre de [la mentira].
Jua 8:45  Porque yo, por otra parte, digo la verdad, ustedes no me creen.
Jua 8:46  ¿Quién de ustedes me prueba culpable de pecado? Si yo hablo la verdad, ¿por qué no me creen ustedes?
Jua 8:47  El que procede de Dios escucha los dichos de Dios. Por esto no escuchan ustedes, porque no proceden de Dios”.
Jua 8:48  En respuesta, los judíos le dijeron: “¿No decimos correctamente: Tú eres samaritano y tienes demonio?”.
Jua 8:49  Jesús contestó: “Yo no tengo demonio, sino que honro a mi Padre, y ustedes me deshonran a mí.
Jua 8:50  Pero yo no busco gloria para mí mismo; hay Quien busca y juzga.
Jua 8:51  Muy verdaderamente les digo: Si alguien observa mi palabra, no verá la muerte nunca”.
Jua 8:52  Los judíos le dijeron: “Ahora sabemos que tienes demonio. Abrahán murió, también los profetas; pero tú dices: ‘Si alguien observa mi palabra, no gustará la muerte nunca’.
Jua 8:53  Tú no eres mayor que nuestro padre Abrahán, que murió, ¿verdad? También, los profetas murieron. ¿Quién pretendes ser?”.
Jua 8:54  Jesús contestó: “Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria no es nada. Es mi Padre quien me glorifica, el que ustedes dicen que es su Dios;
Jua 8:55  y sin embargo ustedes no lo han conocido. Pero yo lo conozco. Y si dijera que no lo conozco sería como ustedes, mentiroso. Pero sí lo conozco, y observo su palabra.
Jua 8:56  Abrahán el padre de ustedes se regocijó mucho por la expectativa de ver mi día, y lo vio y se regocijó”.
Jua 8:57  Por eso le dijeron los judíos: “Todavía no tienes cincuenta años, ¿y sin embargo has visto a Abrahán?”.
Jua 8:58  Jesús les dijo: “Muy verdaderamente les digo: Antes que Abrahán llegara a existir, yo he sido”.
Jua 8:59  Por lo tanto, tomaron piedras para arrojárse[las]; pero Jesús se escondió, y salió del templo.

Jua 8:1  Por su parte, Jesús se fue al Monte de los Olivos.
Jua 8:2  Al día siguiente, al amanecer, Jesús regresó al templo. La gente se acercó, y él se sentó para enseñarles.
Jua 8:3  Entonces los maestros de la Ley y los fariseos llevaron al templo a una mujer. La habían sorprendido teniendo relaciones sexuales con un hombre que no era su esposo. Pusieron a la mujer en medio de toda la gente,
Jua 8:4  y le dijeron a Jesús: —Maestro, encontramos a esta mujer cometiendo pecado de adulterio.
Jua 8:5  En nuestra ley, Moisés manda que a esta clase de mujeres las matemos a pedradas. ¿Tú qué opinas?
Jua 8:6  Ellos le hicieron esa pregunta para ponerle una trampa. Si él respondía mal, podrían acusarlo. Pero Jesús se inclinó y empezó a escribir en el suelo con su dedo.
Jua 8:7  Sin embargo, como no dejaban de hacerle preguntas, Jesús se levantó y les dijo: —Si alguno de ustedes nunca ha pecado, tire la primera piedra.
Jua 8:8  Luego, volvió a inclinarse y siguió escribiendo en el suelo.
Jua 8:9  Al escuchar a Jesús, todos empezaron a irse, comenzando por los más viejos, hasta que Jesús se quedó solo con la mujer.
Jua 8:10  Entonces Jesús se puso de pie y le dijo: —Mujer, los que te trajeron se han ido. ¡Nadie te ha condenado!
Jua 8:11  Ella le respondió: —Así es, Señor. Nadie me ha condenado Jesús le dijo: —Tampoco yo te condeno. Puedes irte, pero no vuelvas a pecar.
Jua 8:12  Jesús volvió a hablarle a la gente: —Yo soy la luz que alumbra a todos los que viven en este mundo. Síganme y no caminarán en la oscuridad, pues tendrán la luz que les da vida.
Jua 8:13  Los fariseos le dijeron: —Tú te estás alabando a ti mismo. ¿Cómo sabremos que dices la verdad?
Jua 8:14  Jesús les respondió: —Aunque hable bien de mí, lo que digo es cierto. Porque yo sé de dónde vine, y a dónde voy; sin embargo, ustedes no lo saben.
Jua 8:15  Ustedes juzgan como todos los demás, pero yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  Si lo hiciera, juzgaría de acuerdo a la verdad, porque no juzgo yo solo. Mi Padre, quien me envió, juzga conmigo.
Jua 8:17  La ley de ustedes dice que, para probar que algo es verdad, son necesarios dos testigos.
Jua 8:18  Pues bien, yo hablo bien de mí mismo; y mi Padre, quien me envió, también habla bien de mí.
Jua 8:19  Entonces le preguntaron: —¿Dónde está tu padre? Jesús les respondió: —Si me conocieran, conocerían a mi Padre. Pero como no me conocen, tampoco a él lo conocen.
Jua 8:20  Jesús dijo todo esto mientras enseñaba en el templo, en el lugar donde se ponen las ofrendas. Pero nadie se lo llevó preso, porque aún no había llegado el momento de que todos supieran quién era él realmente.
Jua 8:21  Jesús habló de nuevo: —Yo me voy, y ustedes me buscarán, pero morirán sin que Dios les haya perdonado sus pecados. A donde yo voy, ustedes no pueden ir.
Jua 8:22  Los jefes judíos dijeron: —¿Estará pensando en matarse, y por eso dice que no podemos ir a donde él va?
Jua 8:23  Jesús les aclaró: —Ustedes son pecadores, como todos los que viven en este mundo. Pero yo no soy de este mundo, porque vengo del cielo.
Jua 8:24  Por eso les dije que, si no creen en mí ni en quién soy yo, morirán sin que Dios les haya perdonado sus pecados.
Jua 8:25  Le preguntaron: —¿Y quién eres tú? Jesús les contestó: —¿Por qué tengo que responderles?
Jua 8:26  Más bien, yo tengo mucho que decir de todo lo malo que ustedes hacen. El que me envió dice la verdad, y yo sólo digo lo que le escuché decir.
Jua 8:27  Pero ellos no entendieron que Jesús les estaba hablando de Dios, su Padre.
Jua 8:28  Por eso les dijo: —Ustedes sabrán quién es en realidad el Hijo del hombre cuando me cuelguen de una cruz. También sabrán que no hago nada por mi propia cuenta, sino que sólo digo lo que mi Padre me ha enseñado.
Jua 8:29  Mi Padre nunca me ha abandonado, pues yo siempre hago lo que a él le agrada.
Jua 8:30  Cuando Jesús dijo esto, mucha gente creyó en él.
Jua 8:31  Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él: —Si ustedes obedecen mis enseñanzas, serán verdaderamente mis discípulos;
Jua 8:32  y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.
Jua 8:33  Ellos le contestaron: —Nosotros somos descendientes de Abraham, y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Por qué dices que seremos libres?
Jua 8:34  Jesús les respondió: —Ningún esclavo se queda para siempre con la familia para la cual trabaja. El que se queda para siempre es el hijo de la familia; si él así lo quiere, puede dejar en libertad al esclavo. Les aseguro que cualquiera que peca es esclavo del pecado. Por eso, si yo, el Hijo de Dios, les perdono sus pecados, serán libres de verdad.
Jua 8:37  »Yo sé que ustedes son descendientes de Abraham, pero quieren matarme porque no aceptan mis enseñanzas.
Jua 8:38  Yo sólo les digo lo que mi Padre me ha enseñado. Ustedes, en cambio, hacen lo que les ha enseñado su padre.
Jua 8:39  Ellos le dijeron: —¡Nuestro padre es Abraham! Entonces Jesús les contestó: —Si en verdad ustedes fueran descendientes de Abraham, harían lo que él hizo.
Jua 8:40  Pero yo les he dicho la verdad que he escuchado de Dios, y ustedes quieren matarme. ¡Abraham nunca hizo algo así!
Jua 8:41  Pero ustedes hacen exactamente lo mismo que hace su padre. Ellos le contestaron: —¡No nos acuses de tener otro padre! Nuestro único Padre es Dios.
Jua 8:42  Jesús les respondió: —Si en verdad Dios fuera su Padre, ustedes me amarían, porque yo vengo del cielo, donde está Dios. Yo no vine por mi propia cuenta, sino que Dios me envió.
Jua 8:43  Ustedes no pueden entender lo que les digo, porque no les gusta escuchar mi mensaje.
Jua 8:44  El padre de ustedes es el diablo, y ustedes tratan de hacer lo que él quiere. El diablo siempre ha sido un asesino y un gran mentiroso. Todo lo que dice son sólo mentiras, y hace que las personas mientan.
Jua 8:45  »Por eso ustedes no pueden creer que digo la verdad.
Jua 8:46  ¿Quién de ustedes puede acusarme de haber hecho algo malo? Y si digo la verdad, ¿por qué no me creen?
Jua 8:47  Los hijos de Dios escuchan con atención todo lo que Dios dice. Pero ustedes no le ponen atención porque no son sus hijos.
Jua 8:48  Entonces, algunos judíos le dijeron: —Cuando decimos que eres un extranjero indeseable, y que tienes un demonio, no estamos equivocados.
Jua 8:49  Jesús les contestó: —Yo no tengo ningún demonio. Lo que hago es hablar bien de mi Padre; pero ustedes hablan mal de mí.
Jua 8:50  Yo no le pido a la gente que hable bien de mí; es Dios quien lo quiere así, y es él quien juzga.
Jua 8:51  Les aseguro que quien obedezca mi enseñanza, vivirá para siempre con Dios.
Jua 8:52  Ellos le dijeron: —Ahora sí estamos seguros de que tienes un demonio. Nuestro antepasado Abraham murió, y también murieron los profetas. Sin embargo, tú dices que el que te obedezca vivirá para siempre.
Jua 8:53  ¿Acaso te crees más importante que Abraham? Él y los profetas murieron. ¿Qué te estás creyendo?
Jua 8:54  Jesús les respondió: —¿De qué me serviría hablar bien de mí mismo? Mi Padre es el que habla bien de mí, y ustedes dicen que él es su Dios.
Jua 8:55  En realidad, ustedes no lo conocen. Yo sí lo conozco. Lo conozco, y lo obedezco. Si dijera lo contrario, sería un mentiroso como ustedes.
Jua 8:56  Abraham, el antepasado de ustedes, se alegró mucho de que vería el tiempo en que yo vendría al mundo; lo vio, y le causó mucha alegría.
Jua 8:57  Entonces le preguntaron: —Ni siquiera has cumplido cincuenta años de edad. ¿Cómo puedes decir que has visto a Abraham?
Jua 8:58  Jesús les dijo: —Les aseguro que mucho antes de que naciera Abraham ya existía yo.
Jua 8:59  Entonces aquellos judíos quisieron matar a Jesús a pedradas; pero él se mezcló entre la multitud y salió del templo.

Jua 8:1  Pero Yahshúa se fue al Monte de los Olivos.
Jua 8:2  Cuando amaneció apareció otra vez en el patio del Templo, donde todo el pueblo se reunió alrededor de El; y El se sentó para enseñarles.[79]
Jua 8:3  Los maestros de la Toráh y los Perushim trajeron una mujer que había sido sorprendida cometiendo adulterio; y la hicieron pararse en el medio del grupo.
Jua 8:4  Entonces le dijeron a El: "Rabí, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio.
Jua 8:5  Ahora, en nuestra Toráh, Moshe ordenó que tal mujer fuera apedreada hasta la muerte. ¿Qué es lo que Tú dices al respecto?"
Jua 8:6  Ellos dijeron esto para tenderle una trampa, para que pudieran tener base y acusarle; pero Yahshúa se agachó y comenzó a escribir en el polvo con su dedo.[80]
Jua 8:7  Y como insistían en preguntarle, El se enderezó, y dijo: "El que de ustedes esté sin pecado, sea el primero en tirar la piedra contra ella."
Jua 8:8  Entonces se agachó y siguió escribiendo en el polvo.
Jua 8:9  Al oír esto, ellos se empezaron a ir uno a uno, los ancianos primero, hasta que se quedó solo con la mujer que todavía estaba allí.
Jua 8:10  Poniéndose de pie, Yahshúa le dijo: "¿Dónde están ellos? ¿Nadie te ha condenado?"
Jua 8:11  Ella dijo: "Nadie, Adón." Yahshúa dijo: "Tampoco Yo te condeno. Ahora vete, y no peques más."
Jua 8:12  Yahshúa les habló de nuevo: "Yo soy la luz del mundo; todo el que me siga, nunca andará en oscuridad, sino que tendrá la luz que da vida."
Jua 8:13  Los Perushim le dijeron: "Ahora estás dando testimonio de ti mismo; Tu testimonio no es válido."
Jua 8:14  Yahshúa les respondió: "Aunque Yo dé testimonio de mi mismo, mi testimonio es en verdad válido; porque Yo sé de donde he venido y hacia donde voy, pero ustedes no saben de donde vengo ni para donde voy.
Jua 8:15  Ustedes juzgan simplemente por normas humanas; y Yo no paso juicio sobre nadie;
Jua 8:16  y si en verdad Yo fuera a pasar juicio sobre alguien, mi juicio sería válido; porque no soy sólo Yo el que juzgo, sino Yo y el que me envió.
Jua 8:17  Y aun en la Toráh de ustedes está escrito que el testimonio de dos personas es válido.
Jua 8:18  Yo soy el que doy testimonio de mí mismo y también el Padre que me envió."
Jua 8:19  Ellos le dijeron: "¿Dónde está este padre tuyo?" Yahshúa respondió: "Ustedes no me conocen a mí, ni a mi Padre; si a mí me conocieran, también conocieran a mi Padre."
Jua 8:20  El dijo estas cosas cuando estaba enseñando en la cámara del tesoro del Templo; a pesar de eso, nadie lo arrestó, porque su momento no había llegado.
Jua 8:21  De nuevo les dijo: "Yo me voy, y me buscarán, pero morirán en sus pecados; donde Yo voy ustedes no pueden venir."
Jua 8:22  Los Yahudim dijeron: "¿Será que va a cometer suicidio, cuando El dice: a donde Yo voy, ustedes no pueden venir?"
Jua 8:23  Yahshúa les dijo: "Ustedes son de abajo, Yo soy de lo alto; ustedes son de este mundo, Yo no soy de este mundo.
Jua 8:24  Por esto les dije que morirán en sus pecados; porque si ustedes no confían que Yo soy[81] quién digo que soy, morirán en sus pecados."
Jua 8:25  A esto le dijeron: "¿Tú? ¿Quién eres Tú?" Yahshúa respondió: "Lo mismo que les he estado diciendo desde el principio [Bereshit].
Jua 8:26  Hay muchas cosas que pudiera decir acerca de ustedes, y muchos juicios que pudiera hacer. Sin embargo, el que me envió es verdadero; así que Yo digo al mundo sólo lo que he oído de El."
Jua 8:27  Ellos no entendían que El hablaba del Padre.
Jua 8:28  Así que Yahshúa dijo: "Cuando ustedes hayan levantado al Ben Ha Adam, entonces conocerán que Yo soy quién digo que soy, y que nada hago por mí mismo, sino que sólo digo lo que el Padre me ha enseñado.
Jua 8:29  También el que me envió, está todavía conmigo; El no me ha dejado solo, porque Yo siempre hago lo que a El le complace.[82]
Jua 8:30  Mucha gente que le oyó decir estas cosas, confió en El.
Jua 8:31  Por tanto, Yahshúa dijo a los Yahudim que habían confiado en El: "Si ustedes obedecen lo que Yo les digo, entonces son en verdad mis talmidim,[83]
Jua 8:32  ustedes conocerán la verdad, y la verdad los pondrá en libertad."[84]
Jua 8:33  Ellos respondieron: "Nosotros todos somos descendientes de Avraham y nunca hemos sido esclavos de nadie; así que, ¿qué quieres decir con, y los pondrá en libertad?"[85]
Jua 8:34  Yahshúa les respondió: "¡Sí, en verdad! Yo les digo que cualquiera que practique el pecado es esclavo del pecado.
Jua 8:35  Ahora, un esclavo no permanece con la familia para siempre, pero un hijo sí permanece con ella para siempre.
Jua 8:36  ¡Así que, si el Hijo los libera, serán realmente libres![86]
Jua 8:37  Yo sé que ustedes son descendientes de Avraham, a pesar de eso quieren matarme, porque lo que les digo no prospera en ustedes.
Jua 8:38  ¡Yo digo lo que mi Padre me ha enseñado, ustedes hacen lo que su padre les ha dicho!"
Jua 8:39  Ellos le respondieron: "Nuestro padre es Avraham." Yahshúa les dijo: "¡Si son hijos de Avraham, entonce s hagan las obras que Avraham hizo!
Jua 8:40  Y como lo veo, ustedes están buscando la manera de matarme a mí, un hombre que les ha dicho la verdad, la cual ha oído de YAHWEH. ¡Avraham nunca hizo algo como esto!
Jua 8:41  Ustedes están haciendo las cosas que su padre hace." Ellos le dijeron a El: "¡Nosotros no somos hijos ilegítimos, tenemos sólo un Padre, que es Elohim!"
Jua 8:42  Yahshúa les respondió: "Si YAHWEH Elohim fuera su Padre, ustedes me amarían; porque Yo salí de YAHWEH Elohim, y he venido acá. Yo no vine por cuenta propia, sino El me envió.
Jua 8:43  ¿Por qué no entienden lo que les estoy diciendo? Porque no pueden soportar escuchar mi mensaje.
Jua 8:44  Ustedes pertenecen a su padre ha satán,[87] y quieren llevar a cabo los deseos de su padre. El ha sido asesino desde el principio, y nunca ha estado de parte de la verdad, porque no hay verdad en él. ¡Cuando él dice mentiras, él habla con carácter, porque es mentiroso; en verdad es el inventor de la mentira!
Jua 8:45  Pero en cuanto a mí, porque Yo digo la verdad, ustedes no me creen.
Jua 8:46  ¿Quién de ustedes me puede enseñar donde estoy equivocado? Si estoy diciendo la verdad, ¿por qué no me creen?
Jua 8:47  El que pertenece a YAHWEH, escucha lo que YAHWEH dice. La razón por la que ustedes no escuchan, es porque no pertenecen a YAHWEH."
Jua 8:48  Los Yahudim respondieron: "¿No estamos en lo correcto cuando decimos que Tú eres de Shomron, y que tienes demonio?"[88]
Jua 8:49  Yahshúa respondió: "¿Yo? No tengo ningún demonio. Estoy honrando a mi Padre; pero ustedes me deshonran. [89]
Jua 8:50  No estoy buscando alabanza para mí mismo. Sólo hay uno que la busca, y ese es el juez.
Jua 8:51  ¡Sí, en verdad! Yo les digo que todo el que obedece mis enseñanzas, nunca verá la muerte."[90]
Jua 8:52  Los Yahudim le dijeron: "¡Ahora sí sabemos sin lugar a dudas que tienes un demo nio! Avraham murió, y también los profetas; y aún Tú dices: 'El que obedezca mis enseñanzas nunca verá la muerte.'
Jua 8:53  Avraham avinu murió; tú no eres mayor que él, ¿o sí lo eres? Y los profetas también murieron. ¿Quién crees tú que eres?"
Jua 8:54  Yahshúa respondió: "Si Yo me alabo a mí mismo, mi alabanza no cuenta para nada. El que me está alabando es mi Padre, el mismo que ustedes siguen diciendo: 'El es nuestro Elohim.'
Jua 8:55  Ahora, ustedes no lo han conocido, mas Yo sí lo conozco; ¡en verdad si Yo dijera que no lo conozco, sería mentiroso como ustedes! Pero Yo sí lo conozco, y obedezco su palabra.
Jua 8:56  Avraham, el padre de ustedes, se alegró de que habría de ver mi día; entonces lo vio y se alegró muchísimo."
Jua 8:57  Los Yahudim dijeron: "Si no tienes ni cincuenta años todavía. ¿Y has visto a Avraham?"
Jua 8:58  Yahshúa les dijo: "¡Sí, en verdad, antes de que Avraham tuviera vida, YO SOY!" [91]
Jua 8:59  Por esto, empezaron a recoger piedras para tirárselas; pero Yahshúa fue escondido y dejó los terrenos del Templo.

Jua 8:1  Pero Jesús se fue al monte de los Olivos.
Jua 8:2  "Al amanecer fue otra vez al templo, y toda la gente se le acercó. Jesús se sentó y empezó a enseñarles."
Jua 8:3  Los maestros de la ley y los fariseos le trajeron a una mujer. La habían sorprendido cometiendo adulterio. La pusieron en medio de ellos y
Jua 8:4  "le dijeron a Jesús: -Maestro, esta mujer fue sorprendida cometiendo adulterio."
Jua 8:5  Moisés nos ordenó en su ley que matemos a pedradas a la mujer que haga esto. ¿Tú qué dices?
Jua 8:6  Ellos le decían esto para ponerlo a prueba. Buscaban algo de qué acusarlo. Él se agachó y empezó a escribir en el suelo con el dedo.
Jua 8:7  Ellos seguían preguntándole lo mismo. Así que se puso de pie y les dijo: -El que nunca haya pecado que tire la primera piedra.
Jua 8:8  Se volvió a agachar y siguió escribiendo en el suelo.
Jua 8:9  "Al escuchar esto, se empezaron a ir de uno en uno y los más viejos se fueron primero. Jesús se quedó solo con la mujer que todavía estaba allí parada."
Jua 8:10  "Jesús se puso de pie y le dijo: -Mujer, ¿dónde están ellos? ¿Alguien te condenó?"
Jua 8:11  "Ella dijo: -Nadie, Señor. Jesús le dijo: -Tampoco yo te condeno. Vete y de ahora en adelante no peques más."
Jua 8:12  "Luego Jesús les habló otra vez y dijo: -Yo soy la luz del mundo. El que me sigue nunca andará en la oscuridad, sino que tendrá la luz que da vida."
Jua 8:13  Entonces los fariseos le dijeron: -Tú estás hablando de ti mismo. Eres el único que dice que eso es verdad. Eso no vale.
Jua 8:14  "Jesús les contestó: -Si yo hablo por mi cuenta, sí vale. Vale porque yo sé de dónde vengo y a dónde voy. Ustedes no saben de dónde vengo ni para dónde voy."
Jua 8:15  Ustedes me juzgan como juzgarían a cualquier ser humano. Yo no juzgo a nadie.
Jua 8:16  "Y si juzgo, mi juicio es válido porque cuando juzgo no estoy solo, sino que el Padre que me envió está conmigo."
Jua 8:17  "En su propia ley está escrito que si dos testigos dicen lo mismo, es válido lo que dicen."
Jua 8:18  Pues yo soy un testigo y hablo de mi parte. El Padre queme envió es mi otro testigo.
Jua 8:19  "Entonces le preguntaron: -¿Dónde está tu padre? Jesús contestó: -Ustedes no me conocen a mí, ni a mi Padre. Si me conocieran, también conocerían al Padre."
Jua 8:20  "Jesús dijo esto mientras enseñaba en el área del templo, cerca del lugar donde la gente deja sus ofrendas. Pero nadie lo arrestó, porque su momento aún no había llegado."
Jua 8:21  "Él les dijo otra vez: -Me voy y ustedes me buscarán, pero morirán con su pecado. No pueden ir a donde yo voy."
Jua 8:22  "Entonces los líderes judíos comenzaron a preguntar: -¿Se supone que se va a suicidar? Puede ser eso, pues él dijo: 'No pueden ir a donde yo voy'."
Jua 8:23  Jesús les dijo: -Ustedes son de aquí abajo y yo soy de arriba. Ustedes pertenecen a este mundo y yo no.
Jua 8:24  Les digo entonces que morirán en sus pecados si no creen que Yo Soy. Entonces comenzaron a preguntarle:
Jua 8:25  -¿Quién eres tú? Jesús les contestó: -Soy quien les he estado diciendo desde el comienzo.
Jua 8:26  "Podría decirles muchas cosas para juzgarlos, pero yo sólo digo lo queme dice el que me envió, y él dice la verdad."
Jua 8:27  Ellos no sabían que Jesús les estaba hablando sobre el Padre.
Jua 8:28  "Entonces les dijo: -Cuando ustedes levanten al Hijo del hombre, entonces sabrán que Yo Soy. Sabrán que no hago nada por mi propia cuenta, y entenderán que yo digo sólo lo que el Padre me enseñó."
Jua 8:29  "El que me envió está conmigo y nunca me deja solo, porque siempre hago lo que a él le agrada."
Jua 8:30  "Mientras Jesús decía estas cosas, muchos creyeron en él."
Jua 8:31  "Luego Jesús empezó a decirles a los judíos que habían creído en él: -Si ustedes siguen obedeciendo mi enseñanza, serán verdaderamente mis seguidores."
Jua 8:32  "Conocerán la verdad, y la verdad los hará libres."
Jua 8:33  Ellos le contestaron: -Nosotros somos de la familia de Abraham. Nunca hemos sido siervos de nadie. ¿Por qué dices que seremos libres?
Jua 8:34  Jesús les respondió: -La verdad es que todo el que se la pase pecando es siervo del pecado.
Jua 8:35  "Un siervo no se queda para siempre con una familia, pero un hijo siempre pertenece a la familia."
Jua 8:36  "Entonces si el Hijo los libera, ustedes serán realmente libres."
Jua 8:37  "Yo sé que ustedes son de la familia de Abraham, pero están tratando de matarme porque ustedes no aceptan lo que les enseño."
Jua 8:38  "Yo les hablo de lo que mi Padre me mostró, pero ustedes hacen lo que han oído de su padre."
Jua 8:39  "Ellos le contestaron: -¡Nuestro padre es Abraham! Entonces Jesús les dijo: -Si ustedes fueran hijos de Abraham, harían lo mismo que él hizo."
Jua 8:40  "Sin embargo, ahora ustedes tratan de matarme. Soy un hombre que les ha dicho la verdad que recibió de Dios. ¡Abraham no hizo nada de eso!"
Jua 8:41  "Ustedes hacen lo que su padre hace. Ellos le dijeron: -Nosotros no somos como esos hijos que nunca han conocido a su padre. Tenemos un solo padre, que es Dios."
Jua 8:42  "Jesús les dijo: -Si Dios fuera su padre, me amarían porque yo vengo de Dios y ahora estoy aquí. No vine por mi cuenta, él me envió."
Jua 8:43  ¿Por qué no entienden lo que digo? Porque no pueden aceptar mi mensaje.
Jua 8:44  Ustedes son de su padre el diablo. A ustedes les gusta hacer las maldades que el diablo quiere que hagan. Desde el comienzo él fue un asesino y no tiene nada que ver con la verdad porque no hay verdad en él. Es un mentiroso y padre de la mentira.
Jua 8:45  """Yo les digo la verdad, pero ustedes no me creen."
Jua 8:46  "Ninguno de ustedes puede decir que soy culpable de pecado. Si yo les digo la verdad, ¿por qué no me creen?"
Jua 8:47  "El que pertenece a Dios acepta lo que Dios dice. Ustedes no aceptan lo que Dios dice, porque no son de Dios""."
Jua 8:48  "Los judíos le respondieron: -Tú eres como un samaritano, y tienes un demonio que te está volviendo loco. ¿No es cierto que tenemos razón al decir esto?"
Jua 8:49  "Jesús respondió -No tengo ningún demonio. Lo que hago es honrar a mi Padre, pero ustedes me insultan."
Jua 8:50  "Yo no busco honores para mí, pero hay alguien que quiere darme honores, y él es quien juez."
Jua 8:51  "Les digo la verdad: el que siga mis enseñanzas, no morirá jamás."
Jua 8:52  Los líderes judíos le dijeron: -Ahora sabemos que tienes un demonio dentro de ti. Abraham y los profetas murieron y tú dices: 'el que siga mis enseñanzas no morirá jamás'.
Jua 8:53  ¿Acaso tú eres más importante que nuestro padre Abraham? Él murió y los profetas también. ¿Tú quién te crees?
Jua 8:54  "Jesús contestó: -Si yo me doy honor a mí mismo, eso no vale nada. Mi Padre me honra, el que ustedes dicen que es su Dios."
Jua 8:55  "Ustedes no lo conocen, pero yo sí. Si yo dijera que no lo conozco sería un mentiroso como ustedes. Pero lo conozco y obedezco lo que él dice."
Jua 8:56  "Abraham, su padre, se alegró mucho de que iba a poder ver el día en que yo viniera. Él lo vio y se puso muy contento."
Jua 8:57  "Entonces los líderes judíos le dijeron: -Tú ni siquiera tienes cincuenta años, ¿cómo dices que has visto a Abraham?"
Jua 8:58  "Jesús les dijo: -Les digo la verdad: antes de que Abraham naciera, Yo Soy."
Jua 8:59  "Entonces recogieron piedras para tirarle, pero Jesús se escondió y luego se escapó del templo."