Biblia Adventista - Biblia de Estudio
  W201
 


 BibliadeEstudioAdventistaHechos de los A: 07.BibliadeEstudioAdventista

La version Reina Valera 1990 con comentarios de elena White,referencias biblicas y otros complementos (Por editar)se encuentra en las subpaginas de Hechos de los Apostoles.


 

Hch 7:1  Y dijo el sumo sacerdote: «¿Si esto así se es?»
Hch 7:2  Y él dijo: «Varones hermanos y padres, oíd: «El Dios de la gloria aparecióse a nuestro padre Abrahán que estaba en la Mesopotamia antes de habitar él en Carrán(a) ;
Hch 7:3  y dijo a él: «Sal de tu tierra y tu parentela, y ven a la tierra que yo te mostraré».
Hch 7:4  Entonces, saliendo de tierra de caldeos, habitó en Carrán. Y, de allí, después de morir el padre de él, trasladóle a esta tierra en que vosotros ahora habitáis;
Hch 7:5  y no le dio heredad en ella «ni pisada de pie(b) », y prometióle «dársela, en posesión y a su simiente después de él»; no teniendo él hijo.
Hch 7:6  Y habló así Dios: que «será la simiente de él cohabitadora en tierra extraña; y esclavizaránla y maltratarán años cuatrocientos;
Hch 7:7  y la gente a quien fueren esclavizados, juzgaré yo». Dios dice; «y después de esto saldrán y serviránme en este lugar».
Hch 7:8  Y dióle testamento de circuncisión; y así engendró a Isaac, y circuncidóle el día, el octavo; e Isaac a Jacob, y Jacob a los doce patriarcas.
Hch 7:9  Y los patriarcas, celando, a José vendieron para Egipto; y era Dios con él;
Hch 7:10  y arrancóle de todas sus tribulaciones, y dióle gracia y sabiduría «delante de Faraón, rey de Egipto; y constituyóle príncipe sobre Egipto y toda su casa».
Hch 7:11  Y vino hambre sobre todo el Egipto y Canaán, y tribulación grande; y no hallaban víveres nuestros padres.
Hch 7:12  Y, oyendo Jacob haber cereales en Egipto, despachó a nuestros padres primero;
Hch 7:13  y a lo segundo(c) , fue conocido José de sus hermanos, y manifiesto fue a Faraón el linaje de José.
Hch 7:14  Y, enviando José, llamó a sí a Jacob, su padre, y toda la parentela: en almas, setenta y cinco.
Hch 7:15  Y descendió Jacob a Egipto; y él falleció y nuestros padres,
Hch 7:16  y traspuestos fueron a Siquem y puestos en la tumba que compró Abrahán con precio de plata a los hijos de Hemor en Siquem.
Hch 7:17  Y, como se acercó el tiempo de la promesa que comunicó Dios a Abrahán, acrecentóse el pueblo y multiplicóse en Egipto;
Hch 7:18  hasta que se levantó un rey, otro, en Egipto, quien no sabía a José.
Hch 7:19  Este, sofisticando(d)  al linaje nuestro, maltrató a los padres, haciendo las criaturas expósitas, de ellos, para que no se vivificaran.
Hch 7:20  En el cual tiempo nació Moisés, y era gracioso a Dios. Que se crió meses tres en la casa del padre;
Hch 7:21  Y, expuesto él, llevóselo la hija del Faraón y crióselo para hijo.
Hch 7:22  e instruyóse a Moisés en toda sabiduría de egipcios; y era poderoso en palabras y obras suyas.
Hch 7:23  Y, como se le cumplió cuadricenal tiempo, ascendió a su corazón visitar a sus hermanos, los hijos de Israel.
Hch 7:24  Y, viendo a un injuriado, defendió e hizo venganza al domeñado, hiriendo al egipcio.
Hch 7:25  Y pensaba entender los hermanos que Dios, por mano de él, daba salud a ellos; pero ellos no entendieron.
Hch 7:26  Y al siguiente día, aparecióseles, riñendo ellos; y reconciliábales a paz, diciendo: «Varones, hermanos sois: ¿por qué os injuriáis?»
Hch 7:27  Y el que injuriaba al prójimo, empujóle, diciendo: «¿Quién te ha constituido príncipe y juez sobre nosotros?
Hch 7:28  ¿Qué? ¿arrebatarme tú quieres del modo que arrebataste ayer al egipcio?»
Hch 7:29  Y huyó Moisés en esta palabra; e hízose cohabitador en tierra de Madián; donde engendró hijos dos.
Hch 7:30  Y, cumpliéndose años cuarenta, apareciósele en el desierto del monte Sinaí un ángel en llama de fuego de una zarza.
Hch 7:31  Y Moisés, viendo, maravillóse de la visión; y, llegándose para contemplar, vino voz de Señor:
Hch 7:32  «¡Yo, el Dios de tus padres: el Dios de Abrahán, e Isaac y Jacob!» Y tembloroso poniéndose Moisés, no se atrevía a contemplar.
Hch 7:33  Y díjole el Señor: «Suelta tu zapato de los pies; porque el lugar en que parado estás, tierra santa es.
Hch 7:34  Viendo, he visto el maltrato de mi pueblo el de Egipto; y su gemido he escuchado, descendido a libertarles; y, ahora ¡acá! enviaréte a Egipto».
Hch 7:35  A este Moisés, a quien negaron, diciendo: «¿Quién te ha constituido príncipe y juez?» —a éste Dios, y príncipe y redentor ha enviado con mano de ángel, del aparecido a él en la zarza.
Hch 7:36  Este sacóles, haciendo prodigios y señales en Egipto, y en el rojo mar, y en el desierto, años cuarenta.
Hch 7:37  Este es Moisés, el que habló a los hijos de Israel: «Profeta os levantará Dios de entre vuestros hermanos, como a mí, a él oíd.
Hch 7:38  Este es el que estuvo en la iglesia(e) , en el desierto, con el ángel el que le habló en el monte Sinaí; y(f)  nuestros padres, que recibió sentencias vivientes para darnos;
Hch 7:39  del que no quisieron escuchadores hacerse nuestros padres, sino empujaron; y volviéronse en sus corazones a Egipto,
Hch 7:40  diciendo a Aarón: «Haznos dioses que nos precedan; porque este Moisés, que nos sacó de tierra de Egipto— no sabemos qué ha acontecido a él».
Hch 7:41  Y becerrificaron en aquellos días y trajeron hostia al ídolo; y gozábanse en las obras de sus manos.
Hch 7:42  Mas convirtió(g)  Dios y entrególes a servir al ejército del cielo, según está escrito en libro de los profetas: Am. 5,25-27 ¿Acaso víctimas y hostias habéisme ofrecido años cuarenta en el desierto, casa de Israel?
Hch 7:43  Y recibisteis el tabernáculo de Moloc y el astro del dios Refá(h) ; las figuras que hicisteis, a ¡adorarlas! y os trasladaré allende de Babilonia».
Hch 7:44  El tabernáculo del testimonio tuvieron nuestros padres en el desierto, según que ordenó el que habló a Moisés hacerlo, según la figura que había visto;
Hch 7:45  el que también introdujeron, habiéndolo heredado, nuestros padres con Jesús, en la posesión de las gentes; que arrojó Dios de faz de nuestros padres, hasta los días de David;
Hch 7:46  quien halló gracia a faz de Dios, y pidió hallar pabellón para la casa de Jacob.
Hch 7:47  Y Salomón edificóle casa.
Hch 7:48  Mas no el Excelso en manuhechuras habita; según el profeta dice:
Hch 7:49  Is. 66 ,1 -2 El cielo, a mí, trono; y la tierra escabel de mis pies: ¿qué casa edificaréisme (dice Señor); o qué lugar de mi reposo?
Hch 7:50  ¿que mi mano no ha hecho todo esto?»
Hch 7:51  Cuelliduros e incircuncisos de corazones y de las orejas, vosotros siempre al Espíritu, el Santo, combatís; como vuestros padres, también vosotros.
Hch 7:52  ¿A cuál de los profetas no persiguieron los padres de vosotros? Y mataron a los que prenunciaban acerca de la venida del Justo; del que ahora vosotros traidores y asesinos os habéis hecho;
Hch 7:53  los que recibisteis la ley en disposiciones de ángeles y no guardasteis...»
Hch 7:54  Y, oyendo esto, aserrabánseles los corazones, y rechinaban los dientes contra él.
Hch 7:55  Y, estando lleno de Espíritu Santo, fijándose en el cielo, vio gloria de Dios, y a Jesús parado a la derecha de Dios;
Hch 7:56  y dijo: «He aquí, miro los cielos abiertos y al Hijo del hombre a la derecha parado de Dios».
Hch 7:57  Y clamando con voz grande, taparon sus orejas, y precipitáronse unánimemente sobre él;
Hch 7:58  y, lanzando fuera de la ciudad, lapidaban. Y los testigos depusieron sus vestiduras a los pies de un joven, llamado Saulo;
Hch 7:59  y lapidaban a Esteban, que invocaba y decía: «Señor Jesús, recibe mi Espíritu».
Hch 7:60  Y, poniendo las rodillas, clamó con voz grande: «Señor, no les peses(i)  este pecado». Y, esto diciendo durmióse, en el Señor.

 


 

Hch 7:1  Díjole el sumo sacerdote: ¿Es como éstos dicen?
Hch 7:2  El contestó: “Hermanos y padres, escuchad: El Dios de la gloria se apareció a nuestro padre Abraham cuando moraba en Mesopotamia, antes que habitase en Jarán,
Hch 7:3  y le dijo: Sal de tu tierra y de tu parentela y ve a la tierra que yo te mostraré.
Hch 7:4  Entonces salió del país de los caldeos y habitó en Jarán. De allí, después de la muerte de su padre, se trasladó a esta tierra, en la cual vosotros habitáis ahora;"
Hch 7:5  no le dio en ella heredad, ni aun un pie de tierra, mas le prometió dársela en posesión a él, y a su descendencia después de él, cuando no tenía hijos.
Hch 7:6  Pues le habló Dios: “Habitará tu descendencia en tierra extranjera y la esclavizarán y maltratarán por espacio de cuatrocientos años;"
Hch 7:7  pero al pueblo a quien han de servir le juzgaré yo, dice Dios, y después de esto saldrán y me adorarán en este lugar.”
Hch 7:8  Luego le otorgó el pacto de la circuncisión; y así engendró a Isaac, a quien circuncidó el día octavo, e Isaac a Jacob y Jacob a los doce patriarcas."
Hch 7:9  Pero los patriarcas, por envidia de José, vendieron a éste para Egipto;"
Hch 7:10  mas Dios estaba con él y le sacó de todas sus tribulaciones, y le dio gracia y sabiduría delante del Faraón, rey de Egipto, que le constituyó gobernador de Egipto y de toda su casa”
Hch 7:11  Entonces vino el hambre sobre toda la tierra de Egipto y de Cañan, y una gran tribulación, de modo que nuestros padres no encontraban provisiones;"
Hch 7:12  mas oyendo Jacob que había trigo en Egipto, envió primero a nuestros padres,
Hch 7:13  y a la segunda vez José fue reconocido por sus hermanos y su linaje dado a conocer al Faraón.
Hch 7:14  Envió José a buscar a su padre con toda su familia, en número de setenta y cinco personas;"
Hch 7:15  y descendió Jacob a Egipto, donde murieron él y nuestros padres.
Hch 7:16  Fueron trasladados a Siquem y depositados en el sepulcro que Abraham había comprado a precio de plata, de los hijos de Emmor en Siquem.
Hch 7:17  Cuando se iba acercando el tiempo de la promesa hecha por Dios a Abraham, el pueblo creció y se multiplicó en Egipto,
Hch 7:18  hasta que surgió sobre Egipto otro rey que no había conocido a José.
Hch 7:19  Usando de malas artes contra nuestro linaje, afligió a nuestros padres hasta hacerlos exponer a sus hijos para que no viviesen.
Hch 7:20  En aquel tiempo nació Moisés, hermoso a los ojos de Dios, que fue criado por tres meses en casa de su padre;"
Hch 7:21  y que, expuesto, fue recogido por la hija del Faraón, que le hizo criar como hijo suyo.
Hch 7:22  Y fue Moisés instruido en toda la sabiduría de los egipcios y era poderoso en palabras y obras.
Hch 7:23  Así que cumplió los cuarenta años sintió deseos de visitar a sus hermanos, los hijos de Israel;"
Hch 7:24  y viendo a uno maltratado, le defendió y le vengó, matando al egipcio que le maltrataba.
Hch 7:25  Creía él que entenderían sus hermanos que Dios les daba por su mano la salud, pero ellos no lo entendieron.
Hch 7:26  Al día siguiente vio a otros dos que estaban riñendo, y procuró reconciliarlos, diciendo: ¿Por qué, siendo hermanos, os maltratáis uno a otro?
Hch 7:27  Pero el que maltrataba a su prójimo le rechazó diciendo: ¿Y quién te ha constituido príncipe y juez sobre nosotros?
Hch 7:28  ¿Acaso pretendes matarme, como mataste ayer al egipcio?
Hch 7:29  Al oír esto huyó Moisés, y moró extranjero en la tierra de Madián, en la que engendró dos hijos.
Hch 7:30  Pasados cuarenta años se le apareció un ángel en el desierto del Sinaí, en la llama de una zarza que ardía.
Hch 7:31  Se maravilló Moisés al advertir la visión, y acercándose para examinarla, le fue dirigida la voz del Señor:
Hch 7:32  “Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.” Estremecióse Moisés y no se atrevía a mirar.
Hch 7:33  El Señor le dijo: “Desata el calzado de tus pies, porque el lugar en que estás es tierra santa.
Hch 7:34  He visto la aflicción de mi pueblo en Egipto y he oído sus gemidos. Por eso he descendido para librarlos; ven, pues, que te envíe a Egipto.”
Hch 7:35  Pues a este Moisés, a quien ellos negaron diciendo: ¿Quién te ha constituido príncipe y juez?, a éste le envió Dios por príncipe y redentor por mano del ángel que se le apareció en la zarza.
Hch 7:36  El los sacó, haciendo prodigios y milagros en la tierra de Egipto, en el mar Rojo y en el desierto por espacio de cuarenta años.
Hch 7:37  Ese es el Moisés que dijo a los hijos de Israel: Dios os suscitará de entre vuestros hermanos un profeta corno yo.
Hch 7:38  Ese es el que estuvo en medio de la asamblea en el desierto con el ángel, que en el monte de Sinaí le hablaba a él, y con nuestros padres; ése es el que recibió la palabra de vida para entregárosla a vosotros,"
Hch 7:39  y a quien no quisieron obedecer nuestros padres, antes le rechazaron y con sus corazones se volvieron a Egipto,
Hch 7:40  diciendo a Arón: Haznos dioses que vayan delante de nosotros, porque ese Moisés que nos sacó de la tierra de Egipto no sabemos qué ha sido de él.
Hch 7:41  Entonces se hicieron un becerro y ofrecieron sacrificios al ídolo, y se regocijaron con las obras de sus manos.
Hch 7:42  Dios se apartó de ellos y los entregó al culto del ejército celeste, según que está escrito en el libro de los profetas. “¿Acaso me habéis ofrecido víctimas y sacrificios | durante cuarenta años en el desierto, casa de Israel?
Hch 7:43  Antes os trajisteis la tienda de Moloc | y el astro del dios Refán, | las imágenes que os hicisteis para adorarlas. | Por eso yo os transportaré al otro lado de Babilonia.”
Hch 7:44  Nuestros padres tuvieron en el desierto la tienda del testimonio, según lo había dispuesto el que ordenó a Moisés que la hiciesen, conforme al modelo que había visto.
Hch 7:45  Esta tienda la recibieron nuestros padres, y la introdujeron cuando con Josué ocuparon la tierra de las gentes, que Dios arrojó delante de nuestros padres; y así hasta los días de David,"
Hch 7:46  que halló gracia en la presencia de Dios y pidió hallar habitación para el Dios de Jacob.
Hch 7:47  Pero fue Salomón quien le edificó una casa.
Hch 7:48  Sin embargo, no habita el Altísimo en casas hechas por mano de hombre, según dice el profeta:
Hch 7:49  “Mi trono es el cielo, | y la tierra el escabel de mis pies; | ¿qué casa me edificaréis a mí, dice el Señor, | o cuál será el lugar de mi descanso?"
Hch 7:50  ¿No es mi mano la que ha hecho todas las cosas?”
Hch 7:51  Duros de cerviz e incircuncisos de corazón y de oídos, vosotros siempre habéis resistido al Espíritu Santo. Como vuestros padres, así también vosotros.
Hch 7:52  ¿A qué profeta no persiguieron vuestros padres? Dieron muerte a los que anunciaban la venida del Justo, a quien vosotros habéis ahora traicionado y crucificado, vosotros,
Hch 7:53  que recibisteis por ministerio de los ángeles la Ley y no la guardasteis.
Hch 7:54  Al oír estas cosas se llenaron de rabia sus corazones y rechinaban los dientes contra él.
Hch 7:55  El, lleno del Espíritu Santo, miró al cielo y vio la gloria de Dios y a Jesús en pie a la diestra de Dios,
Hch 7:56  y dijo: Estoy viendo los cielos abiertos y al Hijo del hombre en pie, a la diestra de Dios.
Hch 7:57  Ellos, gritando a grandes voces, tapáronse los oídos y se arrojaron a una sobre él.
Hch 7:58  Sacándole fuera de la ciudad le apedreaban. Los testigos depositaron sus mantos a los pies de un joven llamado Saulo;"
Hch 7:59  y mientras le apedreaban, Esteban oraba, diciendo: Señor Jesús, recibe mi espíritu.
Hch 7:60  Puesto de rodillas, gritó con fuerte voz: Señor, no les imputes este pecado. Y diciendo esto se durmió. Saulo aprobaba su muerte.

 


 

Hch 7:1  El jefe de los sacerdotes le preguntó a Esteban: —¿Es verdad todo eso que dicen de ti?
Hch 7:2  Y Esteban respondió: —Amigos israelitas y líderes del país: escúchenme. Nuestro poderoso Dios se le apareció a nuestro antepasado Abraham en Mesopotamia, antes de que fuera a vivir en el pueblo de Harán,
Hch 7:3  y le dijo: “Deja a tu pueblo y a tus familiares, y vete al lugar que te voy a mostrar.”
Hch 7:4  »Abraham salió del país de Caldea y se fue a vivir al pueblo de Harán. Tiempo después murió su padre, y Dios hizo que Abraham viniera a este lugar, donde ustedes viven ahora.
Hch 7:5  Aunque Abraham vivió aquí, Dios nunca le permitió ser dueño ni del pedazo de tierra que tenía bajo sus pies. Sin embargo, le prometió a Abraham que le daría este territorio a sus descendientes después de que él muriera. »Cuando Dios le hizo esa promesa, Abraham no tenía hijos.
Hch 7:6  Dios le dijo: “Tus descendientes vivirán como extranjeros en otro país. Allí serán esclavos, y durante cuatrocientos años los tratarán muy mal.
Hch 7:7  Pero yo castigaré a los habitantes de ese país, y tus descendientes saldrán libres y me adorarán en este lugar.”
Hch 7:8  »Con esta promesa, Dios hizo un pacto con Abraham. Le ordenó que, a partir de ese día, todos los hombres israelitas debían circuncidarse para indicar que Dios los aceptaba como parte de su pueblo. Por eso, cuando nació su hijo Isaac, Abraham esperó ocho días y lo circuncidó. De la misma manera, Isaac circuncidó a su hijo Jacob, y Jacob a sus doce hijos.
Hch 7:9  »José fue uno de los doce hijos de Jacob. Como sus hermanos le tenían envidia, lo vendieron como esclavo a unos comerciantes, que lo llevaron a Egipto. Sin embargo, Dios amaba a José,
Hch 7:10  así que lo ayudó en todos sus problemas; le dio sabiduría y lo hizo una persona muy agradable. Por eso el rey de Egipto lo tomó en cuenta, y lo nombró gobernador de todo Egipto y jefe de su palacio.
Hch 7:11  »Tiempo después, hubo pocas cosechas de trigo en toda la región de Egipto y de Canaán. Nuestros antepasados no tenían nada que comer, ni nada que comprar.
Hch 7:12  Pero Jacob se enteró de que en Egipto había bastante trigo, y envió a sus hijos para que compraran. Los hijos de Jacob fueron allá una primera vez.
Hch 7:13  Cuando fueron la segunda vez, José permitió que sus hermanos lo reconocieran. Así el rey de Egipto conoció más de cerca a la familia de José.
Hch 7:14  »Al final, José ordenó que vinieran a Egipto su padre Jacob y todos sus familiares. Eran en total setenta y cinco personas,
Hch 7:15  que vivieron en Egipto hasta que murieron.
Hch 7:16  Todos ellos fueron enterrados en Siquem, en la misma tumba que Abraham había comprado a los hijos de Hamor.
Hch 7:17  »Pasó el tiempo, y a Dios le pareció bien cumplir la promesa que le había hecho a Abraham. Mientras tanto, en Egipto, cada vez había más y más israelitas.
Hch 7:18  »En Egipto comenzó a gobernar un nuevo rey, que no había oído hablar de José.
Hch 7:19  Este rey fue muy malo con los israelitas y los engañó. Además, los obligó a abandonar a los niños recién nacidos, para que murieran.
Hch 7:20  »En ese tiempo nació Moisés. Era un niño muy hermoso, a quien sus padres cuidaron durante tres meses, sin que nadie se diera cuenta.
Hch 7:21  Luego tuvieron que abandonarlo, pero la hija del rey lo rescató y lo crió como si fuera su propio hijo.
Hch 7:22  Moisés recibió la mejor educación que se daba a los jóvenes egipcios, y llegó a ser un hombre muy importante por lo que decía y hacía.
Hch 7:23  »Cuando Moisés tenía cuarenta años, decidió ir a visitar a los israelitas, porque eran de su propia nación.
Hch 7:24  De pronto, vio que un egipcio maltrataba a un israelita. Sin pensarlo mucho, defendió al israelita y mató al egipcio.
Hch 7:25  »Moisés pensó que los israelitas entenderían que Dios los libraría de la esclavitud por medio de él. Pero ellos no pensaron lo mismo.
Hch 7:26  Al día siguiente, Moisés vio que dos israelitas se estaban peleando. Trató de calmarlos y les dijo: “Ustedes son de la misma nación. ¿Por qué se pelean?”
Hch 7:27  »Pero el que estaba maltratando al otro se dio vuelta, empujó a Moisés y le respondió: “¡Y a ti qué te importa! ¿Quién te ha dicho que tú eres nuestro jefe o nuestro juez?
Hch 7:28  ¿Acaso piensas matarme como al egipcio?”
Hch 7:29  »Al oír eso, Moisés huyó de Egipto tan pronto como pudo, y se fue a vivir a Madián. En ese país vivió como extranjero, y allí nacieron dos de sus hijos.
Hch 7:30  »Pasaron cuarenta años. Pero un día en que Moisés estaba en el desierto, cerca del monte Sinaí, un ángel se le apareció entre un arbusto que ardía en llamas.
Hch 7:31  Moisés tuvo mucho miedo, pero se acercó para ver mejor lo que pasaba. Entonces Dios, con voz muy fuerte le dijo:
Hch 7:32  “Yo soy el Dios de tus antepasados. Soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.” »Moisés empezó a temblar, y ya no se atrevió a mirar más.
Hch 7:33  Pero Dios le dijo: “Quítate las sandalias, porque estás en mi presencia.
Hch 7:34  Yo sé muy bien que mi pueblo Israel sufre mucho, porque los egipcios lo han esclavizado. También he escuchado sus gritos pidiéndome ayuda. Por eso he venido a librarlos del poder egipcio. Así que prepárate, pues voy a mandarte a Egipto.”
Hch 7:35  »Los israelitas rechazaron a Moisés, y le dijeron: “¿Quién te ha dicho que tú eres nuestro jefe o nuestro juez?” Pero Dios mismo lo convirtió en jefe y libertador de su pueblo. Esto lo hizo por medio del ángel que se le apareció a Moisés en el arbusto.
Hch 7:36  »Con milagros y señales maravillosas, Moisés sacó de Egipto a su pueblo. Lo llevó a través del Mar de los Juncos, y durante cuarenta años lo guió por el desierto.
Hch 7:37  Y fue Moisés mismo quien les anunció a los israelitas: “Dios elegirá a uno de nuestro pueblo, para que sea un profeta como yo.”
Hch 7:38  »Moisés estuvo con nuestros antepasados en el desierto, y les comunicó todos los mensajes que el ángel de Dios le dio en el monte Sinaí. Esos mensajes son palabras que dan vida.
Hch 7:39  »Pero los israelitas fueron rebeldes. No quisieron obedecer a Moisés y, en cambio, deseaban volver a Egipto.
Hch 7:40  »Un día, los israelitas le dijeron a Aarón, el hermano de Moisés: “Moisés nos sacó de Egipto, pero ahora no sabemos qué le sucedió. Es mejor que nos hagas un dios, para que sea nuestro guía y protector.”
Hch 7:41  »Hicieron entonces una estatua con forma de toro, y sacrificaron animales para adorarla. Luego hicieron una gran fiesta en honor de la estatua, y estaban muy orgullosos de lo que habían hecho.
Hch 7:42  Por eso Dios decidió olvidarse de ellos, pues se pusieron a adorar a las estrellas del cielo. »En el libro del profeta Amós dice: “Pueblo de Israel, durante los cuarenta años que anduvieron por el desierto, ustedes nunca me presentaron ofrendas para adorarme.
Hch 7:43  En cambio, llevaron en sus hombros la tienda con el altar del dios Moloc y la imagen de la estrella del dios Refán. Ustedes se hicieron esos ídolos y los adoraron. Por eso, yo haré que a ustedes se los lleven lejos, más allá de Babilonia.”
Hch 7:44  »Allí, en el desierto, nuestros antepasados tenían el santuario del pacto, que Moisés construyó según el modelo que Dios le había mostrado.
Hch 7:45  El santuario pasó de padres a hijos, hasta el tiempo en que Josué llegó a ser el nuevo jefe de Israel. Entonces los israelitas llevaron consigo el santuario para ocupar el territorio que Dios estaba quitándoles a otros pueblos. Y el santuario estuvo allí hasta el tiempo del rey David.
Hch 7:46  »Como Dios quería mucho a David, este le pidió permiso para construirle un templo donde el pueblo de Israel pudiera adorarlo.
Hch 7:47  Sin embargo, fue su hijo Salomón quien se lo construyó.
Hch 7:48  »Pero como el Dios todopoderoso no vive en lugares hechos por seres humanos, dijo por medio de un profeta:
Hch 7:49  “El cielo es mi trono; sobre la tierra apoyo mis pies. Nadie puede hacerme una casa donde pueda descansar.
Hch 7:50  Yo hice todo lo que existe.”»
Hch 7:51  Antes de terminar su discurso, Esteban les dijo a los de la Junta Suprema: —¡Ustedes son muy tercos! ¡No entienden el mensaje de Dios! Son igual que sus antepasados. Siempre han desobedecido al Espíritu Santo.
Hch 7:52  Ellos trataron mal a todos los profetas, y mataron a los que habían anunciado la venida de Jesús, el Mesías, al que ustedes traicionaron y mataron.
Hch 7:53  Por medio de los ángeles, todos ustedes recibieron la Ley de Dios, pero no la han obedecido.
Hch 7:54  Al escuchar esto, los de la Junta Suprema se enfurecieron mucho contra Esteban.
Hch 7:55  Pero como Esteban tenía el poder del Espíritu Santo, miró al cielo y vio a Dios en todo su poder. Al lado derecho de Dios estaba Jesús, de pie.
Hch 7:56  Entonces Esteban dijo: «Veo el cielo abierto. Y veo también a Jesús, el Hijo del hombre, de pie en el lugar de honor.»
Hch 7:57  Los de la Junta Suprema se taparon los oídos y gritaron. Luego todos juntos atacaron a Esteban,
Hch 7:58  lo arrastraron fuera de la ciudad, y empezaron a apedrearlo. Los que lo habían acusado falsamente se quitaron sus mantos, y los dejaron a los pies de un joven llamado Saulo.
Hch 7:59  Mientras le tiraban piedras, Esteban oraba así: «Señor Jesús, recíbeme en el cielo.»
Hch 7:60  Luego cayó de rodillas y gritó con todas sus fuerzas: «Señor, no los castigues por este pecado que cometen conmigo.» Y con estas palabras en sus labios, murió.

 


 

Hch 7:1  Dijo entonces el príncipe de los sacerdotes: ¿Es esto así?
Hch 7:2  Respondió él: Hermanos míos y padres, escuchadme. El Dios de la gloria apareció a nuestro padre Abrahán cuando estaba en Mesopotamia, antes que habitase en Carán,
Hch 7:3  y le dijo: Sal de tu patria y de tu parentela, y ven al país que yo te mostraré.
Hch 7:4  Entonces salió de la Caldea, y vino a habitar en Carán. De allí, muerto su padre, le hizo pasar Dios a esta tierra, en donde ahora moráis vosotros.
Hch 7:5  Y no le dio de ella en propiedad ni un palmo tan solamente; le prometió, sí, darle la posesión de dicha tierra, y que después de él la poseerían sus descendientes; y eso que a la sazón Abrahán no tenía hijos.
Hch 7:6  Le predijo también Dios que sus descendientes morarían en tierra extraña, y serían esclavizados, y muy maltratados por espacio de cuatrocientos años;
Hch 7:7  si bien, dijo el Señor, yo tomaré venganza de la nación a la cual servirán como esclavos; y al cabo saldrán libres de aquel país, y me servirán a mí en este lugar.
Hch 7:8  Hizo después con él la alianza sellada con la circuncisión; y así Abrahán habiendo engendrado a Isaac, le circuncidó a los ocho días; Isaac tuvo a Jacob ; y Jacob a los doce patriarcas.
Hch 7:9  Los patriarcas movidos de envidia, vendieron a José para ser llevado a Egipto, donde Dios estaba con él;
 
Hch 7:10  y le libró de todas sus tribulaciones; y habiéndole llenado de sabiduría, le hizo grato a Faraón, rey de Egipto, el cual le constituyó gobernador de Egipto y de todo su palacio.
Hch 7:11  Vino después el hambre general en todo el Egipto y en la tierra de Canaán, y la miseria fue extrema; de suerte que nuestros padres no hallaban de qué alimentarse.
Hch 7:12  Pero habiendo sabido Jacob que en Egipto había trigo, envió allá a nuestros padres por la primera vez.
Hch 7:13  Y en la segunda que fueron José se dio a conocer a sus hermanos, y fue descubierto su linaje a Faraón.
Hch 7:14  Entonces José envió por su padre Jacob y por toda su parentela, que era de setenta y cinco personas.
Hch 7:15  Bajó, pues, Jacob a Egipto, donde vino a morir él, y también nuestros padres.
Hch 7:16  Y sus huesos fueron después trasladados a Siquem, y colocados en el sepulcro que Abrahán compró de los hijos de Hemor, hijo de Siquem, por cierta suma de dinero.
Hch 7:17  Pero acercándose ya el tiempo de cumplirse la promesa, que con juramento había hecho Dios a Abrahán, el pueblo de Israel fue creciendo y multiplicándose en Egipto,
Hch 7:18  hasta que reinó allí otro soberano, que no sabía nada de José.
Hch 7:19  Este príncipe, usando de una artificiosa malicia contra nuestra nación, persiguió a nuestros padres, hasta obligarlos a abandonar sus niños recién nacidos a fin de que no se propagasen.
Hch 7:20  Por este mismo tiempo nació Moisés, que fue grato a Dios, y el cual por tres meses fue criado ocultamente en casa de su padre.
Hch 7:21  Al fin, habiendo sido abandonado sobre las aguas del Nilo, le recogió la hija de Faraón, y le crió como a hijo suyo.
Hch 7:22  Se le instruyó en todas las ciencias de los egipcios, y llegó a ser varón poderoso, tanto en palabras como en obras.
Hch 7:23  Llegado a la edad de cuarenta años, le vino deseo de ir a visitar a sus hermanos los hijos de Israel.
Hch 7:24  Y habiendo visto que uno de ellos era injuriado, se puso de su parte, y le vengó, matando al egipcio que le injuriaba.
Hch 7:25  El estaba persuadido de que sus hermanos los israelitas conocerían que por su medio les había de dar Dios libertad; mas ellos no lo entendieron.
Hch 7:26  Al día siguiente se metió entre unos que reñían: y los exhortaba a la paz, diciendo: Hombres, vosotros sois hermanos; ¿pues por qué os maltratáis uno al otro?
Hch 7:27  Mas aquel que hacía el agravio a su prójimo, le empujó, diciendo: ¿Quién te ha puesto a ti por príncipe y juez sobre nosotros?
Hch 7:28  ¿Quieres tú por ventura matarme a mí, como mataste ayer al egipcio?
Hch 7:29  Al oír esto Moisés se ausentó, y se retiró a vivir como extranjero en el país de Madián, donde tuvo dos hijos.
Hch 7:30  Cuarenta años después se le apareció un ángel del Señor en el desierto del monte Sinaí , entre las llamas de una zarza que ardía sin consumirse.
Hch 7:31  Se maravilló Moisés al ver aquel espectáculo; y acercándose a contemplarlo, oyó la voz del Señor, que le decía:
Hch 7:32  Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob . Se estremeció entonces Moisés; no osaba mirar lo que aquello era.
Hch 7:33  Pero el Señor le dijo: Quítate de los pies el calzado; porque el lugar en que estás, es una tierra santa.
Hch 7:34  Yo he visto y considerado la aflicción del pueblo mío, que habita en Egipto, y he oído sus gemidos, y he descendido a librarle. Ahora, pues, ven tú, y te enviaré a Egipto.
Hch 7:35  Así que a este Moisés, a quien desecharon, diciendo: ¿Quién te ha constituido nuestro príncipe y juez?, a este mismo envió Dios para ser el caudillo y libertador de ellos, bajo la dirección del ángel, que se le apareció en la zarza.
Hch 7:36  Este mismo los libertó, haciendo prodigios y milagros en la tierra de Egipto, y en el Mar Rojo, y en el desierto por espacio de cuarenta años.
Hch 7:37  Este es aquel Moisés que dijo a los hijos de Israel: Dios os suscitará de entre vuestros hermanos un profeta legislador, como me ha suscitado a mí: a éste debéis obedecer.
Hch 7:38  Moisés es quien, mientras el pueblo estaba congregado en el desierto, estuvo tratando con el ángel, que le hablaba en el monte Sinaí ; es aquel que estuvo con nuestros padres; el que recibió de Dios las palabras de vida para comunicárnoslas;
Hch 7:39  a quien no quisieron obedecer nuestros padres; antes bien le desecharon, y con su corazón y afecto se volvieron a Egipto.
Hch 7:40  Diciendo a Aarón: Haznos dioses que nos guíen, ya que no sabemos qué se ha hecho de ese Moisés, que nos sacó de la tierra de Egipto.
Hch 7:41  Y fabricaron después un becerro, y ofrecieron sacrificio a este ídolo, y hacían regocijo ante la hechura de sus manos.
Hch 7:42  Entonces Dios les volvió las espaldas, y los abandonó a la idolatría de los astros o la milicia del cielo, según se halla escrito en el libro de los profetas: ¡Oh casa de Israel!, ¿por ventura me has ofrecido víctimas y sacrificios los cuarenta años del desierto?
Hch 7:43  Al contrario, habéis conducido el tabernáculo de Moloc y el astro de vuestro dios Remfam, figuras que fabricasteis para adorarlas. Pues yo os transportaré a Babilonia, y más allá.
Hch 7:44  Tuvieron nuestros padres en el desierto el Tabernáculo del Testimonio, según se lo ordenó Dios a Moisés, diciéndole que lo fabricase según el modelo que había visto.
Hch 7:45  Y habiéndolo recibido nuestros padres, lo condujeron bajo la dirección de Josué al país que era la posesión de las naciones, que fue Dios expeliendo delante de ellos, y duró el Tabernáculo hasta el tiempo de David.
Hch 7:46  Este fue acepto a los ojos de Dios, y pidió poder fabricar un templo al Dios de Jacob .
Hch 7:47  Pero el templo quien lo edificó fue Salomón .
Hch 7:48  Si bien el Altísimo no habita precisamente en moradas hechas de mano de hombres, como dice el profeta:
Hch 7:49  El cielo es mi trono, y la tierra el estrado de mis pies. ¿Qué especies de casas me habéis de edificar vosotros?, dice el Señor; o ¿cuál podrá ser digno lugar de mi descanso?
Hch 7:50  ¿Por ventura no hizo mi mano todas estas cosas?
Hch 7:51  ¡Hombres de dura cerviz y de corazón y oído incircuncisos!, vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como fueron vuestros padres, así sois vosotros.
Hch 7:52  ¿A qué profeta no persiguieron vuestros padres? Ellos son los que mataron a los que anunciaban la venida del Justo, que vosotros acabáis de entregar, y del cual habéis sido homicidas;
Hch 7:53  vosotros que recibisteis la ley por ministerio de ángeles, y no la habéis guardado.
 
Hch 7:54  Al oír tales cosas, ardían en cólera sus corazones, y crujían los dientes contra él.
Hch 7:55  Mas Esteban, estando lleno del Espíritu Santo, y fijando los ojos en el cielo vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios.
Hch 7:56  Y dijo: Estoy viendo ahora los cielos abiertos, y al Hijo del hombre sentado a la diestra de Dios.
Hch 7:57  Entonces clamando ellos con gran gritería se taparon los oídos, y después todos a una arremetieron contra él.
Hch 7:58  Y arrojándole fuera de la ciudad le apedrearon; y los testigos depositaron sus vestidos a los pies de un mancebo, que se llamaba Saulo.
Hch 7:59  Y apedreaban a Esteban, el cual estaba orando, y diciendo: ¡Señor Jesús , recibe mi espíritu!
Hch 7:60  Y poniéndose de rodillas, clamó en alta voz: ¡Señor, no les hagas cargo de este pecado! Y dicho esto durmió en el Señor. Saulo había consentido como los otros a la muerte de Esteban.

 


 

Hch 7:1 

Defensa y muerte de Esteban
  El sumo sacerdote dijo entonces: ¿Es esto así?
Hch 7:2  Y él dijo:
 Varones hermanos y padres, oíd: El Dios de la gloria apareció a nuestro padre Abraham, estando en Mesopotamia, antes que morase en Harán,
Hch 7:3  y le dijo: Sal de tu tierra y de tu parentela, y ven a la tierra que yo te mostraré.(A)
Hch 7:4  Entonces salió de la tierra de los caldeos y habitó en Harán;(B) y de allí, muerto su padre, Dios le trasladó a esta tierra, en la cual vosotros habitáis ahora.(C)
Hch 7:5  Y no le dio herencia en ella, ni aun para asentar un pie; pero le prometió que se la daría en posesión, y a su descendencia después de él,(D) cuando él aún no tenía hijo.
Hch 7:6  Y le dijo Dios así: Que su descendencia sería extranjera en tierra ajena, y que los reducirían a servidumbre y los maltratarían, por cuatrocientos años.
Hch 7:7  Mas yo juzgaré, dijo Dios, a la nación de la cual serán siervos; y después de esto saldrán y me servirán en este lugar.(E)
Hch 7:8  Y le dio el pacto de la circuncisión;(F) y así Abraham engendró a Isaac,(G) y le circuncidó al octavo día; e Isaac a Jacob,(H) y Jacob a los doce patriarcas.(I)
Hch 7:9  Los patriarcas, movidos por envidia,(J) vendieron a José para Egipto;(K) pero Dios estaba con él,(L)
Hch 7:10  y le libró de todas sus tribulaciones, y le dio gracia y sabiduría delante de Faraón rey de Egipto, el cual lo puso por gobernador sobre Egipto y sobre toda su casa.(M)
Hch 7:11  Vino entonces hambre en toda la tierra de Egipto y de Canaán, y grande tribulación; y nuestros padres no hallaban alimentos.(N)
Hch 7:12  Cuando oyó Jacob que había trigo en Egipto, envió a nuestros padres la primera vez.(O)
Hch 7:13  Y en la segunda, José se dio a conocer a sus hermanos,(P) y fue manifestado a Faraón el linaje de José.(Q)
Hch 7:14  Y enviando José, hizo venir a su padre Jacob,(R) y a toda su parentela, en número de setenta y cinco personas.(S)
Hch 7:15  Así descendió Jacob a Egipto,(T) donde murió él,(U) y también nuestros padres;
Hch 7:16  los cuales fueron trasladados a Siquem, y puestos en el sepulcro que a precio de dinero compró Abraham de los hijos de Hamor en Siquem.(V)
Hch 7:17  Pero cuando se acercaba el tiempo de la promesa, que Dios había jurado a Abraham, el pueblo creció y se multiplicó en Egipto,
Hch 7:18  hasta que se levantó en Egipto otro rey que no conocía a José.(W)
Hch 7:19  Este rey, usando de astucia con nuestro pueblo, maltrató a nuestros padres,(X) a fin de que expusiesen a la muerte a sus niños, para que no se propagasen.(Y)
Hch 7:20  En aquel mismo tiempo nació Moisés, y fue agradable a Dios; y fue criado tres meses en casa de su padre.(Z)
Hch 7:21  Pero siendo expuesto a la muerte, la hija de Faraón le recogió y le crió como a hijo suyo.(AA)
Hch 7:22  Y fue enseñado Moisés en toda la sabiduría de los egipcios; y era poderoso en sus palabras y obras.
Hch 7:23  Cuando hubo cumplido la edad de cuarenta años, le vino al corazón el visitar a sus hermanos, los hijos de Israel.
Hch 7:24  Y al ver a uno que era maltratado, lo defendió, e hiriendo al egipcio, vengó al oprimido.
Hch 7:25  Pero él pensaba que sus hermanos comprendían que Dios les daría libertad por mano suya; mas ellos no lo habían entendido así.
Hch 7:26  Y al día siguiente, se presentó a unos de ellos que reñían, y los ponía en paz, diciendo: Varones, hermanos sois, ¿por qué os maltratáis el uno al otro?
Hch 7:27  Entonces el que maltrataba a su prójimo le rechazó, diciendo: ¿Quién te ha puesto por gobernante y juez sobre nosotros?
Hch 7:28  ¿Quieres tú matarme, como mataste ayer al egipcio?
Hch 7:29  Al oír esta palabra, Moisés huyó, y vivió como extranjero en tierra de Madián,(AB) donde engendró dos hijos.(AC)
Hch 7:30  Pasados cuarenta años, un ángel se le apareció en el desierto del monte Sinaí, en la llama de fuego de una zarza.
Hch 7:31  Entonces Moisés, mirando, se maravilló de la visión; y acercándose para observar, vino a él la voz del Señor:
Hch 7:32  Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, y el Dios de Jacob. Y Moisés, temblando, no se atrevía a mirar.
Hch 7:33  Y le dijo el Señor: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar en que estás es tierra santa.
Hch 7:34  Ciertamente he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su gemido, y he descendido para librarlos. Ahora, pues, ven, te enviaré a Egipto.(AD)
Hch 7:35  A este Moisés, a quien habían rechazado, diciendo: ¿Quién te ha puesto por gobernante y juez?, a éste lo envió Dios como gobernante y libertador por mano del ángel que se le apareció en la zarza.
Hch 7:36  Este los sacó, habiendo hecho prodigios y señales en tierra de Egipto,(AE) y en el Mar Rojo,(AF) y en el desierto por cuarenta años.(AG)
Hch 7:37  Este Moisés es el que dijo a los hijos de Israel: Profeta os levantará el Señor vuestro Dios de entre vuestros hermanos, como a mí;(AH) a él oiréis.
Hch 7:38  Este es aquel Moisés que estuvo en la congregación en el desierto con el ángel que le hablaba en el monte Sinaí,(AI) y con nuestros padres, y que recibió palabras de vida que darnos;
Hch 7:39  al cual nuestros padres no quisieron obedecer, sino que le desecharon, y en sus corazones se volvieron a Egipto,
Hch 7:40  cuando dijeron a Aarón: Haznos dioses que vayan delante de nosotros; porque a este Moisés, que nos sacó de la tierra de Egipto, no sabemos qué le haya acontecido.(AJ)
Hch 7:41  Entonces hicieron un becerro, y ofrecieron sacrificio al ídolo, y en las obras de sus manos se regocijaron.(AK)
Hch 7:42  Y Dios se apartó, y los entregó a que rindiesen culto al ejército del cielo; como está escrito en el libro de los profetas:
 ¿Acaso me ofrecisteis víctimas y sacrificios
 En el desierto por cuarenta años, casa de Israel?
Hch 7:43  Antes bien llevasteis el tabernáculo de Moloc,
 Y la estrella de vuestro dios Renfán,
 Figuras que os hicisteis para adorarlas.
 Os transportaré, pues, más allá de Babilonia.(AL)
Hch 7:44  Tuvieron nuestros padres el tabernáculo del testimonio en el desierto, como había ordenado Dios cuando dijo a Moisés que lo hiciese conforme al modelo que había visto.(AM)
Hch 7:45  El cual, recibido a su vez por nuestros padres, lo introdujeron con Josué(AN) al tomar posesión de la tierra de los gentiles, a los cuales Dios arrojó de la presencia de nuestros padres, hasta los días de David.
Hch 7:46  Este halló gracia delante de Dios, y pidió proveer tabernáculo para el Dios de Jacob.(AO)
Hch 7:47  Mas Salomón le edificó casa;(AP)
Hch 7:48  si bien el Altísimo no habita en templos hechos de mano, como dice el profeta:
Hch 7:49  El cielo es mi trono,
 Y la tierra el estrado de mis pies.
 ¿Qué casa me edificaréis? dice el Señor;
 ¿O cuál es el lugar de mi reposo? 
Hch 7:50  ¿No hizo mi mano todas estas cosas?(AQ)
Hch 7:51  ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros.(AR)
Hch 7:52  ¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, de quien vosotros ahora habéis sido entregadores y matadores;
Hch 7:53  vosotros que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no la guardasteis.
Hch 7:54  Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él.
Hch 7:55  Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,
Hch 7:56  y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios.
Hch 7:57  Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él.
Hch 7:58  Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo.
Hch 7:59  Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu.
Hch 7:60  Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.

 


 

Hch 7:1  El príncipe de los sacerdotes dijo entonces: ¿Es esto así?
Hch 7:2  Y él dijo: Varones hermanos y padres, oíd: El Dios de la gloria apareció a nuestro padre Abraham, estando en Mesopotamia, antes que morase en Harán,
Hch 7:3  y le dijo: Sal de tu tierra y de tu parentela, y ven a la tierra que te mostraré.
Hch 7:4  Entonces salió de la tierra de los caldeos, y habitó en Harán; y de allí, muerto su padre, le traspasó a esta tierra, en la cual vosotros habitáis ahora;
Hch 7:5  y no le dio herencia en ella, ni aun para asentar un pie; mas le prometió que se la daría en posesión, y a su simiente después de él, no teniendo hijo.
Hch 7:6  Y le habló Dios así: Que su simiente sería extranjera en tierra ajena, y que los sujetarían a servidumbre y maltratarían, por cuatrocientos años.
Hch 7:7  Mas yo juzgaré, dijo Dios, los gentiles a los cuales serán siervos; y después de esto saldrán y me servirán en este lugar.
Hch 7:8  Y le dio el Pacto de la circuncisión; y así Abraham engendró a Isaac, y le circuncidó al octavo día; e Isaac a Jacob, y Jacob a los doce patriarcas.
Hch 7:9  Y los patriarcas, movidos de envidia, vendieron a José para Egipto; mas Dios era con él;
Hch 7:10  y le libró de todas sus tribulaciones, y le dio gracia y sabiduría en la presencia de Faraón, rey de Egipto, el cual le puso por gobernador sobre Egipto, y sobre toda su casa.
Hch 7:11  Vino entonces hambre en toda la tierra de Egipto y de Canaán, y grande tribulación; y nuestros padres no hallaban alimentos.
Hch 7:12  Y como oyese Jacob que había trigo en Egipto, envió a nuestros padres la primera vez.
Hch 7:13  Y en la segunda, José fue conocido de sus hermanos, y fue sabido de Faraón el linaje de José.
Hch 7:14  Y enviando José, hizo venir a su padre Jacob, y a toda su parentela, en número de setenta y cinco personas.
Hch 7:15  Así descendió Jacob a Egipto, donde murió él y nuestros padres;
Hch 7:16  los cuales fueron trasladados a Siquem, y puestos en el sepulcro que compró Abraham a precio de dinero de los hijos de Hamor de Siquem.
Hch 7:17  Pero cuando se acercaba el tiempo de la promesa, la cual Dios había jurado a Abraham, el pueblo creció y se multiplicó en Egipto,
Hch 7:18  hasta que se levantó otro rey que no conocía a José.
Hch 7:19  Este, usando de astucia con nuestro linaje, maltrató a nuestros padres, a fin de que pusiesen a peligro de muerte sus niños, para que cesase la generación.
Hch 7:20  En aquel mismo tiempo nació Moisés, y fue agradable a Dios; y fue criado tres meses en casa de su padre.
Hch 7:21  Mas siendo puesto al peligro, la hija de Faraón le tomó, y le crió por hijo.
Hch 7:22  Y fue enseñado Moisés en toda la sabiduría de los egipcios; y era poderoso en sus dichos y hechos.
Hch 7:23  Y como se le cumplió el tiempo de cuarenta años, subió en su corazón visitar a sus hermanos, los hijos de Israel.
Hch 7:24  Y como vio a uno que era injuriado, le defendió, e hiriendo al egipcio, vengó al injuriado.
Hch 7:25  Pero él pensaba que sus hermanos entendían que Dios les había de dar salud por su mano; mas ellos no lo habían entendido.
Hch 7:26  Y al día siguiente, riñendo ellos, se les mostró, y los ponía en paz, diciendo: Varones, hermanos sois, ¿por qué os injuriáis los unos a los otros?
Hch 7:27  Entonces el que injuriaba a su prójimo, le rechazó, diciendo: ¿Quién te ha puesto por príncipe y juez sobre nosotros?
Hch 7:28  ¿Quieres tú matarme, como mataste ayer al egipcio?
Hch 7:29  A esta palabra Moisés huyó, y se hizo extranjero en tierra de Madián, donde engendró dos hijos.
Hch 7:30  Y cumplidos cuarenta años, el ángel del Señor le apareció en el desierto del monte de Sinaí, en fuego de llama de una zarza.
Hch 7:31  Entonces Moisés mirando, se maravilló de la visión; y llegándose para considerar, fue hecha a él voz del Señor:
Hch 7:32  Yo Soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, y Dios de Isaac, y Dios de Jacob. Mas Moisés, temeroso, no osaba mirar.
Hch 7:33  Y le dijo el Señor: Quita los zapatos de tus pies, porque el lugar en que estás es tierra santa.
Hch 7:34  He visto, he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído el gemido de ellos, y he descendido para librarlos. Ahora pues, ven, te enviaré a Egipto.
Hch 7:35  A este Moisés, al cual habían rehusado, diciendo: ¿Quién te ha puesto por príncipe y juez? A éste envió Dios por príncipe y redentor con la mano del ángel que le apareció en la zarza.
Hch 7:36  Este los sacó, haciendo prodigios y milagros en la tierra de Egipto, y en el mar Bermejo, y en el desierto por cuarenta años.
Hch 7:37  Este es el Moisés, el cual dijo a los hijos de Israel: Un profeta os levantará el Señor Dios vuestro de vuestros hermanos, como yo; a él oiréis.
Hch 7:38  Este es aquel que estuvo en la iglesia en el desierto con el ángel que le hablaba en el monte de Sinaí, y con nuestros padres; y recibió las palabras de vida para darnos;
Hch 7:39  al cual nuestros padres no quisieron obedecer; antes le desecharon, y se apartaron de corazón a Egipto,
Hch 7:40  diciendo a Aarón: Haznos dioses que vayan delante de nosotros; porque a este Moisés, que nos sacó de tierra de Egipto, no sabemos qué le ha acontecido.
Hch 7:41  Y entonces hicieron el becerro, y ofrecieron sacrificio al ídolo, y en las obras de sus manos se regocijaron.
Hch 7:42  Y Dios se apartó, y los entregó que sirviesen al ejército del cielo; como está escrito en el libro de los profetas: ¿Me ofrecisteis víctimas y sacrificios en el desierto por cuarenta años, Casa de Israel?
Hch 7:43  Antes, trajisteis el tabernáculo de Moloc, y la estrella de vuestro dios Renfán; figuras que os hicisteis para adorarlas. Os transportaré pues, más allá de Babilonia.
Hch 7:44  Tuvieron nuestros padres el tabernáculo del testimonio en el desierto, como les ordenó Dios, hablando a Moisés que lo hiciese según la forma que había visto.
Hch 7:45  El cual recibido, metieron también nuestros padres con Jesús en la posesión de los gentiles, que Dios echó de la presencia de nuestros padres, hasta los días de David;
Hch 7:46  el cual halló gracia delante de Dios, y pidió de hallar tabernáculo para el Dios de Jacob.
Hch 7:47  Mas Salomón le edificó casa.
Hch 7:48  Si bien el Altísimo no habita en templos hechos de mano, como el profeta dice:
Hch 7:49  El cielo es mi trono, y la tierra es el estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis?, Dice el Señor; ¿o cuál es el lugar de mi reposo?
Hch 7:50  ¿No hizo mi mano todas estas cosas?
Hch 7:51  Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos, vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros.
Hch 7:52  ¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que antes anunciaron la venida del Justo, del cual vosotros ahora habéis sido entregadores y matadores;
Hch 7:53  que recibisteis la ley por disposición de ángeles, y no la guardasteis.
Hch 7:54  Y oyendo estas cosas, regañaban de sus corazones, y crujían los dientes contra él.
Hch 7:55  Más él, estando lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesus que estaba a la diestra de Dios,
Hch 7:56  y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios.
Hch 7:57  Entonces ellos dando grandes voces, se taparon sus oídos, y arremetieron unánimes contra él;
Hch 7:58  y echándolo fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus vestidos a los pies de un joven que se llamaba Saulo.
Hch 7:59  Y apedrearon a Esteban, invocando él y diciendo: Señor Jesus, recibe mi espíritu.
Hch 7:60  Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les imputes este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió en el Señor.

 


 

Hch 7:1  Then said the high priest, Are these things so?
Hch 7:2  And he said, Men, brethren, and fathers, hearken; The God of glory appeared unto our father Abraham, when he was in Mesopotamia, before he dwelt in Charran,
Hch 7:3  And said unto him, Get thee out of thy country, and from thy kindred, and come into the land which I shall shew thee.
Hch 7:4  Then came he out of the land of the Chaldaeans, and dwelt in Charran: and from thence, when his father was dead, he removed him into this land, wherein ye now dwell.
Hch 7:5  And he gave him none inheritance in it, no, not so much as to set his foot on: yet he promised that he would give it to him for a possession, and to his seed after him, when as yet he had no child.
Hch 7:6  And God spake on this wise, That his seed should sojourn in a strange land; and that they should bring them into bondage, and entreat them evil four hundred years.
Hch 7:7  And the nation to whom they shall be in bondage will I judge, said God: and after that shall they come forth, and serve me in this place.
Hch 7:8  And he gave him the covenant of circumcision: and so Abraham begat Isaac, and circumcised him the eighth day; and Isaac begat Jacob; and Jacob begat the twelve patriarchs.
Hch 7:9  And the patriarchs, moved with envy, sold Joseph into Egypt: but God was with him,
Hch 7:10  And delivered him out of all his afflictions, and gave him favour and wisdom in the sight of Pharaoh king of Egypt; and he made him governor over Egypt and all his house.
Hch 7:11  Now there came a dearth over all the land of Egypt and Chanaan, and great affliction: and our fathers found no sustenance.
Hch 7:12  But when Jacob heard that there was corn in Egypt, he sent out our fathers first.
Hch 7:13  And at the second time Joseph was made known to his brethren; and Joseph's kindred was made known unto Pharaoh.
Hch 7:14  Then sent Joseph, and called his father Jacob to him, and all his kindred, threescore and fifteen souls.
Hch 7:15  So Jacob went down into Egypt, and died, he, and our fathers,
Hch 7:16  And were carried over into Sychem, and laid in the sepulchre that Abraham bought for a sum of money of the sons of Emmor the father of Sychem.
Hch 7:17  But when the time of the promise drew nigh, which God had sworn to Abraham, the people grew and multiplied in Egypt,
Hch 7:18  Till another king arose, which knew not Joseph.
Hch 7:19  The same dealt subtilly with our kindred, and evil entreated our fathers, so that they cast out their young children, to the end they might not live.
Hch 7:20  In which time Moses was born, and was exceeding fair, and nourished up in his father's house three months:
Hch 7:21  And when he was cast out, Pharaoh's daughter took him up, and nourished him for her own son.
Hch 7:22  And Moses was learned in all the wisdom of the Egyptians, and was mighty in words and in deeds.
Hch 7:23  And when he was full forty years old, it came into his heart to visit his brethren the children of Israel.
Hch 7:24  And seeing one of them suffer wrong, he defended him, and avenged him that was oppressed, and smote the Egyptian:
Hch 7:25  For he supposed his brethren would have understood how that God by his hand would deliver them: but they understood not.
Hch 7:26  And the next day he shewed himself unto them as they strove, and would have set them at one again, saying, Sirs, ye are brethren; why do ye wrong one to another?
Hch 7:27  But he that did his neighbour wrong thrust him away, saying, Who made thee a ruler and a judge over us?
Hch 7:28  Wilt thou kill me, as thou diddest the Egyptian yesterday?
Hch 7:29  Then fled Moses at this saying, and was a stranger in the land of Madian, where he begat two sons.
Hch 7:30  And when forty years were expired, there appeared to him in the wilderness of mount Sina an angel of the Lord in a flame of fire in a bush.
Hch 7:31  When Moses saw it, he wondered at the sight: and as he drew near to behold it, the voice of the Lord came unto him,
Hch 7:32  Saying, I am the God of thy fathers, the God of Abraham, and the God of Isaac, and the God of Jacob. Then Moses trembled, and durst not behold.
Hch 7:33  Then said the Lord to him, Put off thy shoes from thy feet: for the place where thou standest is holy ground.
Hch 7:34  I have seen, I have seen the affliction of my people which is in Egypt, and I have heard their groaning, and am come down to deliver them. And now come, I will send thee into Egypt.
Hch 7:35  This Moses whom they refused, saying, Who made thee a ruler and a judge? the same did God send to be a ruler and a deliverer by the hand of the angel which appeared to him in the bush.
Hch 7:36  He brought them out, after that he had shewed wonders and signs in the land of Egypt, and in the Red sea, and in the wilderness forty years.
Hch 7:37  This is that Moses, which said unto the children of Israel, A prophet shall the Lord your God raise up unto you of your brethren, like unto me; him shall ye hear.
Hch 7:38  This is he, that was in the church in the wilderness with the angel which spake to him in the mount Sina, and with our fathers: who received the lively oracles to give unto us:
Hch 7:39  To whom our fathers would not obey, but thrust him from them, and in their hearts turned back again into Egypt,
Hch 7:40  Saying unto Aaron, Make us gods to go before us: for as for this Moses, which brought us out of the land of Egypt, we wot not what is become of him.
Hch 7:41  And they made a calf in those days, and offered sacrifice unto the idol, and rejoiced in the works of their own hands.
Hch 7:42  Then God turned, and gave them up to worship the host of heaven; as it is written in the book of the prophets, O ye house of Israel, have ye offered to me slain beasts and sacrifices by the space of forty years in the wilderness?
Hch 7:43  Yea, ye took up the tabernacle of Moloch, and the star of your god Remphan, figures which ye made to worship them: and I will carry you away beyond Babylon.
Hch 7:44  Our fathers had the tabernacle of witness in the wilderness, as he had appointed, speaking unto Moses, that he should make it according to the fashion that he had seen.
Hch 7:45  Which also our fathers that came after brought in with Jesus into the possession of the Gentiles, whom God drave out before the face of our fathers, unto the days of David;
Hch 7:46  Who found favour before God, and desired to find a tabernacle for the God of Jacob.
Hch 7:47  But Solomon built him an house.
Hch 7:48  Howbeit the most High dwelleth not in temples made with hands; as saith the prophet,
Hch 7:49  Heaven is my throne, and earth is my footstool: what house will ye build me? saith the Lord: or what is the place of my rest?
Hch 7:50  Hath not my hand made all these things?
Hch 7:51  Ye stiffnecked and uncircumcised in heart and ears, ye do always resist the Holy Ghost: as your fathers did, so do ye.
Hch 7:52  Which of the prophets have not your fathers persecuted? and they have slain them which shewed before of the coming of the Just One; of whom ye have been now the betrayers and murderers:
Hch 7:53  Who have received the law by the disposition of angels, and have not kept it.
Hch 7:54  When they heard these things, they were cut to the heart, and they gnashed on him with their teeth.
Hch 7:55  But he, being full of the Holy Ghost, looked up stedfastly into heaven, and saw the glory of God, and Jesus standing on the right hand of God,
Hch 7:56  And said, Behold, I see the heavens opened, and the Son of man standing on the right hand of God.
Hch 7:57  Then they cried out with a loud voice, and stopped their ears, and ran upon him with one accord,
Hch 7:58  And cast him out of the city, and stoned him: and the witnesses laid down their clothes at a young man's feet, whose name was Saul.
Hch 7:59  And they stoned Stephen, calling upon God, and saying, Lord Jesus, receive my spirit.
Hch 7:60  And he kneeled down, and cried with a loud voice, Lord, lay not this sin to their charge. And when he had said this, he fell asleep.

 


 

Hch 7:1  El Sumo Sacerdote preguntó: «¿Es así?»
Hch 7:2  El respondió: «Hermanos y padres, escuchad. El Dios de la gloria se apareció a nuestro padre Abraham cuando estaba en Mesopotamia, antes de que se estableciese en Jarán
Hch 7:3  = y le dijo: Sal de tu tierra y de tu parentela y vete a la tierra que yo te muestre. =
Hch 7:4  Entonces salió de la tierra de los caldeos y se estableció en Jarán. Y después de morir su padre, Dios le hizo emigrar de allí a esta tierra que vosotros habitáis ahora.
Hch 7:5  Y no le dio en ella en heredad ni la medida de la planta del pie; sino que prometió = dársela en posesión a él y a su descendencia después de él, = aunque no tenía = ningún hijo. =
Hch 7:6  Dios habló así: = Tus descendientes residirán como forasteros en tierra extraña y les esclavizarán y les maltratarán durante cuatrocientos años. =
Hch 7:7  = Pero yo juzgaré = - dijo Dios - = a la nación a la que sirvan como esclavos, y después saldrán y me darán culto en este mismo = lugar.
Hch 7:8  Le dio, además, = la alianza de la circuncisión; = y así, al engendrar a Isaac, = Abraham le circuncidó el octavo día, = y lo mismo Isaac a Jacob, y Jacob a los doce patriarcas.
Hch 7:9  «Los patriarcas, = envidiosos de José, le vendieron con destino a Egipto. = Pero = Dios estaba con él =
Hch 7:10  y le libró de todas sus tribulaciones = y le dio gracia y = sabiduría ante Faraón, rey de Egipto, = quien le nombró gobernador de Egipto y de toda su casa. =
Hch 7:11  = Sobrevino entonces en todo Egipto y Canaán hambre y = gran tribulación; nuestros padres no encontraban víveres.
Hch 7:12  = Pero al oír Jacob que había trigo en Egipto, = envió a nuestros padres una primera vez;
Hch 7:13  la segunda vez = José se dio a conocer a sus hermanos = y conoció Faraón el linaje de José.
Hch 7:14  José envió a buscar a su padre Jacob y a toda su parentela que se componía de = 75 personas. =
Hch 7:15  Jacob bajó a Egipto donde murió él y también nuestros padres;
Hch 7:16  y fueron trasladados a Siquem y depositados en el sepulcro que había comprado Abraham a precio de plata a los hijos de Jamor, padre de Siquem.
Hch 7:17  «Conforme se iba acercando el tiempo de la promesa que Dios había hecho a Abraham, = creció = el pueblo = y se multiplicó = en Egipto,
Hch 7:18  hasta que = se alzó un nuevo rey en Egipto que no = se acordó = de José. =
Hch 7:19  = Obrando astutamente = contra nuestro linaje, este rey = maltrató = a nuestros padres hasta obligarles a exponer sus niños, = para que no vivieran. =
Hch 7:20  En esta coyuntura nació Moisés, = que era hermoso = a los ojos de Dios. Durante = tres meses = fue criado en la casa de su padre;
Hch 7:21  después fue expuesto y = le recogió la hija de Faraón, = quien le crió = como hijo suyo. =
Hch 7:22  Moisés fue educado en toda la sabiduría de los egipcios y fue poderoso en sus palabras y en sus obras.
Hch 7:23  «Cuando cumplió la edad de cuarenta años, se le ocurrió la idea de visitar = a sus hermanos, los hijos de Israel. =
Hch 7:24  Y al ver que uno de ellos era maltratado, tomó su defensa y vengó al oprimido = matando al egipcio. =
Hch 7:25  Pensaba él que sus hermanos comprenderían que Dios les daría la salvación por su mano; pero ellos no lo comprendieron.
Hch 7:26  Al día siguiente se les presentó mientras estaban peleándose y trataba de ponerles en paz diciendo: “Amigos, que sois hermanos, ¿por qué os maltratáis uno a otro?”
Hch 7:27  Pero = el que maltrataba a su compañero = le rechazó diciendo: “= ¿Quién te ha nombrado jefe y juez sobre nosotros? =
Hch 7:28  = ¿Es que quieres matarme a mí como mataste ayer al egipcio? =”
Hch 7:29  Al oír esto Moisés huyó y = vivió como forastero en la tierra de Madián, = donde tuvo dos hijos.
Hch 7:30  «Al cabo de cuarenta años = se le apareció un ángel en el desierto del monte = Sinaí, = sobre la llama de una zarza = ardiendo.
Hch 7:31  Moisés se maravilló al ver la visión, = y al acercarse a mirarla, se dejó oír la voz del Señor: =
Hch 7:32  “= Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. =” Moisés temblaba y = no se atrevía a mirar. =
Hch 7:33  El Señor le dijo: = “Quítate las sandalias de los pies, pues el lugar donde estás es tierra santa. =
Hch 7:34  = Bien vista tengo la opresión de mi pueblo que está en Egipto y he oído sus gemidos y he bajado a librarles. Y ahora ven, que te enviaré a Egipto.” =
Hch 7:35  «A este Moisés, de quien renegaron diciéndole: = ¿quién te ha nombrado jefe y juez? =, a éste envió Dios como jefe y redentor por mano del ángel que se le apareció en la zarza.
Hch 7:36  Este les sacó, realizando = prodigios y señales en la tierra de Egipto, = en el mar Rojo y = en el desierto durante cuarenta años. =
Hch 7:37  Este es el Moisés que dijo a los israelitas: = Dios os suscitará un profeta como yo de entre vuestros hermanos. =
Hch 7:38  Este es el que, en = la asamblea = del desierto, estuvo con el ángel que le hablaba en el monte Sinaí, y con nuestros padres; el que recibió palabras de vida para comunicárnoslas;
Hch 7:39  este es aquel a quien no quisieron obedecer nuestros padres, sino que le rechazaron = para volver = su corazón = hacia Egipto, =
Hch 7:40  = y dijeron a Aarón: “Haznos dioses que vayan delante de nosotros; porque este Moisés que nos sacó de la tierra de Egipto no sabemos qué ha sido de él.” =
Hch 7:41  = E hicieron = aquellos días = un becerro y ofrecieron un sacrificio = al ídolo e hicieron una fiesta a las obras de sus manos.
Hch 7:42  Entonces Dios se apartó de ellos y los entregó al culto del ejército del cielo, como está escrito en el libro de los Profetas: = ¿Es que me ofrecisteis víctimas y sacrificios durante cuarenta años en el desierto, casa de Israel? =
Hch 7:43  = Os llevasteis la tienda de Moloc y la estrella del dios Refán, las imágenes que hicisteis = para adorarlas; = pues yo os llevaré más allá de = Babilonia.
Hch 7:44  «Nuestros padres tenían en el desierto la Tienda del Testimonio, como mandó el que dijo a Moisés que = la hiciera según el modelo = que había visto.
Hch 7:45  Nuestros padres que les sucedieron la recibieron y la introdujeron bajo el mando de Josué en el país ocupado por los gentiles, a los que Dios expulsó delante de nuestros padres, hasta los días de David,
Hch 7:46  que halló gracia ante Dios y pidió = encontrar una Morada para = la casa = de Jacob. =
Hch 7:47  Pero fue = Salomón = el que = le edificó Casa, =
Hch 7:48  aunque el Altísimo no habita en casas hechas por mano de hombre como dice el profeta:
Hch 7:49  = El cielo es mi trono y la tierra el escabel de mis pies. Dice el Señor: ¿Qué Casa me edificaréis? O ¿cuál será el lugar de mi descanso?
Hch 7:50  ¿Es que no ha hecho mi mano todas estas cosas? =
Hch 7:51  «¡Duros de cerviz, incircuncisos de corazón y de oídos! ¡Vosotros siempre resistís al Espíritu Santo! ¡Como vuestros padres, así vosotros!
Hch 7:52  ¿A qué profeta no persiguieron vuestros padres? Ellos mataron a los que anunciaban de antemano la venida del Justo, de aquel a quien vosotros ahora habéis traicionado y asesinado;
Hch 7:53  vosotros que recibisteis la Ley por mediación de ángeles y no la habéis guardado.»
Hch 7:54  Al oír esto, sus corazones se consumían de rabia y rechinaban sus dientes contra él.
Hch 7:55  Pero él, lleno del Espíritu Santo, miró fijamente al cielo y vio la gloria de Dios y a Jesús que estaba en pie a la diestra de Dios;
Hch 7:56  y dijo: «Estoy viendo los cielos abiertos y al Hijo del hombre que está en pie a la diestra de Dios.»
Hch 7:57  Entonces, gritando fuertemente, se taparon sus oídos y se precipitaron todos a una sobre él;
Hch 7:58  le echaron fuera de la ciudad y empezaron a apedrearle. Los testigos pusieron sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo.
Hch 7:59  Mientras le apedreaban, Esteban hacía esta invocación: «Señor Jesús, recibe mi espíritu.»
Hch 7:60  Después dobló las rodillas y dijo con fuerte voz: «Señor, no les tengas en cuenta este pecado.» Y diciendo esto, se durmió.

 


 

Hch 7:1  El sumo sacerdote le preguntó a Esteban si lo que decían de él era cierto,
Hch 7:2  y él contestó: "Hermanos y padres, escúchenme: Nuestro glorioso Dios se mostró a nuestro antepasado Abraham cuando estaba en Mesopotamia, antes que se fuera a vivir a Harán,
Hch 7:3  y le dijo: 'Deja tu tierra y a tus parientes, y vete a la tierra que yo te mostraré. '
Hch 7:4  Entonces Abraham salió de Caldea y se fue a vivir a Harán. Después murió su padre, y Dios trajo a Abraham a esta tierra, donde ustedes viven ahora. [1]
Hch 7:5  Pero no le dio ninguna herencia en ella; ni siquiera un lugar donde poner el pie. Pero sí le prometió que se la daría, para que después de su muerte fuera de sus descendientes[2] (aunque en aquel tiempo Abraham todavía no tenía hijos).
Hch 7:6  Además, Dios le dijo que sus descendientes vivirían como extranjeros en una tierra extraña, y que serían esclavos, y que los maltratarían durante cuatrocientos años. [3]
Hch 7:7  Pero también le dijo Dios: 'Yo castigaré a la nación que los haga esclavos, y después ellos saldrán de allí[4] y me servirán en este lugar. '
Hch 7:8  En su alianza, Dios ordenó a Abraham la práctica de la circuncisión. [5] Por eso, a los ocho días de haber nacido su hijo Isaac, Abraham lo circuncidó. [6] Lo mismo hizo Isaac con su hijo Jacob, y este hizo lo mismo con sus hijos, que fueron los padres de las doce tribus de Israel.
Hch 7:9  "Estos hijos de Jacob, que fueron nuestros antepasados, tuvieron envidia de su hermano José, y lo vendieron para que se lo llevaran a Egipto. [7] Pero Dios, que estaba con José, [8]
Hch 7:10  lo libró de todas sus aflicciones. Le dio sabiduría y lo hizo ganarse el favor del faraón, rey de Egipto, el cual nombró a José gobernador de Egipto y del palacio real. [9]
Hch 7:11  "Hubo entonces hambre y mucha aflicción en todo Egipto y en Canaán, y nuestros antepasados no tenían qué comer. [10]
Hch 7:12  Pero cuando Jacob supo que en Egipto había de comer, mandó allá a sus hijos, es decir, a nuestros antepasados. Este fue el primer viaje que hicieron. [11]
Hch 7:13  Cuando fueron por segunda vez, José se dio a conocer a sus hermanos, [12] y así el faraón supo de qué raza era José.
Hch 7:14  Más tarde, José ordenó que su padre Jacob y toda su familia, que eran setenta y cinco[13] personas, fueran llevados a Egipto. [14]
Hch 7:15  De ese modo Jacob se fue a vivir a Egipto; y allí murió, [15] y allí murieron también nuestros antepasados.
Hch 7:16  Los restos de Jacob fueron llevados a Siquem, y fueron enterrados en el sepulcro que Abraham había comprado por cierta cantidad de dinero a los hijos de Hamor, en Siquem. [16]
Hch 7:17  "Cuando y a se acercaba el tiempo en que había de cumplirse la promesa hecha por Dios a Abraham, el pueblo de Israel había crecido en Egipto y se había hecho numeroso;
Hch 7:18  y por entonces comenzó a gobernar en Egipto un rey que no había conocido a José. [17]
Hch 7:19  Este rey engañó a nuestro pueblo y maltrató a nuestros antepasados; los obligó a abandonar y dejar morir a sus hijos recién nacidos. [18]
Hch 7:20  En aquel tiempo nació Moisés. Fue un niño extraordinariamente hermoso, y sus padres lo criaron en su casa durante tres meses.
Hch 7:21  Cuando tuvieron que abandonarlo, la hija del faraón lo recogió y lo crió como si fuera su propio hijo. [19]
Hch 7:22  De esa manera Moisés fue instruido en la sabiduría de los egipcios, y fue un hombre poderoso en palabras y en hechos.
Hch 7:23  "A la edad de cuarenta años, Moisés decidió visitar a los israelitas, que eran su propio pueblo.
Hch 7:24  Pero al ver que un egipcio maltrataba a uno de ellos, Moisés salió en su defensa, y lo vengó matando al egipcio.
Hch 7:25  y es que Moisés pensaba que sus hermanos los israelitas sedarían cuenta de que por medio de él Dios iba a libertarlos; pero ellos no se dieron cuenta.
Hch 7:26  Al día siguiente, Moisés encontró a dos israelitas que se estaban peleando y , queriendo ponerlos en paz, les dijo: 'Ustedes son hermanos; ¿por qué se maltratan el uno al otro?'
Hch 7:27  Entonces el que maltrataba a su compañero empujó a Moisés, y le dijo: '¿Quién te ha puesto a ti como jefe y juez entre nosotros?
Hch 7:28  ¿Acaso quieres matarme, como mataste ayer al egipcio?'
Hch 7:29  Al oír esto, Moisés huyó y se fue a la tierra de Madián. Allí vivió como extranjero, y tuvo dos hijos. [20]
Hch 7:30  "Cuarenta años después, en el desierto, cerca del monte Sinaí, un ángel se le apareció en el fuego de una zarza que estaba ardiendo.
Hch 7:31  Moisés se asombró de aquella visión, y cuando se acercó para ver mejor, oyó la voz del Señor, que decía:
Hch 7:32  'Yo soy el Dios de tus antepasados. Soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. ' Moisés comenzó a temblar de miedo, y no se atrevía a mirar.
Hch 7:33  Entonces el Señor le dijo: 'Descálzate, porque el lugar donde estás es sagrado.
Hch 7:34  Claramente he visto cómo sufre mi pueblo, que está en Egipto. Los he oído quejarse y he bajado para librarlos. Por lo tanto, ven, que te voy a enviar a Egipto. '[21]
Hch 7:35  "Aunque ellos habían rechazado a Moisés y le habían dicho: '¿Quién te nombró jefe y juez?', Dios lo envió como jefe y libertador, por medio del ángel que se le apareció en la zarza.
Hch 7:36  y fue Moisés quien sacó de Egipto a nuestros antepasados, después de hacer milagros en aquella tierra, [22] en el Mar Rojo, [23] y en el desierto durante cuarenta años. [24]
Hch 7:37  Este mismo Moisés fue quien dijo a los israelitas: 'Dios hará que salga de entre ustedes un profeta como y o. '
Hch 7:38  y cuando Israel estaba reunido en el desierto, fue también Moisés quien sirvió de intermediario entre el ángel que le hablaba en el monte Sinaí[25] y nuestros antepasados; él fue quien recibió palabras de vida para pasárnoslas a nosotros.
Hch 7:39  "Pero nuestros antepasados no quisieron obedecerlo, sino que lo rechazaron y quisieron volverse a Egipto. [26]
Hch 7:40  Le dijeron a Aarón: 'Haznos dioses que nos guíen, porque no sabemos qué le ha pasado a este Moisés que nos sacó de Egipto. '
Hch 7:41  Entonces hicieron un ídolo que tenía forma de becerro, mataron animales para ofrecérselos y celebraron una fiesta en honor del ídolo que ellos mismos habían hecho. [27]
Hch 7:42  Por esto, Dios se apartó de ellos y los dejó adorar a las estrellas del cielo. [28] Pues así está escrito en el libro de los profetas: [29]
'Israelitas,
¿acaso en los cuarenta años del desierto
me ofrecieron ustedes sacrificios
y ofrendas?
 
Hch 7:43  Por el contrario,
cargaron con el santuario del dios Moloc[30]
y con la estrella del dios Refán, [31]
imágenes de dioses que ustedes mismos
se hicieron para adorarlas.
Por eso los lanzaré a ustedes al destierro
más allá de Babilonia. '
Hch 7:44  "Nuestros antepasados tenían en el desierto la tienda de la alianza, [32] que fue hecha tal como Dios se lo ordenó a Moisés cuando le dijo que la hiciera según el modelo que había visto.
Hch 7:45  Nuestros antepasados recibieron esta tienda en herencia, y los que vinieron con Josué la trajeron consigo cuando conquistaron la tierra de los otros pueblos, a los que Dios arrojó de delante de ellos. Allí estuvo hasta los días de David. [33]
Hch 7:46  Él encontró favor delante de Dios, y le pidió un lugar donde viviera la descendencia de Jacob;[34]
Hch 7:47  pero fue Salomón quien construyó el templo de Dios. [35]
Hch 7:48  Aunque el Dios altísimo no vive en templos hechos por la mano de los hombres. Como dijo el profeta:
 
Hch 7:49  'El cielo es mi trono,
y la tierra es el estrado de mis pies.
¿Qué clase de casa me construirán?,
dice el Señor;
¿cuál será mi lugar de descanso,
 
Hch 7:50  si yo mismo hice todas estas cosas?'[36]
Hch 7:51  "Pero ustedes –siguió diciendo Esteban– siempre han sido tercos, y tienen oídos y corazón paganos. Siempre están en contra del Espíritu Santo. Son iguales que sus antepasados.
Hch 7:52  ¿A cuál de los profetas no maltrataron los antepasados de ustedes? Ellos mataron a quienes habían hablado de la venida de aquel que es justo, y ahora que este justo y a ha venido, ustedes lo traicionaron y lo mataron.
Hch 7:53  Ustedes, que recibieron la ley por medio de ángeles, [37]
 no la obedecen."
Hch 7:54  Cuando oyeron estas cosas, se enfurecieron y rechinaron los dientes contra Esteban.
Hch 7:55  Pero él, lleno del Espíritu Santo, [38] miró al cielo y vio la gloria de Dios, y a Jesús de pie a la derecha de Dios.
Hch 7:56  Entonces dijo:
 –¡Miren! Veo los cielos abiertos, y al Hijo del hombre a la derecha de Dios.
Hch 7:57  Pero ellos se taparon los oídos, y dando fuertes gritos se lanzaron todos contra él.
Hch 7:58  Lo sacaron de la ciudad y lo apedrearon; los que hacían de testigos contra él dejaron sus ropas al cuidado de un joven llamado Saulo. [39]
Hch 7:59  Mientras lo apedreaban, Esteban oró, diciendo: "Señor Jesús, recibe mi espíritu."
Hch 7:60  Luego se puso de rodillas y gritó con voz fuerte: "¡Señor, no les tomes en cuenta este pecado!" Habiendo dicho esto, murió. [40]

 


 

Hch 7:1  Pero el sumo sacerdote dijo: “¿Son así estas cosas?”.
Hch 7:2  Él dijo: “Varones, hermanos y padres, oigan. El Dios de la gloria se apareció a nuestro antepasado Abrahán, cuando él estaba en Mesopotamia, antes que se domiciliara en Harán,
Hch 7:3  y le dijo: ‘Sal de tu tierra y de tus parientes y ve a la tierra que yo te mostraré’.
Hch 7:4  Entonces él salió de la tierra de los caldeos y se domicilió en Harán. Y de allí, después que hubo muerto su padre, [Dios] hizo que mudara su domicilio a esta tierra donde ustedes ahora moran.
Hch 7:5  Y, sin embargo, no le dio ninguna posesión heredable en ella, no, ni lo ancho de un pie; pero prometió dársela como posesión, y después de él a su descendencia, cuando todavía no tenía hijo.
Hch 7:6  Además, Dios habló de esta manera: que su descendencia sería residente forastera en una tierra extranjera, y la esclavizarían y afligirían por cuatrocientos años.
Hch 7:7  ‘Y a esa nación a la cual servirán como esclavos la juzgaré yo —dijo Dios—, y después de estas cosas ellos saldrán y me rendirán servicio sagrado en este lugar.’
Hch 7:8  ”También le dio un pacto de circuncisión; y así él llegó a ser el padre de Isaac y lo circuncidó el día octavo; e Isaac, de Jacob; y Jacob, de los doce cabezas de familia.
Hch 7:9  Y los cabezas de familia se pusieron celosos de José y lo vendieron en [manos de] Egipto. Pero Dios estaba con él,
Hch 7:10  y lo libró de todas sus tribulaciones y le dio gracia y sabiduría a vista de Faraón rey de Egipto. Y él lo nombró para que gobernara a Egipto y a toda su casa.
Hch 7:11  Pero vino hambre sobre todo Egipto y Canaán, sí, gran tribulación; y nuestros antepasados no hallaban provisiones.
Hch 7:12  Pero Jacob oyó que había comestibles en Egipto, y envió a nuestros antepasados por primera vez.
Hch 7:13  Y durante la segunda vez José fue dado a conocer a sus hermanos; y la estirpe de José vino a serle manifiesta a Faraón.
Hch 7:14  De modo que José envió y mandó llamar a Jacob su padre y a todos sus parientes de aquel lugar, en número de setenta y cinco almas.
Hch 7:15  Jacob bajó a Egipto. Y falleció; e igualmente nuestros antepasados,
Hch 7:16  y fueron transferidos a Siquem y fueron puestos en la tumba que con dinero de plata Abrahán había comprado a precio a los hijos de Hamor en Siquem.
Hch 7:17  ”Justamente cuando se iba acercando el tiempo para [el cumplimiento de] la promesa que Dios había declarado abiertamente a Abrahán, el pueblo creció y se multiplicó en Egipto,
Hch 7:18  hasta que se levantó sobre Egipto un rey diferente, que no sabía acerca de José.
Hch 7:19  Este empleó astucia estatal en contra de nuestra raza, e injustamente obligó a los padres a exponer a sus criaturas, para que no fueran conservadas con vida.
Hch 7:20  En aquel mismo tiempo nació Moisés, y era divinamente hermoso. Y por tres meses fue criado en casa de [su] padre.
Hch 7:21  Mas cuando fue expuesto, lo recogió la hija de Faraón y lo crió como hijo suyo.
Hch 7:22  Por consiguiente, Moisés fue instruido en toda la sabiduría de los egipcios. De hecho, era poderoso en sus palabras y hechos.
Hch 7:23  ”Ahora bien, cuando estaba cumpliéndose el tiempo de su año cuadragésimo, le vino al corazón el inspeccionar a sus hermanos, los hijos de Israel.
Hch 7:24  Y cuando alcanzó a ver a alguien a quien se trataba injustamente, lo defendió, y ejecutó venganza a favor del maltratado, derribando al egipcio.
Hch 7:25  Suponía que sus hermanos comprenderían que por su mano Dios les daba salvación, pero ellos no [lo] comprendieron.
Hch 7:26  Y al día siguiente se presentó a ellos mientras estaban peleando, y trató de avenirlos en paz, diciendo: ‘Varones, ustedes son hermanos. ¿Por qué se tratan injustamente el uno al otro?’.
Hch 7:27  Pero el que estaba tratando injustamente a su prójimo lo echó de sí, diciendo: ‘¿Quién te nombró a ti gobernante y juez sobre nosotros?
Hch 7:28  No querrás eliminarme de la misma manera como eliminaste al egipcio ayer, ¿verdad?’.
Hch 7:29  Ante esta palabra, Moisés huyó, y se hizo residente forastero en la tierra de Madián, donde llegó a ser padre de dos hijos.
Hch 7:30  ”Y cuando se cumplieron cuarenta años, se le apareció un ángel en el desierto del monte Sinaí, en la llama de fuego de una zarza.
Hch 7:31  Pues bien, cuando Moisés vio aquello, se maravilló de la vista. Pero al acercarse para investigar, vino la voz de Jehová:
Hch 7:32  ‘Yo soy el Dios de tus antepasados, el Dios de Abrahán y de Isaac y de Jacob’. Sobrecogido de temblor, Moisés no se atrevía a seguir investigando.
Hch 7:33  Jehová le dijo: ‘Quítate las sandalias de los pies, porque el lugar donde estás de pie es suelo santo.
Hch 7:34  Ciertamente he visto el maltrato de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su gemido y he bajado para librarlos. Y ahora ven, te enviaré a Egipto’.
Hch 7:35  A este Moisés, a quien repudiaron, diciendo: ‘¿Quién te nombró a ti gobernante y juez?’, a este hombre Dios lo envió como gobernante y también como libertador por mano del ángel que se le apareció en la zarza.
Hch 7:36  Este hombre los sacó después de efectuar portentos presagiosos y señales en Egipto y en el mar Rojo y en el desierto por cuarenta años.
Hch 7:37  ”Este es el Moisés que dijo a los hijos de Israel: ‘Dios les levantará a ustedes de entre sus hermanos un profeta semejante a mí’.
Hch 7:38  Este es el que llegó a estar entre la congregación en el desierto, con el ángel que le habló en el monte Sinaí y con nuestros antepasados, y él recibió vivas y sagradas declaraciones formales para darlas a ustedes.
Hch 7:39  Nuestros antepasados rehusaron hacerse obedientes a él; antes bien, lo echaron a un lado, y en sus corazones se volvieron a Egipto,
Hch 7:40  diciendo a Aarón: ‘Haznos dioses que vayan delante de nosotros. Porque a este Moisés, que nos sacó de la tierra de Egipto, no sabemos qué le habrá pasado’.
Hch 7:41  Así que hicieron un becerro en aquellos días y le trajeron un sacrificio al ídolo y se pusieron a gozar en las obras de sus manos.
Hch 7:42  De modo que Dios se volvió y los entregó a que rindieran servicio sagrado al ejército del cielo, así como está escrito en el libro de los profetas: ‘No fue a mí a quien ustedes ofrecieron víctimas y sacrificios por cuarenta años en el desierto, ¿verdad, oh casa de Israel?
Hch 7:43  Antes bien, fue la tienda de Moloc y la estrella del dios Refán lo que ustedes tomaron, las figuras que ustedes hicieron para adorarlas. Por consiguiente, los deportaré más allá de Babilonia’.
Hch 7:44  ”Nuestros antepasados tenían en el desierto la tienda del testimonio, así como él dio órdenes, cuando habló con Moisés, de que él la hiciera conforme al modelo que había visto.
Hch 7:45  Y nuestros antepasados, que la recibieron en sucesión, también la introdujeron con Josué en la tierra poseída por las naciones, a quienes Dios echó fuera de delante de nuestros antepasados. Allí permaneció hasta los días de David.
Hch 7:46  Él halló favor a vista de Dios y pidió [el privilegio de] proveer habitación para el Dios de Jacob.
Hch 7:47  Sin embargo, Salomón le edificó casa.
Hch 7:48  No obstante, el Altísimo no mora en casas hechas de mano; así como dice el profeta:
Hch 7:49  ‘El cielo es mi trono, y la tierra es el escabel de mis pies. ¿Qué clase de casa edificarán para mí?, dice Jehová. ¿O cuál es el lugar de mi descanso?
Hch 7:50  Mi mano hizo todas estas cosas, ¿no es así?’.
Hch 7:51  ”Hombres obstinados e incircuncisos de corazón y de oídos, siempre están ustedes resistiendo el espíritu santo; como hicieron sus antepasados, así hacen ustedes.
Hch 7:52  ¿A cuál de los profetas no persiguieron sus antepasados? Sí, mataron a los que de antemano hicieron anuncio respecto a la venida del Justo, cuyos traidores y asesinos ustedes ahora han llegado a ser,
Hch 7:53  ustedes que recibieron la Ley según fue transmitida por ángeles, pero no la han guardado”.
Hch 7:54  Pues bien, al oír estas cosas se sintieron cortados hasta el corazón, y se pusieron a crujir los dientes contra él.
Hch 7:55  Mas él, estando lleno de espíritu santo, miró con fijeza al cielo y alcanzó a ver la gloria de Dios y a Jesús de pie a la diestra de Dios,
Hch 7:56  y dijo: “¡Miren! Contemplo los cielos abiertos, y al Hijo del hombre de pie a la diestra de Dios”.
Hch 7:57  Ante esto, ellos clamaron a voz en cuello y se pusieron las manos sobre los oídos y se precipitaron de común acuerdo sobre él.
Hch 7:58  Y después de echarlo fuera de la ciudad, se pusieron a arrojarle piedras. Y los testigos pusieron sus prendas de vestir exteriores a los pies de un joven llamado Saulo.
Hch 7:59  Y siguieron arrojándole piedras a Esteban mientras él hacía petición y decía: “Señor Jesús, recibe mi espíritu”.
Hch 7:60  Entonces, doblando las rodillas, clamó con fuerte voz: “Jehová, no les imputes este pecado”. Y después de decir esto, se durmió [en la muerte].

 


 

Hch 7:1  El jefe de los sacerdotes le preguntó a Esteban: —¿Es verdad todo eso que dicen de ti?
Hch 7:2  Y Esteban respondió: —Amigos israelitas y líderes del país: escúchenme. Nuestro poderoso Dios se le apareció a nuestro antepasado Abraham en Mesopotamia, antes de que fuera a vivir en el pueblo de Harán,
Hch 7:3  y le dijo: “Deja a tu pueblo y a tus familiares, y vete al lugar que te voy a mostrar.”
Hch 7:4  »Abraham salió del país de Caldea y se fue a vivir al pueblo de Harán. Tiempo después murió su padre, y Dios hizo que Abraham viniera a este lugar, donde ustedes viven ahora.
Hch 7:5  Aunque Abraham vivió aquí, Dios nunca le permitió ser dueño ni del pedazo de tierra que tenía bajo sus pies. Sin embargo, le prometió a Abraham que le daría este territorio a sus descendientes después de que él muriera. »Cuando Dios le hizo esa promesa, Abraham no tenía hijos.
Hch 7:6  Dios le dijo: “Tus descendientes vivirán como extranjeros en otro país. Allí serán esclavos, y durante cuatrocientos años los tratarán muy mal.
Hch 7:7  Pero yo castigaré a los habitantes de ese país, y tus descendientes saldrán libres y me adorarán en este lugar.”
Hch 7:8  »Con esta promesa, Dios hizo un pacto con Abraham. Le ordenó que, a partir de ese día, todos los hombres israelitas debían circuncidarse para indicar que Dios los aceptaba como parte de su pueblo. Por eso, cuando nació su hijo Isaac, Abraham esperó ocho días y lo circuncidó. De la misma manera, Isaac circuncidó a su hijo Jacob, y Jacob a sus doce hijos.
Hch 7:9  »José fue uno de los doce hijos de Jacob. Como sus hermanos le tenían envidia, lo vendieron como esclavo a unos comerciantes, que lo llevaron a Egipto. Sin embargo, Dios amaba a José,
Hch 7:10  así que lo ayudó en todos sus problemas; le dio sabiduría y lo hizo una persona muy agradable. Por eso el rey de Egipto lo tomó en cuenta, y lo nombró gobernador de todo Egipto y jefe de su palacio.
Hch 7:11  »Tiempo después, hubo pocas cosechas de trigo en toda la región de Egipto y de Canaán. Nuestros antepasados no tenían nada que comer, ni nada que comprar.
Hch 7:12  Pero Jacob se enteró de que en Egipto había bastante trigo, y envió a sus hijos para que compraran. Los hijos de Jacob fueron allá una primera vez.
Hch 7:13  Cuando fueron la segunda vez, José permitió que sus hermanos lo reconocieran. Así el rey de Egipto conoció más de cerca a la familia de José.
Hch 7:14  »Al final, José ordenó que vinieran a Egipto su padre Jacob y todos sus familiares. Eran en total setenta y cinco personas,
Hch 7:15  que vivieron en Egipto hasta que murieron.
Hch 7:16  Todos ellos fueron enterrados en Siquem, en la misma tumba que Abraham había comprado a los hijos de Hamor.
Hch 7:17  »Pasó el tiempo, y a Dios le pareció bien cumplir la promesa que le había hecho a Abraham. Mientras tanto, en Egipto, cada vez había más y más israelitas.
Hch 7:18  »En Egipto comenzó a gobernar un nuevo rey, que no había oído hablar de José.
Hch 7:19  Este rey fue muy malo con los israelitas y los engañó. Además, los obligó a abandonar a los niños recién nacidos, para que murieran.
Hch 7:20  »En ese tiempo nació Moisés. Era un niño muy hermoso, a quien sus padres cuidaron durante tres meses, sin que nadie se diera cuenta.
Hch 7:21  Luego tuvieron que abandonarlo, pero la hija del rey lo rescató y lo crió como si fuera su propio hijo.
Hch 7:22  Moisés recibió la mejor educación que se daba a los jóvenes egipcios, y llegó a ser un hombre muy importante por lo que decía y hacía.
Hch 7:23  »Cuando Moisés tenía cuarenta años, decidió ir a visitar a los israelitas, porque eran de su propia nación.
Hch 7:24  De pronto, vio que un egipcio maltrataba a un israelita. Sin pensarlo mucho, defendió al israelita y mató al egipcio.
Hch 7:25  »Moisés pensó que los israelitas entenderían que Dios los libraría de la esclavitud por medio de él. Pero ellos no pensaron lo mismo.
Hch 7:26  Al día siguiente, Moisés vio que dos israelitas se estaban peleando. Trató de calmarlos y les dijo: “Ustedes son de la misma nación. ¿Por qué se pelean?”
Hch 7:27  »Pero el que estaba maltratando al otro se dio vuelta, empujó a Moisés y le respondió: “¡Y a ti qué te importa! ¿Quién te ha dicho que tú eres nuestro jefe o nuestro juez?
Hch 7:28  ¿Acaso piensas matarme como al egipcio?”
Hch 7:29  »Al oír eso, Moisés huyó de Egipto tan pronto como pudo, y se fue a vivir a Madián. En ese país vivió como extranjero, y allí nacieron dos de sus hijos.
Hch 7:30  »Pasaron cuarenta años. Pero un día en que Moisés estaba en el desierto, cerca del monte Sinaí, un ángel se le apareció entre un arbusto que ardía en llamas.
Hch 7:31  Moisés tuvo mucho miedo, pero se acercó para ver mejor lo que pasaba. Entonces Dios, con voz muy fuerte le dijo:
Hch 7:32  “Yo soy el Dios de tus antepasados. Soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.” »Moisés empezó a temblar, y ya no se atrevió a mirar más.
Hch 7:33  Pero Dios le dijo: “Quítate las sandalias, porque estás en mi presencia.
Hch 7:34  Yo sé muy bien que mi pueblo Israel sufre mucho, porque los egipcios lo han esclavizado. También he escuchado sus gritos pidiéndome ayuda. Por eso he venido a librarlos del poder egipcio. Así que prepárate, pues voy a mandarte a Egipto.”
Hch 7:35  »Los israelitas rechazaron a Moisés, y le dijeron: “¿Quién te ha dicho que tú eres nuestro jefe o nuestro juez?” Pero Dios mismo lo convirtió en jefe y libertador de su pueblo. Esto lo hizo por medio del ángel que se le apareció a Moisés en el arbusto.
Hch 7:36  »Con milagros y señales maravillosas, Moisés sacó de Egipto a su pueblo. Lo llevó a través del Mar de los Juncos, y durante cuarenta años lo guió por el desierto.
Hch 7:37  Y fue Moisés mismo quien les anunció a los israelitas: “Dios elegirá a uno de nuestro pueblo, para que sea un profeta como yo.”
Hch 7:38  »Moisés estuvo con nuestros antepasados en el desierto, y les comunicó todos los mensajes que el ángel de Dios le dio en el monte Sinaí. Esos mensajes son palabras que dan vida.
Hch 7:39  »Pero los israelitas fueron rebeldes. No quisieron obedecer a Moisés y, en cambio, deseaban volver a Egipto.
Hch 7:40  »Un día, los israelitas le dijeron a Aarón, el hermano de Moisés: “Moisés nos sacó de Egipto, pero ahora no sabemos qué le sucedió. Es mejor que nos hagas un dios, para que sea nuestro guía y protector.”
Hch 7:41  »Hicieron entonces una estatua con forma de toro, y sacrificaron animales para adorarla. Luego hicieron una gran fiesta en honor de la estatua, y estaban muy orgullosos de lo que habían hecho.
Hch 7:42  Por eso Dios decidió olvidarse de ellos, pues se pusieron a adorar a las estrellas del cielo. »En el libro del profeta Amós dice: “Pueblo de Israel, durante los cuarenta años que anduvieron por el desierto, ustedes nunca me presentaron ofrendas para adorarme.
Hch 7:43  En cambio, llevaron en sus hombros la tienda con el altar del dios Moloc y la imagen de la estrella del dios Refán. Ustedes se hicieron esos ídolos y los adoraron. Por eso, yo haré que a ustedes se los lleven lejos, más allá de Babilonia.”
Hch 7:44  »Allí, en el desierto, nuestros antepasados tenían el santuario del pacto, que Moisés construyó según el modelo que Dios le había mostrado.
Hch 7:45  El santuario pasó de padres a hijos, hasta el tiempo en que Josué llegó a ser el nuevo jefe de Israel. Entonces los israelitas llevaron consigo el santuario para ocupar el territorio que Dios estaba quitándoles a otros pueblos. Y el santuario estuvo allí hasta el tiempo del rey David.
Hch 7:46  »Como Dios quería mucho a David, este le pidió permiso para construirle un templo donde el pueblo de Israel pudiera adorarlo.
Hch 7:47  Sin embargo, fue su hijo Salomón quien se lo construyó.
Hch 7:48  »Pero como el Dios todopoderoso no vive en lugares hechos por seres humanos, dijo por medio de un profeta:
Hch 7:49  “El cielo es mi trono; sobre la tierra apoyo mis pies. Nadie puede hacerme una casa donde pueda descansar.
Hch 7:50  Yo hice todo lo que existe.”»
Hch 7:51  Antes de terminar su discurso, Esteban les dijo a los de la Junta Suprema: —¡Ustedes son muy tercos! ¡No entienden el mensaje de Dios! Son igual que sus antepasados. Siempre han desobedecido al Espíritu Santo.
Hch 7:52  Ellos trataron mal a todos los profetas, y mataron a los que habían anunciado la venida de Jesús, el Mesías, al que ustedes traicionaron y mataron.
Hch 7:53  Por medio de los ángeles, todos ustedes recibieron la Ley de Dios, pero no la han obedecido.
Hch 7:54  Al escuchar esto, los de la Junta Suprema se enfurecieron mucho contra Esteban.
Hch 7:55  Pero como Esteban tenía el poder del Espíritu Santo, miró al cielo y vio a Dios en todo su poder. Al lado derecho de Dios estaba Jesús, de pie.
Hch 7:56  Entonces Esteban dijo: «Veo el cielo abierto. Y veo también a Jesús, el Hijo del hombre, de pie en el lugar de honor.»
Hch 7:57  Los de la Junta Suprema se taparon los oídos y gritaron. Luego todos juntos atacaron a Esteban,
Hch 7:58  lo arrastraron fuera de la ciudad, y empezaron a apedrearlo. Los que lo habían acusado falsamente se quitaron sus mantos, y los dejaron a los pies de un joven llamado Saulo.
Hch 7:59  Mientras le tiraban piedras, Esteban oraba así: «Señor Jesús, recíbeme en el cielo.»
Hch 7:60  Luego cayó de rodillas y gritó con todas sus fuerzas: «Señor, no los castigues por este pecado que cometen conmigo.» Y con estas palabras en sus labios, murió.

 


 

Hch 7:1  El kohen hagadol preguntó: "¿Son estas acusaciones verdad?"
Hch 7:2  Y Tzefanyah dijo: "¡Hermanos y padres, escuchen! El Elohim de gloria apareció a Avraham avinu en Mesopotamia antes de que él viviera en Harán,
Hch 7:3  y le dijo: 'Sal de tu tierra y de tu familia, y vete a la tierra que Yo te mostraré.'[Ge 12:1]
Hch 7:4  De modo que dejó la tierra de los Caldeos y vivió en Harán. Después que su padre murió, YAHWEH hizo que se fuera a esta tierra donde ustedes están viviendo ahora.
Hch 7:5  El no le dio herencia en ella, ni siquiera espacio para asentar un pie;[De 2:5] pero le prometió dársela para su posesión y a sus descendientes después de él,[Ge 12:7; 13:15; 15:4, 7, 18 -21; 17:8; 24:7; 48:4] a pesar de que en ese momento no tenía hijos.
Hch 7:6  Lo que YAHWEH le dijo fue: 'Tus descendientes serán extranjeros en tierra foránea, donde serán esclavizados y oprimidos por cuatrocientos años.
Hch 7:7  Mas, Yo juzgaré a la nación que los esclavice, YAHWEH dijo: 'Y después de esto se irán y me adorarán en este lugar.'[Ge 15:13-14, 16]
Hch 7:8  Y le dio la britmilah, de modo que fue padre de Yitzjak y le hizo su brit-milah al octavo día, y Yitzjak fue padre de Ya'akov, y Ya'akov fue el padre de los Doce Patriarcas.
Hch 7:9  "Ahora bien, los Patriarcas tuvieron celos de Yosef, y lo vendieron para esclavitud en Mitzrayim. Pero YAHWEH estaba con él;[Ge 37:11, 28; 39:1-3, 21, 23]
Hch 7:10  El le rescató de todas sus tribulaciones y le dio sabiduría y gozó del favor de Faraón, rey de Mitzrayim, el cual lo nombró gobernador supremo sobre Mitzrayim y sobre toda su casa.[Ge 41:37-44]
Hch 7:11  Sobrevino una hambruna que causó mucho sufrimiento por todo Mitzrayim y Kenaan[Ge 41:54; 42:5]
Hch 7:12  Pero cuando Ya'akov oyó que había grano en Mitzrayim, mandó a nuestros padres allí la primera vez.
Hch 7:13  La segunda vez, Yosef reveló su identidad a sus hermanos,[Ge 45:1] y la familia de Yosef fue dada a conocer a Faraón.
Hch 7:14  Yosef mandó a traer a su padre Ya'akov, y a todos sus familiares, setenta y cinco personas.
Hch 7:15  Y Ya'akov descendió a Mitzrayim, allí murió, igual que nuestros otros padres.
Hch 7:16  Sus cuerpos fueron trasladados a Shijem, y sepultados en la tumba que Avraham había comprado por cierta suma de dinero de la familia de Hamor en Shijem.
Hch 7:17  "Cuando se acercaba el tiempo del cumplimiento de la promesa que YAHWEH le había hecho a Avraham, el número de nuestro pueblo en Mitzrayim creció grandemente,
Hch 7:18  hasta que se levantó sobre Mitzrayim otro rey que no tenía conocimiento de Yosef.[Ex 1:7-8]
Hch 7:19  Este hombre, con astucia cruel, exigió a nuestros padres que sus recién nacidos fueran echados de sus casas, para que no sobrevivieran.
Hch 7:20  "Entonces Moshe nació, y fue hermoso a los ojos de YAHWEH y por tres meses fue criado en casa de su padre;
Hch 7:21  y cuando fue sacado de su casa, la hija de Faraón lo recogió y lo crió como a hijo suyo.
Hch 7:22  De modo que Moshe fue instruido en toda la sabiduría de los Mitzrayimim y fue tanto poderoso orador, como también un hombre de acción
Hch 7:23  "Pero cuando tenía cuarenta años de edad, la idea le vino de visitar a sus hermanos los hijos de Yisra'el.[47]
Hch 7:24  Y al ver que uno estaba siendo maltratado, fue en su defensa, y tomó venganza derribando al Egipcio.
Hch 7:25  El supuso que sus hermanos entendieron que YAHWEH lo estaba utilizando para rescatarlos, pero ellos no comprendieron.
Hch 7:26  Cuando apareció al día siguiente, mientras peleaban, trató de hacer Shalom entre ellos, diciendo: '¡Hombres, ustedes son hermanos! ¿Por qué quieren maltratarse entre sí?'
Hch 7:27  El que estaba maltratando a su compañero le dio un empujón a Moshe, y le dijo: '¿Quién te ha nombrado gobernador y juez entre nosotros?

 


 

Hch 7:1  El sumo sacerdote le dijo a Esteban: -¿Es esto cierto?
Hch 7:2  "Esteban respondió: ""Hermanos y padres, ¡escúchenme! Nuestro glorioso Dios se apareció en Mesopotamia a nuestro antepasado Abraham antes de que él viviera en Harán."
Hch 7:3  "Dios le dijo: 'Sal de tu tierra, deja a tus familiares y ve al país que yo te voy a mostrar'."
Hch 7:4  """Abraham se fue de Caldea para vivir en Harán. Después de la muerte de su padre, Abraham fue traído a esta tierra, donde ustedes viven ahora."
Hch 7:5  "Pero Dios no le dio como herencia ni siquiera un metro de esta tierra. Sin embargo, Dios le prometió que les daría toda esta tierra a él y a sus hijos. Esto pasó antes de que Abraham tuviera hijos."
Hch 7:6  """Dios le dijo: 'Tus descendientes serán extranjeros en tierra extraña, esclavizados y maltratados, por unos cuatrocientos años."
Hch 7:7  "Pero yo castigaré a la nación que los haga esclavos'. Dios también le dijo: 'Después de eso, tu pueblo saldrá de ese país y me adorará aquí'."
Hch 7:8  """Dios hizo un pacto con Abraham y la señal de ese pacto fue la circuncisión. Cuando Abraham tuvo un hijo, él lo circuncidó a los ocho días de nacido. El nombre de su hijo era Isaac, quien a su vez también circuncidó a Jacob, su hijo. Jacob también hizo lo mismo con sus hijos, quienes se convirtieron a su vez en los doce patriarcas."
Hch 7:9  """Los patriarcas tuvieron envidia de José y lo vendieron como esclavo en Egipto, pero Dios estaba con José y"
Hch 7:10  "lo sacó de todos sus problemas. José le caía bien al faraón, rey de Egipto, por toda la sabiduría que Dios le había dado. El faraón nombró a José gobernador de Egipto y del palacio real."
Hch 7:11  "En toda la tierra de Egipto y en Canaán hubo una sequía tan fuerte que causó mucha miseria, y nuestros antepasados no tenían qué comer."
Hch 7:12  """Pero Jacob escuchó que había comida en Egipto y envió a nuestros antepasados allá. Este fue el primer viaje a Egipto."
Hch 7:13  Luego ellos volvieron por segunda vez y José se dio a conocer a sus hermanos. El faraón también se enteró de cuál era la familia de José.
Hch 7:14  "Entonces José envió a unos hombres para traer a su padre Jacob hasta Egipto. También trajo a todos sus familiares, setenta y cinco en total."
Hch 7:15  "Entonces Jacob fue a Egipto, y él y nuestros antepasados vivieron allí hasta que murieron."
Hch 7:16  "Más tarde llevaron sus cuerpos a Siquem, y los pusieron en la misma tumba que Abraham les compró por cierta suma a los hijos de Hamor en Siquem."
Hch 7:17  """Cuando la promesa que Dios le hizo a Abraham estaba muy cerca de cumplirse, nuestro pueblo ya se había multiplicado en Egipto."
Hch 7:18  Entonces llegó al poder en Egipto un rey que no sabía nada de José.
Hch 7:19  Él oprimió con astucia a nuestro pueblo y lo trató con crueldad. Los obligó a abandonar a sus hijos para que murieran.
Hch 7:20  """Moisés nació en esa época. Era un niño muy hermoso, y sus padres lo cuidaron en casa por tres meses."
Hch 7:21  "Cuando lo tuvieron que abandonar, la hija del faraón lo recogió y lo crió como si fuera su propio hijo."
Hch 7:22  Moisés fue educado en toda la sabiduría de los egipcios y llegó a ser un hombre poderoso tanto en sus palabras como en sus hechos.
Hch 7:23  """Cuando Moisés tenía cuarenta años, decidió visitar a sus hermanos israelitas."
Hch 7:24  "Vio a un egipcio maltratando a uno de nuestro pueblo y él lo defendió, golpeando tan fuerte al egipcio, que lo mató."
Hch 7:25  "Moisés pensaba que sus hermanos israelitas entenderían que Dios los iba a liberar por medio de él, pero ellos no lo entendieron."
Hch 7:26  """Al día siguiente, vio a dos israelitas peleando y trató de que hicieran las paces: 'Hombres, ustedes son hermanos. ¿Por qué se están haciendo daño?'"
Hch 7:27  Pero el que estaba peleando con su vecino empujó a Moisés y le dijo: '¿Quién te puso como nuestro juez y gobernador?
Hch 7:28  ¿Quieres matarme como ayer mataste al egipcio?'
Hch 7:29  "Cuando Moisés escuchó esto, escapó y se fue a vivir a la tierra de Madián como extranjero, donde tuvo dos hijos."
Hch 7:30  """Después de cuarenta años, Moisés estaba en el desierto cerca del monte Sinaí cuando un ángel se le apareció en las llamas de un arbusto que ardía."
Hch 7:31  Moisés se asombró al ver eso. Entonces se acercó para ver mejor y oyó la voz del Señor:
Hch 7:32  "'Yo soy el Dios de tus antepasados, el Dios de Abraham, Isaac y Jacob'. Moisés estaba temblando y sintió tanto temor que ni se atrevía a mirar el arbusto."
Hch 7:33  """Entonces el Señor le dijo: 'Quítate las sandalias, porque estás pisando tierra sagrada."
Hch 7:34  He visto que mi pueblo está sufriendo mucho en Egipto'.
Hch 7:35  """A ese mismo Moisés que rechazaron cuando le dijeron: '¿Quién te puso como nuestro juez y gobernador?', Dios lo envió para ser el gobernante y libertador, por medio del ángel que vio en aquel arbusto."
Hch 7:36  "Así que Moisés sacó al pueblo de Egipto. Hizo señales milagrosas en Egipto, en el Mar Rojo y luego en el desierto durante cuarenta años."
Hch 7:37  """Este es el mismo Moisés que les dijo a los israelitas: 'Dios les dará un profeta que vendrá de entre ustedes mismos. Será como yo'."
Hch 7:38  Es el mismo Moisés que estaba con nuestros antepasados en la reunión que hubo en el desierto. Él también estuvo con el ángel que le habló en el monte Sinaí. Moisés recibió enseñanzas que dan vida y nos las dio a nosotros.
Hch 7:39  """Pero nuestros antepasados no le hicieron caso a Moisés, lo rechazaron y prefirieron estar de nuevo en Egipto."
Hch 7:40  Le dijeron a Aarón: 'Haz para nosotros dioses que nos guíen' porque no sabemos qué le pasó a Moisés el que nos sacó de Egipto.
Hch 7:41  Entonces hicieron un ídolo parecido a un becerro y le ofrecieron sacrificios. El pueblo estaba muy feliz por lo que habían hecho con sus propias manos.
Hch 7:42  "Pero Dios se volvió contra ellos, los abandonó y los dejó adorar al sol, a la luna y a las estrellas. Como dice en el libro de los profetas: 'Pueblo de Israel, durante cuarenta años ustedes no me trajeron ofrendas ni me ofrecieron sacrificios en el desierto."
Hch 7:43  "Al contrario, cargaban la carpa para alabar a Moloc y la imagen de la estrella del dios Refán. Estos fueron los ídolos que ustedes mismos hicieron para adorar. Por eso yo los enviaré mas allá de Babilonia'."
Hch 7:44  """La Carpa Sagrada estaba con nuestros antepasados en el desierto. Dios le dijo a Moisés cómo hacer esa carpa y él la hizo según el plan que Dios le mostró."
Hch 7:45  Nuestros antepasados tomaron posesión de las tierras que les pertenecían a las naciones que Dios expulsó delante de ellos. Esa carpa se les entregó en el tiempo de Josué y estuvo con ellos hasta el tiempo de David.
Hch 7:46  "David contaba con la aprobación de Dios, y le pidió permiso para construir un templo donde el pueblo de Jacob pudiera adorar."
Hch 7:47  Pero Salomón fue el que construyó el templo.
Hch 7:48  """Sin embargo, Dios no vive en casas hechas por manos humanas. Como Dios dice por medio del profeta: 'El cielo es mi trono."
Hch 7:49  La tierra es un banquillo para mis pies. ¿Qué clase de casa pueden construir para mí? No hay ningún lugar donde yo necesite descansar.
Hch 7:50  "Recuerden que yo hice todo esto'""."
Hch 7:51  "Esteban continuó diciendo: -¡Ustedes son muy tercos! Son como los paganos en su forma de pensar y de entender. Siempre se rebelan contra el Espíritu Santo, igual que sus antepasados."
Hch 7:52  "¿A cuál de los profetas no persiguieron ellos? Mataron incluso a los que anunciaron que el Justo iba a venir, el mismo al que ahora ustedes traicionaron y mataron."
Hch 7:53  "Ustedes recibieron la ley de Dios por medio de ángeles, pero no la obedecen."
Hch 7:54  "Al escuchar eso, se molestaron tanto que se les veía en la cara lo furiosos que estaban."
Hch 7:55  "Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, miró al cielo, vio el esplendor de Dios, y a Jesús de pie a la derecha de Dios."
Hch 7:56  Entonces dijo: -¡Miren! Veo el cielo abierto y al Hijo del hombre de pie a la derecha de Dios.
Hch 7:57  "Todos empezaron a gritar muy fuerte, se taparon los oídos y se lanzaron contra él."
Hch 7:58  Lo sacaron a empujones de la ciudad y empezaron a tirarle piedras. Los que dieron falso testimonio contra Esteban dejaron sus mantos al cuidado de un joven llamado Saulo.
Hch 7:59  "Ellos siguieron tirándole piedras a Esteban, pero él oraba: ""Señor Jesús, recibe mi espíritu""."
Hch 7:60  "Después, se arrodilló y gritó muy fuerte: ""¡Señor, no les tomes en cuenta este pecado!"" Y después de decir esto, murió."

 


 
  Conocen nuestro sitio 597295 visitantes (2109605 clics a subpáginas) ¡Que nuestro Dios ensanche tu Territorio!  
 
Este sitio web fue creado de forma gratuita con PaginaWebGratis.es. ¿Quieres también tu sitio web propio?
Registrarse gratis