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Los ricos injustos, señal del fin.
V1
Ahora, ricos, llorad y aullad por las miserias que os vendrán.*
V2
Vuestra riqueza está podrida, vuestra ropa está comida de polilla.*
V3
Vuestro oro y plata están enmohecidos, y su moho testificará contra vosotros, y devorará vuestra carne como fuego. Habéis acumulado tesoros para los últimos días.
V4
El jornal de los obreros que han segado vuestros campos, y que por engaño no les habéis pagado, clama. Y el clamor de los segadores ha entrado en los oídos del Señor Todopoderoso.*
V5
Habéis vivido en deleites sobre la tierra, y habéis sido disolutos. Habéis cebado vuestro corazón como en el día de la matanza.
V6
Habéis condenado y muerto al justo, y él no os resiste.
Necesidad de la paciencia.
V7
Hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra. Aguarda con paciencia hasta recibir la lluvia temprana y tardía.
V8
Tened también vosotros paciencia, afirmad vuestro corazón, porque la venida del Señor se acerca.*
V9
Hermanos, no os quejéis unos de otros, para que no seáis condenados. Mirad que el Juez está a la puerta.*
V10
Hermanos míos, tomad por modelo de aflicción y paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor.*
V11
Consideramos felices a los que soportaron con paciencia. Habéis oído la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor. El Señor es muy misericordioso y compasivo.
V12
Sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni con ningún otro juramento. Vuestro "sí" sea "sí", y vuestro "no" sea "no"; para que no caigáis en condenación.
La oración por los enfermos.
V13
¿Está alguno afligido entre vosotros? Ore a Dios. ) ¿Está alguno alegre? ¡Cante alabanzas!
V14
¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia y oren por él, ungiéndole con aceite en el Nombre del Señor.*
V15
Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará. Y si hubiera cometido pecados, le serán perdonados.
V16
Por lo tanto, confesaos vuestras faltas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo, es poderosa.*
V17
Elías era hombre sujeto a semejantes pasiones que nosotros, y oró con fervor que no lloviese, y no llovió sobre la tierra en tres años y seis meses.
V18
Otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto.
Restaurad al que se desvía.
V19
Hermanos, si alguno de vosotros se desvía de la verdad, y otro le ayuda a volver,
V20
sabed que quien convierte a un pecador del error de su camino, lo salvará de la muerte, y cubrirá multitud de pecados.
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